La guerra de Vietnam, contada por sus veteranos: ¡°?Cu¨¢ndo vamos a aprender la lecci¨®n y ser m¨¢s humildes?¡±
Una serie documental de Apple TV+ logra convertir las devastadoras cifras del conflicto b¨¦lico m¨¢s controvertido de la historia de Estados Unidos en testimonios humanos con nombres y apellidos, 50 a?os despu¨¦s de que llegara a su fin
A menudo, cuando ocurren tragedias masivas, a los periodistas e historiadores les cuesta poner rostro a sus v¨ªctimas. M¨¢s de 2,7 millones de estadounidenses sirvieron durante la Guerra de Vietnam. Y m¨¢s de 58.000 murieron durante el conflicto. Se calcula que hasta 3 millones de vietnamitas fallecieron en esos 20 a?os de conflicto, entre mediados de los cincuenta y mediados de los setenta. La serie documental Vietnam: La guerra que cambi¨® a Estados Unidos, ya disponible en el cat¨¢logo de Apple TV+, pone nombres y apellidos a esas desoladoras cifras.
Narrado por el actor Ethan Hawke y dirigido por Rob Coldstream, quien ha trabajado en documentales centrados en Donald Trump, La reina Isabel II de Inglaterra y Ana Bolena, Vietnam: La guerra que cambi¨® a Estados Unidos rememora en seis cap¨ªtulos el conflicto b¨¦lico que marc¨® la historia de ambos pa¨ªses, en el 50? aniversario de la ca¨ªda de Saig¨®n y del fin de la guerra m¨¢s controvertida en la historia del pa¨ªs norteamericano. Intensos testimonios en primera persona e inmersivas im¨¢genes de archivo intentan hacer que el relato resulte lo m¨¢s ¨ªntimo posible.
A lo largo de sus episodios, la serie documental de Apple TV+ tambi¨¦n muestra los da?os colaterales que sufrieron muchos civiles en ambos bandos y el reencuentro entre soldados que sobrevivieron en el campo de batalla, tras muchos a?os sin verse.
Uno de esos rostros que humanizan la serie es el del estadounidense Bill Broyles (Houston, Texas, 80 a?os), veterano de la Guerra de Vietnam y guionista, que ha recurrido a sus experiencias personales para rememorarlas o adaptarlas en ficciones como la serie de televisi¨®n China Beach y en las odiseas cinematogr¨¢ficas Apolo XIII, Jarhead, Banderas de nuestros padres y N¨¢ufrago. El cineasta adem¨¢s de entrevistas, ha colaborado con el equipo de la serie documental como asesor. ¡°La idea era contar todo aquello que no sale en los libros de historia y en la mayor¨ªa de los documentales sobre Vietnam, casi siempre centrados en el an¨¢lisis hist¨®rico y b¨¦lico; en patrones m¨¢s generales¡±, explica ¨¦l mismo a EL PA?S a finales de enero desde su casa de Santa Fe, Nuevo M¨¦xico, en conversaci¨®n telem¨¢tica.
¡°Me he visto como 50 pel¨ªculas de ficci¨®n que tratan sobre la Guerra de Vietnam y, aunque todas tienen sus cosas buenas, terminan siendo una forma de mostrar las opiniones pol¨ªticas de su director. Hollywood durante a?os recurri¨® a Vietnam para retratar a sus psic¨®patas de ficci¨®n, como en Taxi Driver¡±, comenta el guionista de cine y televisi¨®n. ¡°Por eso este documental intenta ser m¨¢s humano. Sus cap¨ªtulos me han recordado a eso que dec¨ªa William Faulkner: ¡®El pasado nunca se muere. Ni siquiera es pasado¡¯. Bueno, en Espa?a eso lo sab¨¦is mejor que nadie¡±, comenta.
Broyles tambi¨¦n vive ante la c¨¢mara uno de los reencuentros que aparecen en la serie. Recuerda que, cuando tom¨® el mando de su pelot¨®n, sus hombres ya llevaban meses en la guerra. Su primer tiroteo le dej¨® tan conmocionado que perdi¨® la voz. Tuvo que depender de su operador de radio, Jeff Hiers, que a esas alturas ya encarnaba el desencanto que se hab¨ªa apoderado de aquellos soldados. La relaci¨®n de ambos se hizo ¨ªntima cuando Broyles decidi¨® insubordinarse y fingir conexiones de radio para aparentar ante los altos mandos militares que estaban en el campo de batalla, cuando en realidad manten¨ªa a sus hombres al margen de todo conflicto. ¡°Conectados por un cable de radio, la vida del uno depend¨ªa de la del otro¡±, dice.
Broyles recurri¨® a Hiers como consultor de su serie China Beach. La ¨²ltima que coincidieron fue hace 40 a?os, en un acto conmemorativo por las v¨ªctimas de Vietnam. ¡°Cuando lo conoc¨ª, ¨¦l era un chico de 19 a?os que hab¨ªa abandonado la escuela, pero que ten¨ªa mucha m¨¢s experiencia que yo en el campo de batalla. Aprend¨ª de mis subordinados mucho m¨¢s de lo que lo hice en la Universidad Oxford¡±, admite el cineasta. ¡°Al reencontrarme con ¨¦l de nuevo para el documental, pens¨¦: ¡®Ah¨ª le tienes, el soldado m¨¢s rebelde de la historia que se presenta un mont¨®n de a?os despu¨¦s con su chaqueta militar¡¯. Porque, a pesar de todo, lo que vivi¨® ha seguido siendo importante en su vida¡±, comenta Broyles.
Para lograr im¨¢genes no tan vistas de un hecho hist¨®rico que lleva medio siglo siendo analizado, el equipo de investigaci¨®n de la serie se dividi¨® en dos grupos. Uno de ellos examin¨® m¨¢s de 1.000 de im¨¢genes de archivo almacenadas en varios pa¨ªses del mundo. El otro, sigui¨® la pista de las personas que aparec¨ªan en ellas y termin¨® charlando directamente con m¨¢s de 1.000 de ella, tambi¨¦n a lo largo de todo el planeta.
Para actualizar el material de archivo no digitalizado, los responsables de la serie volvieron a escanearlo en 4K y a restaurarlo y coloreado cuando era necesario. Sus fuentes audiovisuales son tan dispares que combinan las grabaciones personales en Super 8 que el piloto John Stiles film¨® desde su propia cabina, las grabaciones de la pionera corresponsal de guerra canadiense Hilary Brown que se quedaron en su d¨ªa en la sala de montaje y unas semidesconocidas im¨¢genes en color japonesas que muestran el d¨ªa a d¨ªa de la guerra desde el punto de vista vietnamita.
¡°Mi hijo ha estado en la Guerra de Irak y tambi¨¦n en la de Afganist¨¢n. Se alist¨® tras los atentados del 11 de septiembre. Le rogu¨¦ que no lo hiciera. Incluso comenc¨¦ a procesar mi experiencia en Vietnam de un modo distinto cuando me convert¨ª en padre de un hijo que estaba en el campo de batalla. Todav¨ªa ten¨ªa m¨¢s claro lo que ya ve¨ªamos entonces. ?Qu¨¦ tiene que ver con nosotros Irak o Afganist¨¢n? ?Qu¨¦ se nos perdi¨® en Vietnam? ?Cu¨¢ndo vamos a aprender la lecci¨®n de una vez?¡±, concluye Broyles.