Vestidos de (premio) goya
Los candidatos a mejor dise?o y sus actores explican el reto de vestir un personaje.
Dicen los expertos que cuando el espectador no repara en el vestuario de una pel¨ªcula es porque est¨¢ bien hecho. Las cuatro opciones para ganar el Goya en esta categor¨ªa en la gala del pr¨®ximo s¨¢bado no pod¨ªan ser m¨¢s diferentes ¨Cciencia ficci¨®n, drama, acci¨®n y comedia rom¨¢ntica¨C, pero todas tienen algo en com¨²n: ninguna de las prendas que lucen sus protagonistas est¨¢ dejada al azar. Los figurinistas encargados de vestir a los actores de Aut¨®mata, La isla m¨ªnima, El ni?o y Por un pu?ado de besos se disputan uno de los galardones m¨¢s re?idos de las ¨²ltimas edicione...
Dicen los expertos que cuando el espectador no repara en el vestuario de una pel¨ªcula es porque est¨¢ bien hecho. Las cuatro opciones para ganar el Goya en esta categor¨ªa en la gala del pr¨®ximo s¨¢bado no pod¨ªan ser m¨¢s diferentes ¨Cciencia ficci¨®n, drama, acci¨®n y comedia rom¨¢ntica¨C, pero todas tienen algo en com¨²n: ninguna de las prendas que lucen sus protagonistas est¨¢ dejada al azar. Los figurinistas encargados de vestir a los actores de Aut¨®mata, La isla m¨ªnima, El ni?o y Por un pu?ado de besos se disputan uno de los galardones m¨¢s re?idos de las ¨²ltimas ediciones. Reunimos a los cuatro nominados al Goya al Mejor Dise?o de Vestuario y a los actores que lucieron sus creaciones en la gran pantalla con las prendas originales para que los int¨¦rpretes vuelvan a meterse, por ¨²ltima vez, en la piel (y en el traje) de sus personajes.
TATIANA HERN?NDEZ
¡®El Ni?o¡¯. Cuarta nominaci¨®n. Ganadora de un Goya por ¡®Lope¡¯.
Desde que Tatiana probara suerte como directora de arte en Esposados ¨Cel cortometraje rodado por Juan Carlos Fresnadillo en 1996 que logr¨® una nominaci¨®n al Oscar¨C su carrera ha sido un continuo ascenso que la ha llevado a crear el vestuario de m¨¢s de 20 rodajes. ?Pienso que he ido r¨¢pido. He hecho cosas muy diferentes; sobre todo he tenido la suerte de estar rodeada de mucho talento. Y siempre se pega algo?, afirma. Acaba de estrenar Las ovejas no pierden el tren, de ?lvaro Fern¨¢ndez Armero, donde al igual que en El ni?o, de Daniel Monz¨®n, part¨ªa de una premisa muy l¨®gica: ?En este tipo de pel¨ªculas hay que realizar un trabajo de documentaci¨®n bestial, porque si metes la pata todo el mundo lo puede notar, el sur de Espa?a est¨¢ ah¨ª. Como existe el riesgo de que te coma el clich¨¦, precisamente de lo que hay que huir, se liman ciertas cosas para introducirlas en el contexto de la pel¨ªcula?.
Tatiana sabe que lo m¨¢s importante es que el actor no se sienta disfrazado. ?Debe tener la impresi¨®n de que la ropa la he tra¨ªdo del armario de su casa. Y para eso hacen falta muchas pruebas. Para m¨ª, la factura de una pel¨ªcula engloba fotograf¨ªa, maquillaje, vestuario y direcci¨®n de arte. El error en un campo perjudica el trabajo del resto?, admite. Como curiosidad, recuerda que, de las dos opciones que ten¨ªa para Jes¨²s Castro ¨Cnominado como Mejor Actor Revelaci¨®n¨C, le dijo que un conjunto iba a ser para ¨¦l. ?Tengo hasta el neopreno en casa -afirma este-. Tambi¨¦n me qued¨¦ la piedra que traigo de ?frica en la pel¨ªcula. ?C¨®mo no voy a querer guardarlo todo? El ni?o pasa solo una vez en la vida?, enfatiza Jes¨²s. Tatiana reconoce que es habitual que los int¨¦rpretes, e incluso los directores, quieran conservar sus atuendos como recuerdo: Bel¨¦n Rueda le pidi¨® el vestuario que utiliz¨® en El mal ajeno y Juan Carlos Fresnadillo tiene enmarcada en casa una de las camisetas que usaba Leonardo Sbaraglia en Intacto. Pero no siempre resulta f¨¢cil conservar las creaciones hechas para la gran pantalla. ?En el cine de acci¨®n hay poca cesi¨®n de ropa, porque termina tan mal que es imposible devolverla sana y salva. Todo se hace y se compra, para desgracia del presupuesto?.
