La ambig¨¹edad calculada de la Iglesia espa?ola con la investigaci¨®n de la pederastia
?Qu¨¦ investigaci¨®n puede llevarse a cabo sobre los abusos en la Iglesia y cu¨¢l ser¨¢ su fiabilidad si las v¨ªctimas desconf¨ªan y se niegan a colaborar? ¡°Es de sabios saber rectificar¡±, dice el cardenal Omella. Lleva raz¨®n. Est¨¢ a tiempo de demostrarlo
En el reciente encuentro de la c¨²pula de la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE), formada por los cardenales Juan Jos¨¦ Omella, Carlos Osoro y monse?or Luis Arg¨¹ello, en el Vaticano, el Papa les ha pedido expresamente que pongan en el centro de su atenci¨®n a las v¨ªctimas de la pederastia y las acompa?en.
No ha sido esa la actitud de los obispos espa?oles en el pasado y quiz¨¢ no lo sea en el futuro a la vista de los pasos que est¨¢n dando. La primera desviaci¨®n del acompa?amiento a las v¨ªctimas ha sido encargar la auditor¨ªa externa al despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo, cuyo presidente es miembro del Opus Dei, organizaci¨®n cat¨®lica que no ha colaborado en la investigaci¨®n de la pederastia en sus colegios, sino todo lo contrario: ha encubierto a los pederastas y persiste en defender la inocencia del abusador de un adolescente en el colegio Gaztelueta condenado en sentencia firme. ?Puede llamarse externa una auditoria sellada por la alianza entre el Opus Dei y la c¨²pula de la CEE a trav¨¦s de la firma del presidente de la CEE y del presidente del despacho Cremades & Calvo Sotelo en la sede de este con un gran despliegue medi¨¢tico?
Una prueba contundente del error de dicha firma y del correspondiente encargo de investigar los casos de pederastia en la Iglesia cat¨®lica es la negativa de las asociaciones de v¨ªctimas a colaborar con Cremades & Calvo Sotelo, ya que, a su juicio, dicha auditor¨ªa est¨¢ viciada de ra¨ªz y carece de empat¨ªa con las v¨ªctimas. Las Asociaciones de V¨ªctimas en la Iglesia Navarra (AVIPIN) y la Asociaci¨®n Infancia Robada (ANIR) han negado rotundamente que haya habido reuni¨®n alguna entre ambas asociaciones y el despacho de abogados elegido por la CEE. La plataforma Tolerancia 0 ha renunciado a participar tanto con la auditor¨ªa episcopal de Cremades & Calvo Sotelo como con el Defensor del Pueblo. En este caso, lo mismo que en todos aquellos en los que las personas y los grupos humanos sufren atentados graves contra su dignidad, la autoridad es la de las v¨ªctimas. Su juicio es inapelable. A ninguna otra autoridad puede apelarse para buscar atajos que relativicen sus sufrimientos, impidan la b¨²squeda de la verdad y eviten la reparaci¨®n.
Una investigaci¨®n sobre tama?os cr¨ªmenes, que han conducido a algunas de las v¨ªctimas hasta el suicidio, no puede iniciarse ni desarrollarse con rigor, compasi¨®n y sensibilidad, sin la colaboraci¨®n, e incluso con la oposici¨®n, de las v¨ªctimas. Es tal el grado de rechazo a dejar en manos de Cremades & Calvo Sotelo la investigaci¨®n sobre la pederastia en el seno de la Iglesia cat¨®lica que las asociaciones han pedido a la CEE que rescinda el acuerdo y busque otras v¨ªas que demuestren la voluntad de llegar hasta el final.
No parece, empero, que tal negativa preocupe a la jerarqu¨ªa, ya que, preguntado por el rechazo y desconfianza de las asociaciones de v¨ªctimas, el secretario general de la CEE, Luis Arg¨¹ello, lo ha relativizado alegando que ¡°la mayor¨ªa de las v¨ªctimas no est¨¢n asociadas¡±. Lo que demuestra Arg¨¹ello, primero minusvalorando el n¨²mero de pederastas y de agresiones sexuales, despu¨¦s neg¨¢ndose a la creaci¨®n de una comisi¨®n de investigaci¨®n y ahora quitando importancia a la negativa de las asociaciones de v¨ªctimas a colaborar con su auditor¨ªa, es su falta de seriedad y empat¨ªa en el tratamiento del problema y su insensibilidad ante el sufrimiento de las v¨ªctimas.
A esto cabe a?adir su desd¨¦n hacia la investigaci¨®n del Defensor del Pueblo ¡ªaprobada en el Congreso de los Diputados por todo el arco parlamentario, a excepci¨®n de Vox¡ª, a la que ha calificado de ¡°objetivamente incompleta e injusta¡±, y su relativizaci¨®n de la pederastia en el seno de la Iglesia pues ¡°en este momento ¡ªha afirmado¡ª la grave problem¨¢tica de los abusos de la sociedad espa?ola no est¨¢ en el ¨¢mbito eclesial¡±.
Hay que valorar positivamente el encuentro del cardenal Omella con las v¨ªctimas y el profundo impacto que, seg¨²n confesi¨®n propia, han causado en ¨¦l sus dram¨¢ticos testimonios. Sin embargo, en la entrevista del diario EL PA?S (8 de abril de 2022) se aprecia una manifiesta ambig¨¹edad en cuanto a la apertura de los archivos y a otras cuestiones de trascendental importancia, como la de investigar a los obispos acusados de encubrir o silenciar abusos que conocieron durante su ministerio y la indemnizaci¨®n de las v¨ªctimas.
¡°Hemos sido un poco lentos y no nos dimos cuenta de algunas cosas¡±, afirma Omella en la entrevista. ?¡±Un poco lentos¡± cuando han tardado d¨¦cadas en reaccionar? ?Son ¡°algunas cosas¡± las numerosas agresiones sexuales contra ni?as, ni?os, adolescentes y j¨®venes indefensos, que el papa Francisco ha calificado de verdaderos cr¨ªmenes? ?No est¨¢ atenuando la gravedad de dichos cr¨ªmenes cuando afirma que ¡°la actitud de hoy ante los abusos es muy diferente a la de hace d¨¦cadas¡±? ?No demuestra desd¨¦n hacia las v¨ªctimas seguir confiando en la auditor¨ªa de Cremades & Calvo Sotelo cuando ellas han mostrado su desconfianza y rechazo y se niegan a colaborar? ?Qu¨¦ investigaci¨®n puede llevarse a cabo y cu¨¢l ser¨¢ su fiabilidad si estas desconf¨ªan y se niegan a colaborar? ¡°Es de sabios saber rectificar¡±, dice Omella. Lleva raz¨®n. Est¨¢ a tiempo de demostrarlo cambiando de rumbo.
Juan Jos¨¦ Tamayo es te¨®logo de la liberaci¨®n y director y coautor de Religi¨®n, g¨¦nero y violencia (Dykinson, 2019, 2? ed.)
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