Una escuela mejor para los alumnos desfavorecidos

A la escuela espa?ola se le amontonaron los desaf¨ªos en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Apenas estaba terminando de digerir la extensi¨®n de la escolarizaci¨®n obligatoria hasta los 16 a?os, cuando se encontr¨® de bruces con un espectacular aumento de la poblaci¨®n inmigrante. Estos chavales, con su enorme heterogeneidad de idiomas, culturas y niveles educativos, pasaron de ser el 1,4% de los escolares en 1999, al 5,6% en 2003 y casi el 10% en 2008. Y, adem¨¢s, se concentraron sobre todo en la escuela p¨²blica.

?C¨®mo asumi¨® el sistema este reto? ¡°Se hizo como se pudo¡±, opina la profesora de la Universidad Aut¨®noma de Madrid Luisa Mart¨ªn Rojo, con mucho esfuerzo, a veces con desorientaci¨®n, reutilizando programas de apoyo y de compensatoria y, luego, con planes de acogida espec¨ªficos que, aunque son muy mejorables, han hecho una labor. Ahora, hace balance: ¡°Ni alarmismos ni complacencia; hay una lenta mejor¨ªa, pero queda mucho por hacer¡±.

Lo dice a la luz de sus propios trabajos y de los resultados de la Investigaci¨®n Longitudinal sobre la Segunda Generaci¨®n en Espa?a, del Instituto Universitario Ortega y Gasset y Princeton. Esta se?ala que la nota media de los hijos de extranjeros nacidos en Espa?a o llegados antes de los 12 a?os (6,15) est¨¢ solo medio punto por debajo de los espa?oles, y que el 80% de los chicos de 17 a 18 a?os encuestados en 2008 segu¨ªa en la escuela en 2012.

¡°Los alumnos extranjeros de infantil no presentan muchos problemas para el profesorado, puesto que no obligan a casi ning¨²n cambio en la actitud y el m¨¦todo. Con los de primaria, los problemas se resuelven r¨¢pidamente debido a la edad y su capacidad de aprendizaje e integraci¨®n en el grupo¡±, explica el profesor de la Universidad de Le¨®n Enrique D¨ªez. Los problemas est¨¢n en la ESO, a?ade, con chicos que llegan m¨¢s mayores ¡°con desconocimiento de la lengua, a una realidad y un entorno social nuevos¡±.

Es decir, que cuanto antes llegan a la escuela, m¨¢s se aleja su problem¨¢tica de la de la inmigraci¨®n en s¨ª y m¨¢s se acerca a la de cualquier otro chaval de entornos desfavorecidos. Y el examen Pisa de la OCDE, que siempre se suele poner como ejemplo negativo porque la media de los alumnos espa?oles de 15 a?os est¨¢ por debajo de la de los pa¨ªses desarrollados, siempre ha dicho tambi¨¦n que el sistema espa?ol es equitativo y que funciona mejor con los alumnos desfavorecidos.

En Pisa 2009, los estudiantes con rentas m¨¢s bajas obtuvieron una nota por encima de la media OCDE (423 puntos frente a 417), mientras que los chicos con rentas m¨¢s altas estaban muy por debajo (539 frente a 569). Adem¨¢s, Espa?a es el octavo pa¨ªs desarrollado con m¨¢s alumnos resilientes, que obtienen las calificaciones m¨¢s altas procediendo de las clases m¨¢s pobres: 36%.

Todo esto no quiere decir que no quede mucho por mejorar en general, y en la atenci¨®n a inmigrantes en particular, sin contar con el retroceso que pueden significar los recortes (de m¨¢s de 6.700 millones de euros en tres a?os), que se han llevado por delante muchos de esos programas de apoyo. La investigaci¨®n del Ortega y Gasset y Princeton dice que solo un 5% de los inmigrantes de segunda generaci¨®n llega a la Universidad, a pesar de que a m¨¢s del 70% le gustar¨ªa hacerlo, y un 57% cree que lo conseguir¨¢.