Por qu¨¦ la v¨ªctima de violaci¨®n en Francia da la cara y no se muestra la de los acusados

Gis¨¨le P¨¦licot fue violada durante casi diez a?os por al menos 51 hombres mientras se encontraba inconsciente. Su marido, con el que llevaba 50 a?os casada, la drogaba hasta dejarla en un estado comatoso, para que decenas de hombres con los que contactaba por Internet la agrediesen sexualmente en su dormitorio mientras ¨¦l grababa o fotografiaba las escenas. El juicio, que comenz¨® el pasado lunes, ha conmocionado a...

Gis¨¨le P¨¦licot fue violada durante casi diez a?os por al menos 51 hombres mientras se encontraba inconsciente. Su marido, con el que llevaba 50 a?os casada, la drogaba hasta dejarla en un estado comatoso, para que decenas de hombres con los que contactaba por Internet la agrediesen sexualmente en su dormitorio mientras ¨¦l grababa o fotografiaba las escenas. El juicio, que comenz¨® el pasado lunes, ha conmocionado a toda Francia. M¨¢s all¨¢ del horror que entra?a el caso, es interesante porque la v¨ªctima pidi¨® y logr¨® que las vistas fueran p¨²blicas. Eso implica que puedan entrar periodistas a la sala, pero solo para transcribir lo que vean y oigan.

Adem¨¢s, Gis¨¨le P¨¦licot autoriz¨® a la prensa a grabarla entrando y saliendo del juzgado y tomando asiento en la sala antes de comenzar la vista. La decisi¨®n constituye una forma de activismo ¡ªal principio dud¨®, pero la convenci¨® su hija¡ª para se?alar claramente a quienes deber¨ªan sentir la deshonra. ¡°La verg¨¹enza tiene que cambiar de bando...¡±, dijo su abogado, frase que se ha convertido en una bandera de este caso.

La decisi¨®n tomada por P¨¦licot, sin embargo, no implica que pueda hacerse lo mismo con los 51 acusados, entre los que se encuentra el marido, Dominique P¨¦licot, ni mantener las c¨¢maras encendidas una vez ha comenzado el proceso (se comprueba tambi¨¦n que los tel¨¦fonos m¨®viles est¨¦n apagados). Las im¨¢genes de los acusados que se han emitido en las televisiones han sido tomadas antes de que comenzase la vista y sin que aparezca el rostro de ninguno de ellos.

Los acusados detenidos (una treintena de los 51) entran por otra puerta distinta que les permite ocultar su rostro, pero tampoco lo necesitar¨ªan: la ley les ampara. ?Por qu¨¦? Hasta abril de 2022, los juicios en Francia no pod¨ªan grabarse y solo se permit¨ªa en casos que formaban parte de la historia de la Rep¨²blica. Una ley aprobada ese a?o, sin embargo, cambi¨® esa norma y abri¨® la posibilidad de tomar im¨¢genes, pero de forma muy restringida. ¡°Las grabaciones de las audiencias solo podr¨¢n ser difundidas cuando el caso haya sido definitivamente juzgado, con el acuerdo y el respeto de los derechos de las partes: derecho a la imagen, respeto a la vida privada, presunci¨®n de inocencia, derecho al olvido, inter¨¦s superior de los menores o de los adultos bajo protecci¨®n¡±, reza la norma.

Hay algunas excepciones a esta norma, como los casos de terrorismo. Para el resto de procesos, se recurre siempre a dibujantes que realizan esbozos de las escenas en las que toman parte los acusados y las v¨ªctimas. Esas son, precisamente, las ¨²nicas im¨¢genes que se est¨¢n distribuyendo de este proceso.

La ley aprobada en 2022 sigue siendo muy restrictiva. Si se quiere grabar un proceso o tomar fotograf¨ªas, se necesita un consentimiento expl¨ªcito de las partes y solo podr¨¢n ser distribuidas una vez haya terminado el juicio y se haya determinado la culpabilidad de los imputados. A¨²n as¨ª, hay muchos supuestos que siguen amparando a los acusados: ¡°Todas las personas filmadas, tanto profesionales como litigantes, deber¨¢n completar un formulario de consentimiento relacionado con la grabaci¨®n y la difusi¨®n de su imagen. Estos formularios se anexan a una orden publicada paralelamente al decreto de aplicaci¨®n. La decisi¨®n de autorizar la grabaci¨®n de las audiencias de los tribunales judiciales y de las cortes de apelaci¨®n ser¨¢ otorgada, tras el asesoramiento consultivo del Ministerio de Justicia, por el primer presidente de la corte de apelaci¨®n para las audiencias de dicha corte y de las jurisdicciones del orden judicial bajo su competencia¡±.