La Navidad empieza ma?ana
La loter¨ªa navide?a empieza a venderse en julio, el turr¨®n llega a los supermercados en septiembre y a mediados de noviembre los Pap¨¢s Noel ya escalan fachadas. ?Cu¨¢ndo empieza exactamente la Navidad y por qu¨¦ tenemos cada vez m¨¢s prisa?
Recuerdo, l¨¦ase esto con la voz del abuelo Abe Simpson explicando la historia del limonero de Springfield, cuando el inicio de la Navidad lo marcaban los ni?os de San Ildefonso y la voz arrulladora de Marisa Abad. Si ya estaba de vacaciones mi misi¨®n era colocar los boletos por terminaciones para que el adulto que segu¨ªa la retransmisi¨®n pudiese comprobar de un vistazo si una bolita al azar nos hab¨ªa convertido en los...
Recuerdo, l¨¦ase esto con la voz del abuelo Abe Simpson explicando la historia del limonero de Springfield, cuando el inicio de la Navidad lo marcaban los ni?os de San Ildefonso y la voz arrulladora de Marisa Abad. Si ya estaba de vacaciones mi misi¨®n era colocar los boletos por terminaciones para que el adulto que segu¨ªa la retransmisi¨®n pudiese comprobar de un vistazo si una bolita al azar nos hab¨ªa convertido en los ricos del barrio. La liturgia se completaba con el repaso del peri¨®dico de la tarde porque, aunque en casa no hubieses visto m¨¢s peri¨®dicos que las p¨¢ginas amarillentas que cubr¨ªan la parte superior de los muebles, la edici¨®n vespertina con los n¨²meros premiados en el Sorteo Extraordinario no faltaba en ning¨²n hogar.
Ahora la Navidad empieza en cuanto acaba el verano. Podemos comprar la loter¨ªa en julio, el turr¨®n llega a los supermercados en septiembre y a mediados de noviembre ya se atisban Pap¨¢s Noel escalando fachadas. El Black Friday, que antes duraba un d¨ªa y ahora un mes y sumando, espolea la gran cita consumista anual. Nadie, por muy devoto que sea, puede percibir un ¨¢pice de espiritualidad en lo que no es m¨¢s que una agotadora gymkana de mercadillos, atracciones cutres y ruidosas que colapsan los centros de las ciudades y contaminaci¨®n lum¨ªnica convertida en reclamo tur¨ªstico.
Pero mejor abstenerse de cuestionarlo, cualquier disidencia te har¨¢ sospechoso de ser un Grinch. Aunque el personaje del Dr. Seuss naciese con el fin de denunciar el desparrame mercantilista. No ser¨¦ yo quien pida que se detenga esta algarab¨ªa de cart¨®n piedra, abrazo cualquier tradici¨®n en la que est¨¦ socialmente aceptado que haya dulces y alcohol en la mesa durante todo el d¨ªa. Eso s¨ª, lo de felices fiestas no quiero escucharlo hasta que salga la primera bola del bombo.
Puedes seguir EL PA?S Televisi¨®n en X o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.