Ocho maneras de vivir el Orgullo 2024 en Madrid

Samthony Abi¨¢n reside en Granollers (Barcelona) y este s¨¢bado est¨¢ en Madrid, pero no ha acudido al desfile del Orgullo ¡°al igual que todos los compa?eres de la asociaci¨®n No Binaries Espa?a¡± porque la ley trans no incluye la tercera casilla que ped¨ªan en los documentos oficiales, entre otras cosas. S¨ª lo han hecho, sin embargo, Asmi Ananda, Juan, Leticia, Marquesa Manresa, Boris, Cristina y ?lex que han vivido como un acto de reivindicaci¨®n y fiesta esta marcha que ha congregado a 300.000 personas, seg¨²n la Delegaci¨®n del Gobierno, y m¨¢s de un mill¨®n, seg¨²n los organizadores.

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Samthony Abi¨¢n reside en Granollers (Barcelona) y este s¨¢bado est¨¢ en Madrid, pero no ha acudido al desfile del Orgullo ¡°al igual que todos los compa?eres de la asociaci¨®n No Binaries Espa?a¡± porque la ley trans no incluye la tercera casilla que ped¨ªan en los documentos oficiales, entre otras cosas. S¨ª lo han hecho, sin embargo, Asmi Ananda, Juan, Leticia, Marquesa Manresa, Boris, Cristina y ?lex que han vivido como un acto de reivindicaci¨®n y fiesta esta marcha que ha congregado a 300.000 personas, seg¨²n la Delegaci¨®n del Gobierno, y m¨¢s de un mill¨®n, seg¨²n los organizadores.

Marquesa Manresa, 26 a?os: ¡°Ser trans no es estar operado o feminizado¡±

Marquesa Manresa, de 26 a?os, vive en Madrid donde trabaja en una agencia de publicidad, pero es de Priego (C¨®rdoba). Desde ¡°peque?ito¡± sab¨ªa que era una mujer, pero no se atrev¨ªa a compartirlo con nadie. Hasta que la cabeza le hizo ¡°clic¡± y decidi¨® entonces ¡°luchar¡± por su derechos, por ser ella misma, por ser ¡°real¡±. Confiesa que este s¨¢bado ha abierto por fin el armario: ¡°Hoy es cuando he salido al mundo, para mi familia y para mi entorno¡±. Marquesa quiere dejar claro que ¡°ser trans no es estar operado o feminizado. Son valores que tenemos dentro, que van m¨¢s all¨¢ de un bigote o unas tetas¡±.

Se siente una persona ¡°con suerte¡±, pues disfrut¨® de una infancia ¡°preciosa¡±, en la que se sinti¨® ¡°muy arropado¡± por su familia y goza de un buen clima de trabajo. ¡°De peque?o me pod¨ªa poner falda, el pelo rubio... Mucha gente no ha podido tener ese entorno libre y seguro¡±, se emociona.

Marquesa no ha tenido muchas parejas y cree que es complicado por su identidad: ¡°No todo el mundo se fija en ti, ni te quiere. Nos ven m¨¢s como objeto sexual que como personas de las que enamorarse¡±.

Asmi Ananda Molina, 64 a?os: ¡°He necesitado 50 a?os para poder estar orgullosa de mi cuerpo y de mi ser¡±

Asmi Ananda Molina es agricultora, tiene 64 a?os y cuando naci¨®, en 1960, el doctor le dijo a sus padres que era un ni?o, aunque los anim¨® a registrarle como mujer ¡°para que no hiciera la mili¡±. Naci¨® con un micropene sin test¨ªculos externos, tampoco ten¨ªa vulva. Pero, por sus caracteres sexuales secundarios, en la adolescencia sus mamas se desarrollaron. Sin embargo, no ten¨ªa la menstruaci¨®n. ¡°Con 16 a?os me castraron las g¨®nadas y empezaron a hormonarme con estr¨®genos. Me rompieron los esquemas¡±, relata. Confundida, solicit¨® una vaginoplastia de la que ahora se arrepiente: ¡°Todo el mundo dec¨ªa que era una chica, aunque yo no lo sintiera¡±.

