Los obispos cargan contra los vientres de alquiler: ¡°Es una nueva explotaci¨®n contra la mujer, como si fuera una incubadora¡±
Los prelados espa?oles aprueban una gu¨ªa de obligado cumplimiento sobre qu¨¦ pasos hay que seguir ante una denuncia de abusos sexuales a menores, pero no han dado a conocer su contenido
EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.
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Los obispos espa?oles cargan contra los vient...
EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.
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Los obispos espa?oles cargan contra los vientres de alquiler y alertan de que estos embarazos cosifican el cuerpo de la mujer como ¡°un ¨²tero a disposici¨®n del contratante¡± y ¡°transforman al hijo en un producto¡±. Contundente, la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE) ha publicado este viernes un comunicado en el que recuerda a sus fieles, ¡°y a cuantos quieran escuchar¡± la voz de la Iglesia, cu¨¢l es su ense?anza sobre este asunto: ¡°La maternidad por subrogaci¨®n es, inequ¨ªvocamente, una nueva forma de explotaci¨®n de la mujer, contraria a la dignidad de la persona¡±. El secretario general de la CEE y portavoz de los obispos, C¨¦sar Garc¨ªa Mag¨¢n, ha insistido esta ma?ana en rueda de prensa tras la plenaria de los obispos que no existe un ¡°derecho a la procreaci¨®n¡± y que promover este tipo de gestaciones, ¡°sobre todo cuando media una transacci¨®n econ¨®mica, es convertir la maternidad en un objeto de comercio¡± donde la mujer queda reducida a un instrumento, ¡°como si fuera una incubadora¡±.
Para los prelados espa?oles, ¡°la maternidad sustitutiva¡±, como lo han denominado, es un tema con muchas aristas, entre las que, destacan, se encuentra la paternidad. ¡°El padre no es un convidado de piedra ni un mero instrumental quir¨²rgico, como un simple instrumento del hospital¡±. El recurso a los vientres de alquiler, una pr¨¢ctica que en Espa?a no es legal, se ha convertido en los ¨²ltimos meses en un tema de actualidad social y pol¨ªtica. La noticia de que la actriz Ana Obreg¨®n pag¨® por un vientre de alquiler para ser abuela biol¨®gica ¡ªutiliz¨® el semen de su hijo Aless, fallecido hace tres a?os¡ª deton¨® un debate bio¨¦tico y legislativo. La postura de los partidos pol¨ªticos es heterog¨¦nea. Mientras que el Gobierno de coalici¨®n (PSOE y Unidas Podemos) se posicionan en contra, el PP est¨¢ dispuesto a abrir un debate ¡°sosegado y serio¡± para regularlos siempre que ¡°no medie en ning¨²n caso una contraprestaci¨®n econ¨®mica¡±. Ciudadanos es el ¨²nico partido que apoya la gestaci¨®n subrogada ¡°de forma altruista¡± y apuesta por ¡°una regulaci¨®n jur¨ªdica que d¨¦ seguridad para el mantenimiento de los derechos de los menores¡±.
Sobre su gesti¨®n del esc¨¢ndalo de la pederastia, uno de los temas principales de la plenaria, los obispos no le han dado tanta difusi¨®n como al de los vientres de alquiler, a pesar de ser el asunto que m¨¢s est¨¢ afectando a la imagen la Iglesia espa?ola. Esta semana, los prelados han aprobado una instrucci¨®n pastoral sobre los abusos sexuales, es decir, una gu¨ªa con las instrucciones que los responsables eclesi¨¢sticos ¡ªobispos, superiores de congregaciones, directores de las oficinas de atenci¨®n a v¨ªctimas, etc.¡ª est¨¢n obligados a seguir cuando reciban una denuncia. Se trata del primer documento oficial sobre c¨®mo gestionar las denuncias de este tipo que la CEE publica en los ¨²ltimos 13 a?os.
No obstante, no ha matizado de cu¨¢ntos puntos consta esa gu¨ªa y si en ellos se tratan temas tan importantes como el modo en el que la Iglesia debe indemnizar a las v¨ªctimas, c¨®mo proceder en el caso de que un obispo sea denunciado por haber silenciado un caso, si todas las denuncias (prescritas o no) deben trasladarlas a las autoridades civiles, etc.
Hasta ahora, el ¨²nico protocolo aprobado por la CEE era de 2010. No era de obligado cumplimiento para los obispos y se limitaba a se?alar sobre c¨®mo actuar ante un caso: ¡°Si hay indicios racionales de la comisi¨®n de un hecho delictivo, la autoridad eclesi¨¢stica invita o aconseja a los denunciantes a presentar ellos mismos la denuncia ante la polic¨ªa, el ministerio fiscal o el juzgado de instrucci¨®n¡±. La Conferencia, tras estallar el esc¨¢ndalo en octubre de 2018, comunic¨® que estaba trabajando en la renovaci¨®n de estos protocolos. Justifica la tardanza en que, desde entonces, el papa Francisco ha actualizado la ley can¨®nica sobre este asunto y el Vaticano pidi¨® a los obispos espa?oles que esperasen e integrasen estas nuevas directrices en la norma que estaba redactando. Durante estos a?os, la mayor¨ªa de las di¨®cesis y ¨®rdenes religiosas han ido desarrollando sus propios reglamentos de actuaci¨®n.
La nueva instrucci¨®n se ir¨¢ actualizando cada vez que var¨ªe la normativa can¨®nica vigente y entrar¨¢ en vigor el 30 de abril. ¡°Esta instrucci¨®n se inscribe como un paso m¨¢s de compromiso de ese camino de las Iglesias de Espa?a en esa lacra social, en la que la tambi¨¦n, lamentablemente, la Iglesia se ve afectada¡±, ha a?adido el secretario general.
Sin menci¨®n de los abusos
De mismo modo, el secretario general no ha hecho ninguna menci¨®n al ¨²ltimo recuento de la CEE con las 706 acusaciones por abusos a menores a manos de sus cl¨¦rigos. Contabilidad que solo remite a los casos que las di¨®cesis y ¨®rdenes religiosas han recibido desde 2019, a?o en el que el Papa orden¨® a los jerarcas eclesi¨¢sticos abrir oficinas de atenci¨®n a v¨ªctimas. Y en el que queda fuera, por lo tanto, los casos que la Iglesia conoci¨® con anterioridad a ese a?o, una informaci¨®n que sigue ocultando, y tambi¨¦n los que les ha llegado por otros canales, como los 500 remitidos en los informes de EL PA?S (salvo que las v¨ªctimas luego hayan acudido a sus oficinas) y aquellos que han juzgado internamente en sus tribunales eclesi¨¢sticos y que, en ocasiones, ha silenciado.
La contabilidad que lleva este peri¨®dico sobre todos los abusos conocidos en la Iglesia a trav¨¦s de los medios y sentencias judiciales, la ¨²nica existente en Espa?a en una base de datos abierta, se?ala en este momento a 953 acusados y 1.802 v¨ªctimas.