Nerea Barros, Javier Guti¨¦rrez, Cleo, Jes¨²s Castro y Marti?o Rivas.
Mirta Rojo
FERNANDO GARC?A
¡®La isla m¨ªnima¡¯. Segunda nominaci¨®n.
En principio es el favorito de la noche. Su visi¨®n de un pueblo sevillano en los ochenta ha sido muy alabada, pero reconoce que, pase lo que pase, el subid¨®n no se lo quita nadie. El nuevo a?o est¨¢ plagado de proyectos: ?En abril empiezo a rodar otra vez con Alberto Rodr¨ªguez. Adem¨¢s estreno A Perfect Day, con Tim Robbins y Benicio del Toro, acabo de hacer la ¨²ltima de Elena Anaya¡ Y despu¨¦s de los Goya me voy de vacaciones. ?Como para quejarme!?. Para dise?ar el vestuario de La isla m¨ªnima, Garc¨ªa indag¨® en ¨¢lbumes familiares de la ¨¦poca y en las instant¨¢neas que encontr¨® en un estudio de fotograf¨ªa de Isla Mayor (Sevilla). A partir de ah¨ª recuerda mil an¨¦cdotas. Una de ellas: ley¨® que a Sarkozy le hac¨ªa las botas a medida un zapatero local, as¨ª que lo busc¨® para que confeccionara buena parte del calzado. En el caso del actor Javier Guti¨¦rrez, los zapatos llevaban unas alzas de siete cent¨ªmetros que fabric¨® el mismo experto que hizo las de Tom Cruise en Noche y d¨ªa.
Encontrar el punto justo no fue f¨¢cil. De nuevo, miedo a caer en estereotipos. ?La ropa refleja una ¨¦poca, pero sin encajes ni volantes. Siempre he tenido claro que era m¨¢s dif¨ªcil hacer esta pel¨ªcula que Isabel, por ejemplo?. ?C¨®mo encontr¨® el tono de la pel¨ªcula? ?Necesitaban un ambiente asfixiante, por eso no existen colores primarios: todo es tostado y hay mucho pardo?. Dar un estilo propio a cada protagonista fue un reto. ?Quer¨ªa que los dos tipos que llegan de Madrid resultaran atractivos. Todos los trajes de Javier est¨¢n hechos a medida, con referencias de Felipe Gonz¨¢lez y Adolfo Su¨¢rez en su d¨ªa a d¨ªa. Para Ra¨²l Ar¨¦valo llegu¨¦ a fijarme en algunas cosas de Robert de Niro en Toro salvaje. Y respecto a Nerea Barros busqu¨¦ ropa grande y faldas largas para que no se viera el pib¨®n que es?, dice. La actriz recuerda las pruebas de vestuario como algo ?perfecto, donde llamaba la atenci¨®n la confianza que se cre¨® desde el primer momento. Si la ropa sienta bien, el actor tiene mucho ganado?. Javier Guti¨¦rrez cree que el dise?ador encontr¨® r¨¢pidamente la clave, ya que ide¨® un polic¨ªa ?que ten¨ªa que ir perfecto, nada desali?ado, porque donde est¨¢ roto es por dentro?. Asegura que impresiona ponerse de nuevo la ropa de su personaje para esta sesi¨®n: ?Me he emocionado¡ Aunque me he vestido solo, en el ba?o, y al salir no te sientes en el mismo contexto que cuando est¨¢s rodando?.
CRISTINA RODR?GUEZ
¡®Por un pu?ado de besos¡¯. Tercera nominaci¨®n.
