Turismo sostenible: en qu¨¦ hay que pensar adem¨¢s de en la maleta

La Semana Santa est¨¢ a la vuelta de la esquina, y un viaje puede dejar a cada paso una huella mucho m¨¢s positiva que la de carbono en la memoria del visitante y la comunidad que le recibe.

La industria tur¨ªstica, esencial para la econom¨ªa, es consciente de ello. En 2019, el turismo supon¨ªa el 10,3% del PIB mundial y volver¨¢ a sus niveles prepandemia en 2024, seg¨²n el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC). Durante ese par¨¦ntesis, industria y ciudadanos han recapacitado sobre las pr¨¢cticas viajeras comprendiendo que esa recuperaci¨®n s¨®lo llegar¨¢ unida a la sostenibilidad. Desde 2005, el programa de Naciones Unidas y la Organizaci¨®n Mundial del Turismo (OMT) fija el turismo sostenible en seis par¨¢metros: salud p¨²blica, inclusi¨®n social, conservaci¨®n de la biodiversidad, acci¨®n clim¨¢tica, econom¨ªa circular y gobernanza y finanzas.

Cepsa, que representa el 35% del suministro energ¨¦tico para el sector a¨¦reo en Espa?a, quiere convertirse en proveedor de referencia de combustible sostenible para aviaci¨®n con una producci¨®n anual que alcanzar¨¢ las 800.000 toneladas en 2030

Pasos que dejan una huella mejor

El compromiso del transporte a¨¦reo con la sostenibilidad es rotundo: la Asociaci¨®n Internacional de Transporte A¨¦reo (IATA), integrada por 300 aerol¨ªneas en 120 pa¨ªses, acord¨® en su 77 asamblea general que todas ellas alcanzaran el nivel cero de emisiones para el a?o 2050. Este exigente mandato supondr¨ªa eliminar unas 21 gigatoneladas de emisiones de di¨®xido de carbono (CO?) en apenas tres d¨¦cadas. ?C¨®mo se har¨¢? Para IATA, la clave ser¨¢ aumentar la cantidad de combustible de aviaci¨®n sostenible (SAF), reemplazando el queroseno f¨®sil que usan los jets por biocombustibles.

Cepsa, que representa el 35% del suministro energ¨¦tico para el sector a¨¦reo en Espa?a, quiere convertirse en proveedor de referencia de combustible sostenible para aviaci¨®n con una producci¨®n anual que alcanzar¨¢ las 800.000 toneladas en 2030.

Coches menos contaminantes y conducci¨®n eficiente

El de los aviones ser¨¢ un paso de gigante. Pero tambi¨¦n son apreciables los esfuerzos de sectores que nunca hab¨ªan afrontado el problema de las emisiones como ahora. Por ejemplo, la naviera MSC Cruceros cuenta con un buque propulsado por Gas Natural Licuado (GNL), que reducir¨¢ el CO? emitido hasta el 25%, y prepara la botadura del segundo.

Del viajero depende elegir los medios de locomoci¨®n menos contaminantes e id¨®neos para el turismo interior, que se prev¨¦ mayoritario esta temporada en Espa?a. Renfe anuncia que el tren produce entre 5 y 7 veces menos emisiones de CO? que el autom¨®vil y entre 7 y 10 menos que un vuelo. Al comprar determinados billetes, sus viajeros reciben un e-mail que compara la huella de carbono que producir¨¢ su viaje frente a la que generar¨ªa con otros medios de transporte.

Elegir alojamiento tambi¨¦n depende ¨ªntegramente del turista: cada vez dispone de m¨¢s informaci¨®n para elegir uno involucrado en reducir su huella de carbono

Viajar en veh¨ªculo privado es lo m¨¢s habitual en las escapadas de Semana Santa. Aunque en 2022 s¨®lo se matricul¨® el 65% de los el¨¦ctricos contemplados en algunos planes gubernamentales, contin¨²an introduci¨¦ndose en el mercado, incentivados por los beneficios de la etiqueta cero de la DGT, una conducci¨®n silenciosa y crecientes prestaciones. Mientras llegan al tr¨¢fico ordinario los biocombustibles que ya alimentan motores de competici¨®n y transporte pesado, los h¨ªbridos y el¨¦ctricos representan la opci¨®n m¨¢s ecol¨®gica. Entre los de combustible f¨®sil, tambi¨¦n se pueden elegir los menos contaminantes, y s¨®lo el conductor, cualquiera que sea su veh¨ªculo, puede decidir pisar el acelerador lo justo para optimizar consumo y emisiones, una acci¨®n que varios coches reflejan en su pantalla con el aviso ¡°ECO¡±.

Ocio respetuoso con el paisaje (y el paisanaje)

Acciones b¨¢sicas e importantes del turismo sostenible est¨¢n en manos del viajero cuando llega al destino: evitar la degradaci¨®n del entorno sin da?ar plantas y animales; mantener la calidad de vida de la comunidad anfitriona y respetar su cultura y patrimonio hist¨®rico. Por descontado, abstenerse de arrojar restos fuera de lugar, porque hasta una fruta biodegradable puede alterar la cadena alimenticia natural de ese ecosistema.

Elegir alojamiento tambi¨¦n depende ¨ªntegramente del turista: cada vez dispone de m¨¢s informaci¨®n para elegir uno involucrado en reducir su huella de carbono. Se preocupan de comunicarlo quienes cuidan sus consumos de energ¨ªa y agua, con buenas pol¨ªticas de residuos y preservando los recursos naturales. En esa b¨²squeda resultan ¨²tiles iniciativas como la Etiqueta Ecol¨®gica Europea, con m¨¢s de 680 establecimientos adheridos desde 1992, o el sello espec¨ªfico de la plataforma online Booking para alojamientos que cumplen los Criterios GSTC (Consejo Global de Turismo Sostenible, por sus siglas en ingl¨¦s).

Comer del kil¨®metro cero y sin desperdicios