Vive en Burgos y ha venido este s¨¢bado a Madrid para visibilizar a la comunidad intersexual de la que forma parte: ¡°Somos personas olvidadas y no visibles porque tenemos cuerpos insumisos y rompemos la norma¡±. Calcula, seg¨²n organismos internacionales, que entre el 0,5% y el 1,7% de la poblaci¨®n mundial presenta esta condici¨®n con ¡°corporalidades distintas por variaciones biol¨®gicas durante la formaci¨®n fetal¡±.

Se define como activista y est¨¢ en contra de toda ¡°mutilaci¨®n genital¡±. Por ello, ha acudido al Orgullo en Madrid: ¡°He necesitado 50 a?os para poder estar orgullosa de mi cuerpo y de mi ser. Nos recetan silencio para evitar el rechazo, pero nadie es qui¨¦n para marcar nuestros l¨ªmites y decidir lo que somos¡±.

Juan Giraldo, 25 a?os: ¡°Tuve que emigrar por ser gay¡±

Juan Giraldo tiene 25 a?os y es community manager. Vive en Madrid desde el a?o 2022, pero creci¨® en Santiago de Cali (Colombia). Cuenta que se mud¨® de su pa¨ªs tras sufrir violencia por parte de un familiar y una cruel homofobia con un acoso constante. ¡°Poder salir a la calle tranquilo era muy dif¨ªcil¡±, relata. Este pa¨ªs latinoamericano es el invitado del Orgullo 2024 y ha contado con su propia carroza.

Cuando empez¨® a explorar su sexualidad, asegura que en el colegio le hicieron ¡°la vida imposible¡± entre alumnos y profesores. Incluso, su madre lleg¨® a recibir una denuncia porque varios padres de sus compa?eros consideraron que la orientaci¨®n sexual de Juan perjudicar¨ªa a los peque?os.

Tras verse amenazado tambi¨¦n por los padres de su expareja, huy¨® a Espa?a desesperado. ¡°Tuve que emigrar por ser gay¡±. A los pocos meses encontr¨® en Madrid la Fundacion Eddy-G, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que brinda hogar a j¨®venes de la comunidad LGBTIQ+ en riesgo de exclusi¨®n social. ¡°Me dieron estancia gratuita durante un a?o, apoyo psicol¨®gico e inserci¨®n social¡±, cuenta agradecido.

Confiesa que en la capital se siente muy protegido y aceptado, ¡°sobre todo, muy tranquilo¡±, una sensaci¨®n que nunca antes hab¨ªa experimentado. ¡°Colombia no es un buen sitio para ser homosexual, los asesinatos contra el colectivo son frecuentes¡±, advierte. Teme el auge de la extrema derecha en Europa. ¡°Para m¨ª el Orgullo es la conmemoraci¨®n de los que murieron por ser homosexuales y nos abrieron el camino para que hoy lo tuvi¨¦semos m¨¢s f¨¢cil¡±, concluye.

Leticia Rey, 37 a?os: ¡°No me atrae nadie sexualmente, pero me puedo enamorar¡±

Leticia Rey tiene 37 a?os, es profesora de Lengua y Literatura y vive en Toledo. A los 15 a?os supo que era asexual. ¡°No me atrae nadie sexualmente, pero no soy arrom¨¢ntica, es decir, me puedo enamorar¡±. En su adolescencia se sinti¨® muy confundida y empez¨® a pensar que ten¨ªa alg¨²n problema. ¡°Vas a una consulta m¨¦dica, pero realmente no tienes nada malo¡±, expresa. Adem¨¢s, confiesa que se inventaba que ten¨ªa novio para que sus amigas la dejasen tranquila.