?Ya estoy acostumbrada a creer que me levanto pero no y a poner cara de p¨®quer?, bromea Cristina sobre su experiencia como finalista en otras ediciones de los Goya. Con tres pel¨ªculas pendientes de estreno este a?o y una serie de televisi¨®n en ciernes, es uno de los pesos pesados del vestuario espa?ol, con casi 60 cintas a sus espaldas. Para esta comedia rom¨¢ntica de David Menkes quiso crear una normalidad artificial. ?Se trataba de mostrar a gente con una vida corriente, pero con una est¨¦tica especial. Desde el principio marcamos que el color solo estar¨ªa en el pelo de Ana de Armas, por lo que todo en el vestuario es negro, blanco o, como mucho, pastel. Hasta en los figurantes?, cuenta Cristina. Afirma que se entiende mejor con los directores que arriesgan: ?Me gusta que la gente cambie de idea, siempre que me lo diga con tiempo de reacci¨®n. Creo que las dificultades son una herramienta m¨¢s para hacer un trabajo mejor. En esta pel¨ªcula, por ejemplo, customic¨¦ mucho las prendas: convertir vestidos en faldas, camisetas en vestidos¡ Casi todo lo que hay fue prestado por marcas como Religion, Levi¡¯s, Diesel o Bunker, y en distintas sesiones fuimos viendo lo que funcionaba?.
Aunque vestir a un personaje que se desenvuelve en la ¨¦poca actual puede parecer sencillo, el trabajo no siempre es f¨¢cil. ?Nada en el cine es al azar. La gente piensa que en una pel¨ªcula contempor¨¢nea los actores vienen con ropa que traen de su casa, pero no es as¨ª; les llevo hasta los sujetadores y los calzoncillos?. Marti?o Rivas lo confirma y corrobora que las pruebas de vestuario son algo m¨¢s que ir a ver si la ropa es de su talla o no. ?Entre todos creamos una est¨¦tica muy urbana para mi personaje, punk rockero pero nada compuesto, d¨¢ndole vueltas para que tuviera sentido?. Porque la indumentaria puede condicionar una actuaci¨®n. ?Parece una tonter¨ªa, pero el calzado transforma hasta tu forma de andar, y al resto de la ropa le pasa igual. A m¨ª me ha llegado a cambiar percepciones de mi trabajo que me han llegado a sorprender?, explica Marti?o.
ARMAVENI STOYANOVA
¡®Aut¨®mata¡¯. Primera nominaci¨®n.
Cuando Antonio Banderas y el director Gabe Ib¨¢?ez encontraron en Bulgaria financiaci¨®n para levantar su proyecto Aut¨®mata, una de las condiciones fue rodar all¨ª y contar con profesionales locales para el equipo t¨¦cnico. As¨ª, Patrick Salvador, dise?ador de producci¨®n de la pel¨ªcula, descubri¨® a la joven Armaveni Stoyanova. ?Ten¨ªamos tres opciones: dos ven¨ªan del cine y ella de la moda. Aunque le faltaba oficio era mucho m¨¢s libre, y su inconsciencia le hizo entender la pel¨ªcula mejor que a ninguna otra?, recuerda el barcelon¨¦s, que posa para S Moda representando a Armaveni, que no pod¨ªa viajar porque acaba de ser mam¨¢.
Seg¨²n cuenta, el desaf¨ªo de la ciencia ficci¨®n radica en responder a todas las preguntas. Y en el robotizado 2044 que plantea el filme hab¨ªa muchas. ?La historia cuenta que las m¨¢quinas trajeron la esperanza y no sali¨® bien. Al acabar esa esperanza, por ejemplo, desaparecieran los colores?. Una de las referencias fue el Nueva York de los 80, ?con sus picos de decadencia, donde todo lo que no era Studio 54 era de una tristeza brutal?, se?ala Patrick. Con esas premisas, Armaveni cre¨® un mundo nuevo. Dise?adora de ropa y joyas de ¨¦xito en su pa¨ªs, reconoce que el estado de ¨¢nimo de un futuro sin esperanza est¨¢ muy lejos de su personalidad. ?Por eso trat¨¦ de encontrar algo que diera luz. Cuando vi los robots, todo acab¨® en el lugar correcto. Creo que me enamor¨¦ de ellos, me dieron la pizca de belleza y romanticismo que necesitaba?, cuenta desde Bulgaria. Consciente de la complicaci¨®n de crear el vestuario de un tiempo que no conocemos, parti¨® de la premisa del director de dar vida a un futuro barato y decadente. ?No result¨® dif¨ªcil vestir a los aut¨®matas, fueron m¨¢s complicados los actores, porque algunos llegaban la noche antes de rodar. Cosas del cine¡?.