Tiempo de mujeres
En M¨¦xico, la meteorolog¨ªa en la televisi¨®n es un espect¨¢culo del 'Playboy' que deja con la boca abierta
Hablar del tiempo que hace hoy o har¨¢ ma?ana es algo tan socorrido como recurrente es la rentable explotaci¨®n del cuerpo femenino. En M¨¦xico han mezclado ambas cosas y la meteorolog¨ªa en la televisi¨®n es un espect¨¢culo del Playboy que deja con la boca abierta. Aunque el machismo en este pa¨ªs sale a 10 v¨ªctimas mortales cada d¨ªa, las feministas atraviesan su momento m¨¢s combativo y exitoso, que tiene como uno de sus objetivos prioritarios echar abajo algunas aberrantes costumbres de los medios de comunicaci¨®n. Los peri¨®dicos a¨²n muestran im¨¢genes de mujeres descuartizadas que les filtra ...
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Hablar del tiempo que hace hoy o har¨¢ ma?ana es algo tan socorrido como recurrente es la rentable explotaci¨®n del cuerpo femenino. En M¨¦xico han mezclado ambas cosas y la meteorolog¨ªa en la televisi¨®n es un espect¨¢culo del Playboy que deja con la boca abierta. Aunque el machismo en este pa¨ªs sale a 10 v¨ªctimas mortales cada d¨ªa, las feministas atraviesan su momento m¨¢s combativo y exitoso, que tiene como uno de sus objetivos prioritarios echar abajo algunas aberrantes costumbres de los medios de comunicaci¨®n. Los peri¨®dicos a¨²n muestran im¨¢genes de mujeres descuartizadas que les filtra la polic¨ªa a cambio de algunos pesos; y el asesino sale en ocasiones lloroso explicando sus razones para clavar 60 veces un cuchillo. Otras veces, una mujer es ahorcada en el patio de su casa delante de su hijita y el caso no encuentra eco. O no tanto ni como debiera.
El 8-M pasado, cuando en M¨¦xico a¨²n no se hablaba de coronavirus, las feministas desbordaron los inmensos bulevares impelidas por el hartazgo contra las Administraciones, la ira ante el comportamiento policial y la verg¨¹enza por un sistema jur¨ªdico que deja impunes m¨¢s del 90% de estos cr¨ªmenes. El lunes que sigui¨®, se convoc¨® una huelga general de mujeres, la primera de calado nacional, que result¨® exitosa dadas las circunstancias socioecon¨®micas de este pa¨ªs. Algunas de las grandes figuras de la televisi¨®n secundaron el paro y la programaci¨®n se vio alterada. Quiz¨¢ las mu?equitas del tiempo protestaron tambi¨¦n ese d¨ªa brillando por su ausencia. Pero eso dur¨® lo que tard¨® en llegar el martes. Ah¨ª las tienen de nuevo, con sus escotes imposibles, sus largas piernas al aire, cinturas bien apretadas, maquillaje impoluto y gestos insinuantes que se?alan el curso de las tormentas y los huracanes. J¨®venes bellezas de criterios inacabados que se pelean entre ellas en las revistas del coraz¨®n mientras los magnates televisivos llenan sus billeteras. Cu¨¢ndo el hombre del tiempo pas¨® a ser las chicas del tiempo es irrelevante ahora. Solo importa el momento en que acabar¨¢ esta verg¨¹enza.