Los 1.263 d¨ªas de Raquel D¨ªaz esperando justicia: ¡°Este se?or a m¨ª me rompi¨® la vida¡±

La silla de ruedas de Raquel D¨ªaz avanza sobre el suelo de madera de la Audiencia Provincial de Le¨®n. Es lunes, 11 de diciembre, y han pasado 1.263 d¨ªas desde los hechos por los que ella pide justicia y que casi la matan: la mujer denuncia que su marido, Pedro Mu?oz, le dio una paliza y la arroj¨® por un balc¨®n. Las golpizas y los insultos eran frecuentes, denuncia. Pero aquel 27 de mayo de 2020 casi acaba con su vida. Han pasado casi cuatro a?os y el acusado mantiene su versi¨®n: tod...

La silla de ruedas de Raquel D¨ªaz avanza sobre el suelo de madera de la Audiencia Provincial de Le¨®n. Es lunes, 11 de diciembre, y han pasado 1.263 d¨ªas desde los hechos por los que ella pide justicia y que casi la matan: la mujer denuncia que su marido, Pedro Mu?oz, le dio una paliza y la arroj¨® por un balc¨®n. Las golpizas y los insultos eran frecuentes, denuncia. Pero aquel 27 de mayo de 2020 casi acaba con su vida. Han pasado casi cuatro a?os y el acusado mantiene su versi¨®n: todo fue un accidente y ¨¦l no la agredi¨®.

El juicio ha transcurrido durante toda la semana y por la sala han desfilado los implicados, testigos, peritos, m¨¦dicos, guardias civiles y forenses. D¨ªaz ha esgrimido grabaciones vejatorias, ataques f¨ªsicos y verbales y el testimonio de m¨¦dicos y de su psic¨®loga, entre otros argumentos. Mu?oz, hostil durante las sesiones, insiste en que la amaba y su defensa busca contradicciones en el relato de la v¨ªctima, que sufri¨® secuelas f¨ªsicas y mentales.

La cita comenz¨® el lunes. La mujer, una abogada respetada y habitual deportista antes del suceso, ha vuelto a Ponferrada tras meses en una residencia de Toledo para personas con problemas motrices o intelectuales. Despu¨¦s, se ha instalado en una residencia de Castilla y Le¨®n, donde ha ido recuper¨¢ndose y ganando la lucidez perdida en las primeras semanas tras los hechos. Mu?oz, exl¨ªder del partido localista Coalici¨®n por El Bierzo, cuenta con una amplia experiencia pol¨ªtica en la comarca y en la comunidad, y ha reflejado ante el juez la actitud que recordaban quienes han trabajado con ¨¦l durante esas etapas: altivo y agresivo. Tanto el juez como su abogado lo han reprendido por sus actitudes o gestos.

La Fiscal¨ªa reclama 18 a?os y nueve meses de c¨¢rcel por cinco delitos: violencia habitual, maltrato en el ¨¢mbito familiar, injurias, amenazas y lesiones agravadas. Asimismo, pide m¨¢s de un mill¨®n de euros como compensaci¨®n para Raquel D¨ªaz. El pol¨ªtico trat¨® al principio del caso de ejecutar un alzamiento de bienes para donar sus propiedades a sus dos hijos, de una relaci¨®n previa, y alegar insolvencia en caso de condena, si bien un juzgado se lo impidi¨®.

La v¨ªctima declar¨® el lunes, protegida por un biombo, un sinf¨ªn de vejaciones durante su relaci¨®n con el concejal berciano. La mujer describi¨® frecuentes violaciones, pu?etazos, descalificativos y amenazas, motivo por el cual nunca se atrevi¨® a denunciar esta violencia machista, pues polic¨ªas de Ponferrada han confirmado que no constaba en los registros. ¡°Me dec¨ªa que estaba mal de la cabeza, que me iba a hundir en Ponferrada; que iba a matar a mi hermano, a mi hermana, a mis sobrinos y a mi hija¡±, record¨® D¨ªaz, entre sollozos pero con firmeza, detallando los abusos f¨ªsicos y verbales de ese ¡°psic¨®pata narcisista¡±, poderoso ¡°encantador de serpientes¡± y de quien se sent¨ªa totalmente dependiente en aquella ¡°relaci¨®n t¨®xica¡±.

Adem¨¢s, la jurista ha admitido que se sent¨ªa avergonzada de reconocerse como v¨ªctima de violencia machista. Su hija ha confirmado lo que su madre sufr¨ªa y no confesaba por miedo: ¡°Se cas¨® con un maltratador¡±. La mujer ha explicado que el acusado sab¨ªa d¨®nde agredirla para causarle m¨¢s da?o: en el vientre o en los pechos cuando ten¨ªa la menstruaci¨®n o en la mand¨ªbula si se dirig¨ªa a la cara.

Ella afirma que el d¨ªa en el que ocurri¨® todo se extrem¨® la violencia en la ¡°finca de los horrores¡± que compart¨ªan en Toreno, cerca de Ponferrada. Otra discusi¨®n, otra tunda y, desde el balc¨®n, la arroj¨® contra el suelo de la parcela. ¡°Zorra, hija de puta, ?te has muerto ya? ?Te has enterado de que la ¨²nica forma que tienes de librarte de m¨ª es muri¨¦ndote?¡±, le espet¨®, seg¨²n su relato, antes de atizarla con un palo, llamar a continuaci¨®n a una ambulancia y achacar la escena a ¡°una ca¨ªda¡±.

Este viernes han comparecido unos peritos, quienes se?alan que los restos biol¨®gicos hallados bajo las u?as de la v¨ªctima, habitual se?al de forcejeo o resistencia f¨ªsica a un ataque, se corresponden con la piel de su pareja. Este trat¨® de impedir que le tomaran muestras biol¨®gicas hasta que lo orden¨® la justicia. La acusaci¨®n ha le¨ªdo las 17 lesiones que presentaba la mujer aquella noche.

Mu?oz, que pas¨® dos a?os en prisi¨®n provisional y lleva a?o y medio en libertad provisional, ha sostenido la accidentalidad de las lesiones de su exesposa, ha insistido en que la amaba y le ha achacado episodios violentos: ¡°El ¨²nico herido soy yo¡±. Asimismo, ha asegurado que gracias a su intervenci¨®n D¨ªaz pudo salvar la vida. En cambio, uno de los m¨¦dicos ha negado que ¡°la biomec¨¢nica de las lesiones¡± encajara con la versi¨®n del hombre: ¡°No eran lesiones de impacto, sino de energ¨ªa cin¨¦tica importante¡±. La psic¨®loga que atend¨ªa a Raquel D¨ªaz ha destacado ¡°ideas pasivas de suicidio¡±, ha incidido en la soledad de su clienta y ha aludido a muchos pensamientos sobre la muerte, aunque no alusiones al maltrato f¨ªsico, aunque s¨ª insultos y amenazas.

Las comparecencias en sede judicial han concluido este viernes. El 21 de diciembre, 1.273 d¨ªas despu¨¦s, se presentar¨¢n las conclusiones y los informes del caso para conocer la resoluci¨®n de un caso que ha marcado para siempre a Raquel D¨ªaz: ¡°Este se?or a m¨ª me rompi¨® la vida¡±.