Adolfo Nicol¨¢s, di¨¢logo interreligioso y compromiso con la justicia
La vida del te¨®logo jesuita Adolfo Nicol¨¢s, fallecido el 20 de mayo en Tokio a los 84 a?os, sigui¨® el itinerario geocultural y religioso del padre Pedro Arrupe, a quien tuvo como gu¨ªa en el di¨¢logo Oriente-Occidente, la actividad teol¨®gica, el trabajo misionero y el compromiso por la justicia, y cuyo trato irrespetuoso y carente de compasi¨®n por parte de Juan Pablo II vivi¨® con profundo dolor. Nicol¨¢s ten¨ªa una excelente formaci¨®n interdisciplinar. ...
La vida del te¨®logo jesuita Adolfo Nicol¨¢s, fallecido el 20 de mayo en Tokio a los 84 a?os, sigui¨® el itinerario geocultural y religioso del padre Pedro Arrupe, a quien tuvo como gu¨ªa en el di¨¢logo Oriente-Occidente, la actividad teol¨®gica, el trabajo misionero y el compromiso por la justicia, y cuyo trato irrespetuoso y carente de compasi¨®n por parte de Juan Pablo II vivi¨® con profundo dolor. Nicol¨¢s ten¨ªa una excelente formaci¨®n interdisciplinar. Estudi¨® filosof¨ªa en la facultad de los Jesuitas de Alcal¨¢ de Henares y teolog¨ªa en la universidad de Sof¨ªa de Tokio y en la Universidad Gregoriana de Roma, donde se doctor¨® en 1971 con la tesis Teolog¨ªa del progreso bajo la direcci¨®n del te¨®logo espa?ol Juan Alfaro, quien en el pr¨®logo destaca el estudio exhaustivo del tema, el rigor en el an¨¢lisis, la serena objetividad, el sobrio equilibrio y el sentido cr¨ªtico de la investigaci¨®n.
Publicada por la editorial S¨ªgueme en 1972, me result¨® especialmente iluminadora en mis cursos de doctorado, la elaboraci¨®n de mi tesis y mis primeros a?os de docencia teol¨®gica. La obra analiza las tendencias m¨¢s creativas de la teolog¨ªa cat¨®lica de los 25 a?os posteriores a la Segunda Guerra Mundial, que supusieron un cambio de paradigma en la manera de hacer teolog¨ªa, ¡°una teolog¨ªa en proceso de formaci¨®n¡±, dice Nicol¨¢s, como respuesta a los desaf¨ªos de ese momento hist¨®rico: teolog¨ªa de la historia, de las realidades terrenas, del trabajo, del progreso y teolog¨ªa pol¨ªtica.
Terminada la tesis, volvi¨® a Asia en 1971, donde hab¨ªa llegado por primera vez 10 a?os antes con apenas 25 a?os. All¨ª desarroll¨® tres tipos de actividades: la docencia teol¨®gica en la universidad de Sof¨ªa de Tokio, conforme a la plural realidad religiosa, cultural y antropol¨®gica asi¨¢tica, bien diferente de la occidental, las funciones de direcci¨®n y coordinaci¨®n dentro de la Compa?¨ªa y el trabajo solidario con personas inmigrantes de Filipinas y otros pa¨ªses asi¨¢ticos residentes en Tokio.
En 2008 fue elegido superior general de la Compa?¨ªa de Jes¨²s con un programa de gobierno centrado en la opci¨®n por los pobres. ¡°Aqu¨ª estamos todas las naciones geogr¨¢ficas ¡ªdijo ante un auditorio de jesuitas de todo el mundo¡ª, pero quiz¨¢ existen otras naciones no geogr¨¢ficas, sino humanas que reclaman nuestra existencia: los pobres, los marginados, los excluidos. En este mundo globalizado aumenta el n¨²mero de los que son excluidos por todos, de los que son disminuidos, porque en la sociedad solo tienen cabida los grandes, no los peque?os. Todos los desaventajados, los manipulados son quiz¨¢ para nosotros estas ¡®naciones¡±.
Su direcci¨®n de la Compa?¨ªa de Jes¨²s se caracteriz¨® por la transparencia, que ¨¦l mismo defin¨ªa como actitud responsable para el bien de los dem¨¢s. La diversidad cultural, religiosa, espiritual y ¨¦tnica y su profundo conocimiento de las religiones orientales, especialmente del budismo y del sinto¨ªsmo, le condujeron por la senda del di¨¢logo intercultural, interreligioso e interespiritual. Ah¨ª ve¨ªa el camino hacia la paz y la justicia, inseparables. Entend¨ªa la teolog¨ªa como el di¨¢logo en la b¨²squeda com¨²n de la verdad. Tal fue, sin duda, su pasi¨®n y una de sus principales aportaciones.
Juan Jos¨¦ Tamayo es director de la C¨¢tedra de Teolog¨ªa y Ciencias de las Religiones de la Universidad Carlos III.