Durante a?os vivi¨® ¡°en una disociaci¨®n¡± hasta que encontr¨® a personas que estaban en su misma situaci¨®n: ¡°Volv¨ª a mi cuerpo y fui feliz¡±. Ha salido del armario hace muy poco, pero tiene una pareja desde hace mucho tiempo, ya lleva cuatro a?os casada con su marido, que s¨ª siente deseo sexual: ¡°Llegamos a un trato para estar los dos a gusto, siempre con consentimiento y sin forzar nada, ni por un lado, ni por el otro¡±.

Siente que es importante estar en el Orgullo de Madrid porque ella y sus compa?eras se han sentido juzgadas muchas veces. ¡°Antes de expresar lo que sentimos nos llaman fr¨ªgidas o asexuadas, despu¨¦s nos comentan que si somos as¨ª es porque no nos quiere nadie y que no deber¨ªamos de vestir con ropa provocativa¡±.

Boris Shiniaev, 49 a?os: ¡°Vivir tu sexualidad en Rusia de forma abierta es muy duro¡±

Boris Shiniaev tiene 49 a?os y es ruso. Se mud¨® a Espa?a en octubre de 2022 con su novio y otro joven. Los tres hu¨ªan ¡°de la guerra y la violencia homof¨®bica del pa¨ªs¡±. Este hombre, que se dedica al dise?o gr¨¢fico, no pod¨ªa tolerar estar en un sitio donde existen leyes que penalizan al colectivo: ¡°Vivir tu sexualidad en Rusia de forma abierta es muy duro¡±.

Junto a seis amigos rusos sale este Orgullo en Madrid, tras ¡°ser obligado a abandonar el pa¨ªs y dejar atr¨¢s todo por las crueles persecuciones y represiones¡±. Juntos invitan a no olvidar a los compa?eros que no consiguen emigrar por la falta de v¨ªas legales y viven ¡°ocultando su identidad¡±.

En Rusia la comunidad LGBTIQ+ est¨¢ oficialmente reconocida como extremista, seg¨²n apunta Boris. ¡°Se puede ir a la c¨¢rcel por la identidad. Puedes ser arrestado por trabajar en un bar gay. Incluso en casa las personas del colectivo no est¨¢n seguras. Las bandas, respaldadas por el Gobierno, organizan citas falsas para luego golpear y humillar a las personas. En la Rep¨²blica de Chechenia se practican secuestros violentos, torturas y ejecuciones extrajudiciales de personas por su supuesta orientaci¨®n sexual¡±, recogen en su manifiesto.

A Boris le preocupan las pol¨ªticas del partido pol¨ªtico Vox porque considera que tachan los movimientos LGTBIQ+ de propaganda. ¡°As¨ª empez¨® el Gobierno ruso, ese fue su primer paso¡±, advierte tras contar que no le ha gustado que en el cartel del Orgullo de Madrid no apareciese la bandera ni las siglas del colectivo.

Samthony Abi¨¢n, 29 a?os: ¡°La Comunidad de Madrid deroga los derechos LGTBIQ+, pero le interesa sumarse al Orgullo¡±

Samthony Abi¨¢n tiene 29 a?os, naci¨® en Madrid, aunque actualmente reside en Granollers (Barcelona) y trabaja en el sector de la programaci¨®n. Este s¨¢bado est¨¢ en la capital de Espa?a, pero no acudir¨¢ al desfile del Orgullo, ¡°al igual que todos los compa?eres de la asociaci¨®n No Binaries Espa?a¡±. Su identidad de g¨¦nero no se asocia ni a un hombre ni a una mujer: ¡°No me expreso ni como una persona masculina, ni como una femenina. Un amigo me dijo hace a?os que si yo fuera una pegatina, ¨¦l no sabr¨ªa donde pegarme porque no entend¨ªa donde encajaba¡±. Ya ha contado a su c¨ªrculo m¨¢s cercano c¨®mo se siente, pero no lo ha hecho en el trabajo: ¡°Ah¨ª no hablo de mi identidad, me da miedo que me juzguen y yo tengo que seguir pagando el alquiler¡±.

