¡®Los Windsor¡¯, el sarcasmo llevado al l¨ªmite
El fresco que la productora brit¨¢nica ofrece sobre la familia real es de brocha gorda, inmisericorde
La comedia de situaci¨®n Los Windsor (Netflix), deja a Polonia, de TV3, como una funci¨®n de parvulario. El fresco que la productora brit¨¢nica ofrece sobre la familia real es de brocha gorda, inmisericorde. No busquen iron¨ªa, ni siquiera atisbo de fina inteligencia. Lo que hay es un grupo con un denominador com¨²n: son todos unos par¨¢sitos descerebrados. Con una salvedad: ni la reina Isabel ni su marido aparecen en ning¨²n cap¨ªtulo.
El pr¨ªncipe Carlos es un zurupeto medioambientalista que solo origina desastres ecol¨®gicos. Camilla es Cruella de Ville: solo le interesa el poder...
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La comedia de situaci¨®n Los Windsor (Netflix), deja a Polonia, de TV3, como una funci¨®n de parvulario. El fresco que la productora brit¨¢nica ofrece sobre la familia real es de brocha gorda, inmisericorde. No busquen iron¨ªa, ni siquiera atisbo de fina inteligencia. Lo que hay es un grupo con un denominador com¨²n: son todos unos par¨¢sitos descerebrados. Con una salvedad: ni la reina Isabel ni su marido aparecen en ning¨²n cap¨ªtulo.
El pr¨ªncipe Carlos es un zurupeto medioambientalista que solo origina desastres ecol¨®gicos. Camilla es Cruella de Ville: solo le interesa el poder y es capaz de acostarse con un vociferante Donald Trump para conseguir su apoyo, lo que consigue a cambio de mantener en secreto el ¡°gatillazo¡± del Presidente. El pr¨ªncipe Guillermo no se entera de nada aunque consigue que la ministra principal de Escocia se manifieste en contra de la independencia, una actitud en la que puso su grano de arena su esposa, Kate, pues en un viaje oficial a Escocia, y convencida que todos los escoceses son como los de Trainspotting, se dedicar¨¢ a convencer a los internos de un centro de rehabilitaci¨®n de lo mala que es la droga, incluso meti¨¦ndose un ¡°pico¡± para demostrarlo.
El pr¨ªncipe Enrique sit¨²a el coeficiente intelectual en niveles abisales. Meghan es incapaz de acabar una frase sin citar su serie Suits y tendr¨¢ en Pippa Middleton una rival feroz. La princesa Ana es la reencarnaci¨®n de la se?orita Rottenmeier. Su hermano, el pr¨ªncipe Andr¨¦s, tiene dos prioridades: las fiestas que organizaba un conocido ped¨®filo y los negocios turbios con Kazajist¨¢n. Y sus hijas, Beatriz y Eugenia, mantienen el nivel intelectual familiar con eficacia. Como dir¨ªa el Pirandello, as¨ª es (si as¨ª os parece).