C¨¢ritas alerta de una crisis ¡®sin precedentes¡¯ debido a la pandemia

La pandemia del coronavirus se ha convertido en una crisis ¡°sin precedentes¡± que ha agravado las ya importantes desigualdades sociales en Espa?a. Este es el diagn¨®stico de C¨¢ritas Espa?ola, que este martes ha presentado un informe sobre sus actuaciones desde marzo de 2020. Unas 500.000 personas han recurrido por primera vez a la organizaci¨®n, o lo han vuelto a hacer tras mucho tiempo sin necesitarlo. De hecho, una de cada tres personas atend...

La pandemia del coronavirus se ha convertido en una crisis ¡°sin precedentes¡± que ha agravado las ya importantes desigualdades sociales en Espa?a. Este es el diagn¨®stico de C¨¢ritas Espa?ola, que este martes ha presentado un informe sobre sus actuaciones desde marzo de 2020. Unas 500.000 personas han recurrido por primera vez a la organizaci¨®n, o lo han vuelto a hacer tras mucho tiempo sin necesitarlo. De hecho, una de cada tres personas atendidas por la entidad se encontraban en esta situaci¨®n. El resultado es que las demandas de ayuda se han disparado un 57%, y en determinados periodos o lugares se han llegado a triplicar.

Ha sido el caso de Andr¨¦s Mendoza y su familia, cuya vida ha dado un vuelco en los ¨²ltimos meses. Este hombre, de 49 a?os, trabajaba como vigilante de seguridad y su pareja era monitora de transporte de personas con discapacidad en Madrid. Viv¨ªan sin grandes lujos y sobrellevaban los gastos con entereza. Sin embargo, el coronavirus lo torci¨® todo. La empresa para la que ella trabajaba la meti¨® en marzo del a?o pasado en ERTE ¡ªprestaci¨®n que todav¨ªa no ha percibido¡ª y la familia perdi¨® una parte importante de los ingresos que recib¨ªa. Mendoza cobra 500 euros mensuales por una jornada parcial, pero afirma que vivir con esa cantidad ¡°es imposible¡±. M¨¢s a¨²n para mantener a sus cuatro hijos. Este padre acudi¨® en junio por primera vez a C¨¢ritas. ¡°Nunca imagin¨¦ que tendr¨ªa que pedir ayuda, ha sido bastante duro¡±, afirma Mendoza, que recibe cada d¨ªa un men¨² de comida para cada miembro de la familia.

Las 70 delegaciones de la organizaci¨®n a lo largo de todo el pa¨ªs ofrecen asistencia en las necesidades b¨¢sicas, como comida o alojamiento, y asesor¨ªa jur¨ªdica. C¨¢ritas a¨²n no dispone del n¨²mero total de personas asistidas desde el inicio de la pandemia, pero calcula que superar¨¢n los 2,4 millones que atendi¨® en 2019. De lo que no tiene dudas es de la brutal sangr¨ªa de ingresos que ha provocado la pandemia. As¨ª lo constata este informe, del Observatorio de la Realidad Social. Unas 258.000 personas acompan?adas por esta organizaci¨®n viven en hogares que no cuentan con ninguna entrada de dinero, 75.000 ma?s que antes del comienzo de la pandemia. Ra¨²l Flores, coordinador del equipo de estudios de la entidad, ha apuntado este martes, durante la presentaci¨®n, que m¨¢s de la mitad de las personas que quieren trabajar no encuentran ninguna oportunidad laboral. ¡°En un sistema social donde gran parte de las opciones de integraci¨®n pasan por un buen empleo, es un derecho del que se est¨¢ privando a estas personas¡±, ha afirmado Flores.

Estos obst¨¢culos laborales se traducen en que ma?s de 825.000 personas acompan?adas por Ca?ritas esta?n en situacio?n de pobreza severa, es decir, con ingresos inferiores a 370 euros al mes para un hogar unipersonal o a 776 euros para familias compuestas por dos adultos y dos nin?os. Adem¨¢s, alrededor de 700.000 personas no pueden hacer frente a los gastos de suministros de su vivienda, es decir, no pueden calentarse adecuadamente o encender la luz siempre que lo necesitan. La vivienda de Mendoza no dispone de calefacci¨®n y este padre prioriza pagar las facturas de luz y gas. Pero cubrir todos los gastos se ha convertido en una tarea imposible. La familia no se puede permitir pagar el piso en el que viven, cuyo alquiler asciende a 550 euros mensuales. ¡°Hace dos meses recibimos una orden de desahucio¡±, cuenta. ¡°La pobreza y la exclusi¨®n social se van a incrementar, va a depender de cu¨¢ntos mecanismos de protecci¨®n a las familias se pongan en marcha¡±, ha aclarado Flores.