El motivo de su ausencia en el acto es la aprobaci¨®n definitiva, en febrero de 2023, de la ley trans que permite el cambio de sexo en el registro sin necesidad de informes m¨¦dicos ni tratamientos. Esta normativa dej¨® fuera a las personas no binarias que reclamaban una tercera casilla en los documentos oficiales: ¡°Para la ministra de Igualdad, Ana Redondo, no somos una prioridad¡±.

Por otra parte, no quiere participar en un acto organizado por la Comunidad de Madrid. ¡°Derogan los derechos LGTBIQ+ y ahora les interesa sumarse a este evento porque da dinero y atrae turismo. Si nos apoyan, que sea en todo y no solo en lo que les compensa¡±, reprocha. Adem¨¢s, Samthony no est¨¢ conforme con la participaci¨®n de numerosas marcas en el desfile: ¡°Es pinkwashing [lavado de imagen rosa], no est¨¢n comprometidos con ning¨²n tipo de igualdad y ma?ana se habr¨¢n olvidado de nosotres¡±.

Cristina Garc¨ªa, 33 a?os: ¡°Me siento utilizada, es lo que vende ahora¡±

Cristina Garc¨ªa tiene 33 a?os y es de Madrid. Tuvo que esperar a los 21 a?os para darse cuenta de que era lesbiana. ¡°Me gust¨® una chica en la universidad y despu¨¦s, cuando empec¨¦ a salir de fiesta, vi que de repente empezaba a fijarme en mujeres. Lo que hice fue dejar a mi novio y empezar a salir con la chica¡±.

A sus amigos se lo dijo ¡°seg¨²n iba pasando¡± y luego lleg¨® el turno de su familia. ¡°Cuando mi madre regres¨® del extranjero, donde viv¨ªa, me fui a tomar algo con ella y se lo cont¨¦¡±, recuerda. ¡°Ella fue la que se lo cont¨® a mi padre porque yo no me atrev¨ª. Ten¨ªa 23 a?os cuando sal¨ª del armario¡±, confiesa.

Reh¨²ye de los pol¨ªticos, en especial de los de la Comunidad de Madrid: ¡°Este colectivo solo les importa cuando da dinero. Me siento utilizada porque es lo que vende ahora, todos con las banderas, pero en las leyes es donde se tiene que ver y las que hay son antiguas. A nivel estatal me siento m¨¢s amparada porque la izquierda siempre ha hecho mucho m¨¢s por el movimiento¡±, explica.

?lex Robles, 30 a?os: ¡°Me han dicho mil veces que era una etapa vital y que estaba confundido¡±

?lex Robles tiene 30 a?os, reside en Salamanca y vive por primera vez el desfile estatal del Orgullo. Quiere reivindicar mejoras porque detecta ¡°un retroceso en el apoyo al colectivo y una apropiaci¨®n excluyente del movimiento que deriva en pinkwashing¡±. Por otra parte, considera que las instituciones madrile?as deben preguntar ¡°qu¨¦ necesitan las personas LGTBIQ+ y no decidir por ellas¡±.

Siente que ¨¦l ha tenido suerte por poder salir del armario a los 16 a?os. Asegura que la media en las personas bisexuales que conoce se sit¨²a en los 30. ¡°La bifobia se sufre dentro y fuera del movimiento, siempre toca dar explicaciones que no se exigen a las dem¨¢s personas¡±, cuenta. Piensa que se cuestiona mucho m¨¢s su orientaci¨®n sexual: ¡°Me han dicho mil veces que era una etapa vital, que estaba confundido y que era gay, pero que no lo ten¨ªa muy claro¡±.

Asegura que en su ciudad de residencia se respira odio contra el colectivo. ¡°Es una sociedad bastante conservadora, igual que la del resto de Castilla y Le¨®n. Se refleja en nuestro Gobierno auton¨®mico¡±, expresa. Cree que las agresiones f¨ªsicas y verbales han aumentado y lamenta ¡°vivir en la ¨²nica autonom¨ªa sin una ley LGTBIQ+ espec¨ªfica¡±.