Preocupaci¨®n en la pasarela de moda de Par¨ªs
Tres marcas han suspendido sus desfiles, no hay compradores asi¨¢ticos y en las gradas circula el l¨ªquido desinfectante
Apenas se ven mascarillas y todo transcurre con aparente normalidad en la semana de la moda de Par¨ªs. Pero una preocupaci¨®n de fondo va creciendo seg¨²n avanzan los d¨ªas: se gastan menos bromas y hay m¨¢s gel desinfectante. La epidemia del coronavirus se hace notar fundamentalmente en la ausencia de periodistas y compradores asi¨¢ticos. Tres marcas han decidido suspender sus desfiles hasta la fecha: A.P.C., Ang¨¨s B. y Sandro. Pero la lista de presentaciones y aperturas de tiendas ...
Apenas se ven mascarillas y todo transcurre con aparente normalidad en la semana de la moda de Par¨ªs. Pero una preocupaci¨®n de fondo va creciendo seg¨²n avanzan los d¨ªas: se gastan menos bromas y hay m¨¢s gel desinfectante. La epidemia del coronavirus se hace notar fundamentalmente en la ausencia de periodistas y compradores asi¨¢ticos. Tres marcas han decidido suspender sus desfiles hasta la fecha: A.P.C., Ang¨¨s B. y Sandro. Pero la lista de presentaciones y aperturas de tiendas canceladas va engros¨¢ndose d¨ªa a d¨ªa. Hugo Boss, Ralph Lauren, Messika y hasta la todopoderosa Cartier han decidido posponer sus eventos hasta nuevo aviso.
En las gradas de los desfiles circula el l¨ªquido desinfectante con m¨¢s alegr¨ªa que en bares, transportes p¨²blicos y tiendas, donde se respira un ambiente distendido. No hay showroom ni presentaci¨®n que no tenga gel higienizante. Y, a juzgar por el estado de los envases, se usa con fruici¨®n. Al fin y al cabo, muchos de los periodistas y compradores que est¨¢n ahora en Par¨ªs acudieron la semana pasada a la pasarela de Mil¨¢n, incluidos, claro est¨¢, los propios medios y equipos de marcas italianas que desfilan o muestran sus colecciones en la capital francesa.
Seg¨²n avanza la cita parisiense, la gente deja de saludarse estrech¨¢ndose la mano para hacerlo con un arqueo de cejas o, en el caso de los m¨¢s efusivos, con un ligero movimiento de cabeza. Solo los espa?oles contin¨²an bes¨¢ndose entre ellos y, en alguna ocasi¨®n, a alg¨²n otro invitado extranjero que reacciona con gesto de inquietud. Las toses comienzan a provocar giros de cabeza m¨¢s bruscos que Gigi Hadid envuelta en transparencias. Casi resulta un milagro que no haya una epidemia de contracturas cervicales.
Las bromas que al principio de la semana se gastaban con ligereza hace ya unos d¨ªas que se han convertido en preocupadas conversaciones sobre los efectos que el contagio tendr¨¢ en la industria del lujo: la ralentizaci¨®n del consumo, la congelaci¨®n del turismo asi¨¢tico, y la decisi¨®n de algunos grupos internacionales de suspender cualquier tipo de viaje prev¨¦n una ca¨ªda en las ventas y los ingresos que acarrear¨¢ recortes y cambios estructurales.