Natalia Peiro, secretaria general de C¨¢ritas, se?ala que este crecimiento de las necesidades ha llegado en un momento en el que todav¨ªa no se hab¨ªa superado la crisis de 2008. ¡°Nos encontr¨¢bamos con un mercado laboral fr¨¢gil y precarizado, con un acceso a la vivienda complicado para personas con rentas bajas y con un modelo de sociedad donde la vulnerabilidad se extend¨ªa a un elevado porcentaje de los ciudadanos¡±, ha afirmado. El 18,4% de la poblaci¨®n en Espa?a (8,5 millones de personas) se encontraba en situaci¨®n de exclusi¨®n social antes de la pandemia, seg¨²n datos del VIII Informe Foessa 2019, un concepto que tiene en cuenta 35 variables como la renta, la salud, la educaci¨®n o el acceso a la vivienda. De ellos, m¨¢s de cuatro millones estaban en situaci¨®n de exclusi¨®n social severa. ¡°Es en este contexto donde se declara la pandemia, cuyas consecuencias han sido especialmente graves para quienes ya se encontraban en situacio?n de vulnerabilidad, y que se ha traducido en un incremento de la brecha social¡±, ha apuntado Flores.

El problema es que las ayudas no llegan. Mendoza solicit¨® el Ingreso M¨ªnimo Vital en agosto del a?o pasado para intentar abrir una nueva ventana de ingresos. ¡°Todav¨ªa no me han contestado¡±, lamenta. El 96,4% de las familias atendidas por C¨¢ritas no ha recibido el ingreso m¨ªnimo vital tras haberlo solicitado y al 12,8% les ha sido denegado. La falta de informaci¨®n tambi¨¦n ha sido generalizada: el 67% ha afirmado no tener suficiente informaci¨®n para tramitarlo. Adem¨¢s, cuatro de cada 10 familias que percib¨ªan ayuda auton¨®mica han dejado de recibirla. Para Flores, estos datos reflejan una situaci¨®n ¡°bastante distante de una realidad aceptable¡±. ¡°Para las ya maltrechas econom¨ªas de las familias, el tsunami que paraliz¨® la econom¨ªa y los efectos de su ola sostenida est¨¢n durando demasiado. Cierta recuperaci¨®n en el empleo era solo un espejismo¡±, ha apuntado.

Personas sin hogar, soledad y brecha digital

La organizaci¨®n de la Iglesia cat¨®lica tambi¨¦n ha puesto de relieve la realidad de las personas sin hogar, sin un espacio donde recluirse durante el confinamiento y sin posibilidad de mantener la higiene. ¡°Dormir en la calle o permanecer en alojamientos temporales o de emergencia han expuesto a un alto peligro de transmisi¨®n del virus a las personas sin hogar, una poblaci¨®n ya de por s¨ª con un alto riesgo m¨¦dico¡±, ha apuntado Peiro. Si durante 2019 C¨¢ritas hab¨ªa gestionado 5.000 plazas de acogida y acompa?ado a m¨¢s de 35.000 personas en esta situaci¨®n, en los ¨²ltimos meses se han creado 13 nuevos centros y m¨¢s de 1.400 nuevas plazas complementarias.

Peiro tambi¨¦n ha destacado la soledad impuesta a las personas mayores por la pandemia. La organizaci¨®n ha atendido desde marzo del a?o pasado a 11.000 ancianos, frente a los 7.000 que asisti¨® en 2019. ¡°La vulnerabilidad social evidenciada en esta crisis tambie?n pone de manifiesto los escasos recursos que existen para favorecer los cuidados en los domicilios¡±, ha apuntado la secretaria general de C¨¢ritas. Adem¨¢s, en un contexto de teletrabajo y educaci¨®n en l¨ªnea, no pertenecer a la comunidad virtual ha minado la igualdad de oportunidades. M¨¢s de la mitad (52%) de las familias acompan?adas por Ca?ritas esta?n en una situacio?n de apago?n tecnolo?gico al no contar con conexio?n ilimitada, dispositivo o competencias suficientes para manejarse en internet. El resultado es que m¨¢s del 60% de los hogares en los que hay al menos un menor de edad tuvo dificultades para terminar el curso.

C¨¢ritas tambi¨¦n ha dado cuenta del destino de los 65 millones de euros facilitados por 70.666 donantes desde el inicio de la pandemia bajo la campa?a ¡°C¨¢ritas ante el coronavirus¡±. Hasta ahora, la organizaci¨®n ha destinado 41 millones de euros a ayudas de emergencia, 3,3 millones a infancia vulnerable y cerca de un mill¨®n a material sanitario y de protecci¨®n. Adem¨¢s, C¨¢ritas ha apoyado con 2,5 millones de euros un total de 65 proyectos de respuesta a los efectos de la pandemia en pa¨ªses empobrecidos.