Ceuta inmoviliza 100 perros tras diagnosticar la rabia a un cachorro llegado de Marruecos

El Gobierno de la ciudad aut¨®noma de Ceuta ha declarado formalmente la existencia de un foco de rabia, el primero desde 2012, con nivel de alerta 1 tras confirmar el Instituto de Salud Carlos III que un cachorro de tres meses que estaba en una perrera ha dado positivo por la enfermedad.

El perro lleg¨® a la instalaci¨®n tras ser recogido en Marruecos, pa¨ªs donde la enfermedad es end¨¦mica, por una persona que lo llev¨® a la protectora de animales. Las autoridades investigan ahora c¨®mo esta persona, que ya "ha sido identificada", pudo cruzar la frontera sin los certificados de vacunaci¨®n en regla.

El consejero de Sanidad del Gobierno de Ceuta, Javier Guerrero, ha informado esta ma?ana que el plan de medidas aprobado para hacer frente al brote prev¨¦ la clausura de las instalaciones en las que estaba el animal infectado, en las que hay "de 80 a 100 perros y entre 30 y 40 gatos". Los animales ser¨¢n sometidos a cuarentena y las 36 personas con relaci¨®n con las instalaciones y el diagn¨®stico (voluntarios, veterinarios, familiares...) han sido evaluadas. De ellas, "algunas no han requerido tratamiento, otras han sido vacunadas y a otras se les ha puesto la vacuna y la gammaglobulina", ha explicado Ana Rivas, jefa de epidemiolog¨ªa de la Consejer¨ªa de Sanidad ceut¨ª.

La rabia es una enfermedad causada por un virus que resulta mortal en pr¨¢cticamente el 100% de los casos cuando quien la sufre empieza a desarrollar los s¨ªntomas (fiebre moderada, dolor, n¨¢useas, cambios de comportamiento, espasmos, hidrofobia...).

Aunque la rabia puede afectar muchos mam¨ªferos silvestres, la principal amenaza para el hombre son los perros no vacunados y, en menor medida, los murci¨¦lagos. El virus se transmite por la mordedura de un animal infectado, cuya saliva hace llegar al pat¨®geno al sistema nervioso, o la entrada en contacto con sus fluidos. El periodo de incubaci¨®n suele ser de cinco a 20 d¨ªas, aunque puede durar meses.

Ante la sospecha de que una persona ha podido estado en contacto con el virus, la indicaci¨®n es el tratamiento postexposici¨®n: el lavado de la herida con abundante agua y jab¨®n si ha existido mordedura, una inyecci¨®n de inmunoglobulina antirr¨¢bica y una pauta de vacunas.

Guerrero ha explicado que el cachorro fue llevado a la perrera el pasado 6 de junio y que pasaron dos semanas hasta que mostr¨® "s¨ªntomas sospechosos". Los responsables de la instalaci¨®n lo llevaron entonces a un veterinario de la ciudad, que fue quien lanz¨® la alerta. El animal fue sacrificado y las muestras de su tejido nervioso enviadas al Instituto de Salud Carlos III para su an¨¢lisis.

Las autoridades de Ceuta quieren lanzar un mensaje de tranquilidad, pese a que no ocultan su preocupaci¨®n por lo ocurrido. El hecho de que el cachorro estuviera en un recinto cerrado, y no libre por la calle, est¨¢ permitiendo a los veterinarios y sanitarios implicados acotar con mayor seguridad todos los posibles contactos de riesgo.

La ciudad aut¨®noma, que regularmente desarrolla campa?as de vacunaci¨®n gratuita y obligatoria para gatos, perros y hurones, va a prolongar la que estaba actualmente abierta. Tambi¨¦n obliga a los due?os de canes a pasearlos con "correas no extensibles de hasta dos metros de longitud". Si muestran un comportamiento especialmente nervioso tambi¨¦n tendr¨¢n que llevar bozal y han recomendado evitar las aglomeraciones de perros en parques y espacios p¨²blicos en las pr¨®ximas semanas.

Los t¨¦cnicos han repetido que las personas que se dedican a dar de comer a esas colonias deben dejar de hacerlo y han pedido al conjunto de la ciudadan¨ªa que evite el contacto con los gatos callejeros de las ¨¢reas urbanas.

Los propietarios de perros y gatos podr¨¢n viajar con ellos a la Pen¨ªnsula siempre y cuando porten sus pasaportes comunitarios con la vacunaci¨®n antirr¨¢bica "en regla". Tambi¨¦n podr¨¢n cruzar la frontera si cuentan con la preceptiva "titulaci¨®n de anticuerpos".

El ¨²ltimo caso de rabia en Ceuta se registr¨® en 2012 tras confirmarse la enfermedad en un perro vagabundo. Las autoridades "reforzar¨¢n" los controles fronterizos con Marruecos y en el Puerto, y reforzar¨¢ las medidas de control para intentar acabar con los grupos de perros asilvestrados que viven en las zonas forestales de la ciudad.