Vuelve la gabardina (aunque ahora se llama trench)

Si la britman¨ªa es oficialmente una epidem¨ªa global, normal que el trench no pase de moda nunca y siga siendo el monarca en el reino del abrigo. Ni parkas, ni anoraks, ni chaquetones, ni capas: la gabardina de toda la vida no se achica ante el paso del tiempo o el ir y venir de tendencias y modas. Es la prenda favorita para un 46% de las espa?olas encuestadas por Smoda.

Igual que la parka, la gabardina tiene su ...

Si la britman¨ªa es oficialmente una epidem¨ªa global, normal que el trench no pase de moda nunca y siga siendo el monarca en el reino del abrigo. Ni parkas, ni anoraks, ni chaquetones, ni capas: la gabardina de toda la vida no se achica ante el paso del tiempo o el ir y venir de tendencias y modas. Es la prenda favorita para un 46% de las espa?olas encuestadas por Smoda.

Igual que la parka, la gabardina tiene su origen en los uniformes militares aunque en su caso exclusivo de altos rangos. Introducido en el Ej¨¦rcito Brit¨¢nico a propuesta de Thomas Burberry, fundador de la firma hom¨®nima y creador del tejido que le da nombre (gabardina, en origen hebras de lana) solamente los oficiales de las tropas de su majestad estaban autorizados a llevarla; siempre engalanada con hombreras remachadas de chapas condecorativas y argollas -hebillas en forma de D- para poder cargar munici¨®n. Estos mandos superiores le cogieron tanto gusto al trench?que se lo llevaban puesto a casa cuando estaban fuera de servicio servicio y empezaron a utilizarlo en su vida diaria: no s¨®lo de un pu?ado de fashionistas depende que algo pase de puro equipamiento a aut¨¦ntico objeto de culto.

Tras perder sus detalles belicosos e introducir elementos pr¨¢cticos -se a?aden dobles botonaduras para reforzar el cierre ¨²nicamente mediante cintur¨®n- la gabardina se mud¨® de los escenarios de guerra en a?os sucesivos, a la novela negra y a las pel¨ªculas policiacas,?hasta desembarcar finalmente en el armario femenino y convertirse en unisex.

Catherine Deneuve barniz¨® de glamour el trench en la Belle de Jour de Bu?uel -literalmente porque uno de los dise?os m¨¢s c¨¦lebres que luc¨ªa era de charol- y desde entonces es sin¨®nimo de clase sin esfuerzo. Una baza intemporal de fondo de armario que triunfa y apetece aunque no se lave la cara. M¨¢s que transformarse, la gabardina, ahora al alcance de todo el mundo tras popularizarse como la p¨®lvora, se vigoriza con peque?os retoques alojados en su tradicional seno seg¨²n los hits accidentales?de cada a?o.?Tan divulgada est¨¢ que hasta tiene su propio facebook: en 2009 Burberry cre¨® Art of the Trench, una p¨¢gina?donde los fans de esta ic¨®nica prenda comparten sus fotos.

Normalmente es de algod¨®n, forrada o no, y aunque no quita mucho el fr¨ªo est¨¢ pensada para frenar el viento. Algunas de sus variedades la confeccionan en denim, tejidos como la seda, pl¨¢stico, tweed o cuero y ¨²ltimamente se eliminan sus mangas, su cuello o solapas, y se le a?aden volantes o se estampa.

Las?celebrities no se han resistido a sus encantos y las hay que han llegado a iconos de su mano: Alexa Chung podr¨ªa escribir su perfecto manual de uso.