La inversi¨®n china en Colombia se triplic¨® entre 2021 y 2022
Empresas del gigante asi¨¢tico han ganado grandes licitaciones de infraestructura . Los expertos alertan sobre la falta de estrategia estatal para sacar mejor provecho de unas relaciones comerciales a¨²n modestas
El metro de Bogot¨¢. El RegioTram de Occidente. El megaproyecto Puerto Antioquia, en el Urab¨¢. La autopista Mar 2, en el norte de Antioquia. Todos son proyectos millonarios integrados a la creciente red de contratos con cuota china en Colombia. La participaci¨®n del gigante asi¨¢tico tuvo un crecimiento del 218% en la econom¨ªa colombiana en tan solo un a?o. Si el valor de la inversi¨®n extranjera directa total durante 2021 fue de 83,5 millones de d¨®lar...
El metro de Bogot¨¢. El RegioTram de Occidente. El megaproyecto Puerto Antioquia, en el Urab¨¢. La autopista Mar 2, en el norte de Antioquia. Todos son proyectos millonarios integrados a la creciente red de contratos con cuota china en Colombia. La participaci¨®n del gigante asi¨¢tico tuvo un crecimiento del 218% en la econom¨ªa colombiana en tan solo un a?o. Si el valor de la inversi¨®n extranjera directa total durante 2021 fue de 83,5 millones de d¨®lares, un a?o b¨¢sicamente congelado debido a la crisis sanitaria, para diciembre de 2022 lleg¨® a los 265,5 millones, seg¨²n datos aproximados del Banco de la Rep¨²blica.
A pesar de que las inversiones de Estados Unidos mantienen a ese pa¨ªs como el mayor socio comercial de Colombia, el dinero chino influye cada vez en m¨¢s ¨¢reas de la econom¨ªa local. Basta con una b¨²squeda superficial para encontrar proyectos con componentes comerciales, de seguridad, energ¨ªas renovables, y, especialmente, de infraestructuras, un sector estrat¨¦gico para el Gobierno de Xi Jinping, que en los ¨²ltimos a?os ha extendido una tela de ara?a apoyada en su enorme excedente de capital y con ramificaciones geopol¨ªticas al mejor estilo del Plan Marshall estadounidense.
David Castrill¨®n-Kerrigan, docente e investigador de la Universidad Externado, explica que hasta 2013 y 2014 la participaci¨®n de China se limitaba al sector minero energ¨¦tico. ¡°Se concentraba en campos de explotaci¨®n petrolera, de carb¨®n, o generaci¨®n de electricidad¡±, asegura. Desde entonces, prosigue, lo ¨²nico que ha frenado la profundizaci¨®n a m¨¢s sectores ha sido la pandemia, que tuvo a m¨¢s de 350 millones de personas, el 20% de la poblaci¨®n mundial, confinadas en China hasta el pasado 8 de enero.
Para Javier Luque, catedr¨¢tico de la Universidad del Rosario y experto en negocios con Asia, la ecuaci¨®n es compleja. Se refiere a la claridad de las proyecciones. Desde su punto de vista, las cifras oficiales de inversi¨®n del banco central o de entidades estatales como ProColombia ¡°funcionan muy bien¡±, pero dejan por fuera algunos factores que son clave para ganar precisi¨®n: ¡°Mucha de la inversi¨®n proveniente de para¨ªsos fiscales, que no se tiene en cuenta en la elaboraci¨®n de las cifras oficiales, viene en realidad de pa¨ªses como China. Dicho de una forma m¨¢s clara, si t¨² miras el destino oficial, desde rastreadores digitales, los mayores destinos de inversi¨®n china son las Islas V¨ªrgenes brit¨¢nicas, las Islas Caim¨¢n, Islas Mauricio o Islas Seychelles¡±.
Otra realidad que queda por fuera, a?ade David Castrill¨®n, es la falta de contabilizaci¨®n de grandes multinacionales que han pasado a manos chinas a pesar de conservar sus sedes financieras en sus pa¨ªses de origen: ¡°Volvo (carros), Naf Naf (textiles) y el 25% de las cadenas hoteleras Hilton a escala mundial son algunos ejemplos de compa?¨ªas que tienen detr¨¢s un enorme respaldo chino. Si bien no suponen inversiones gigantescas en el pa¨ªs, s¨ª van sumando de forma inadvertida y debemos contarlas para poder dimensionar con exactitud los vol¨²menes en los flujos de capital¡±.
En el marco global, de toda la inversi¨®n extranjera entre 2007 y 2021, seg¨²n cifras del Banco de la Rep¨²blica, la china suma menos del 0,5%. Pero ese dato resalta m¨¢s el cambio reciente y deja al gigante como el mayor inversionista asi¨¢tico en Colombia, con unas 100 empresas en operaci¨®n que generan 40.300 empleos, seg¨²n ProColombia. Entre 2018 y 2022, los cinco a?os m¨¢s recientes, esa cifra es del 700%, pasando de 21,5 millones de d¨®lares a 265,5 millones. Si se mira de forma global el per¨ªodo 2021, el total de la inversi¨®n directa en Colombia fue de 3.300 millones de d¨®lares, de los cuales el 83,5 provinieron de China.
Es una cifra peque?a, mucho menor que la de otros pa¨ªses suramericanos: ¡°Brasil, Chile y Per¨² han tenido, desde 2000, cuando China se abri¨® a la firma de tratados bilaterales, relaciones comerciales mucho m¨¢s estrechas¡±, afirma la directora de la C¨¢mara Colombo-China, Ingrid Chaves. En Chile, ejemplifica Chaves, hay m¨¢s de 200 proyectos en distintos frentes andando actualmente, mientras que en Colombia no pasan de 38: ¡°El total de proyectos de empresas chinas en Colombia es equivalente a las operaciones de un a?o en Brasil¡±, concluye.
Queda claro, en todo caso, que el ¨¢nimo renovado en la actividad comercial registrado por el Emisor es un reflejo de din¨¢micas internacionales, como el lanzamiento de las nuevas pol¨ªticas de inversi¨®n en infraestructura del presidente estadounidense, Joe Biden, que acaparan la atenci¨®n de empresas que antes licitaban en Colombia, o el descr¨¦dito causado por esc¨¢ndalos de corrupci¨®n como el de la brasilera Odebrecht, que ha minado hasta cierto punto la confianza en las compa?¨ªas de la regi¨®n. Tambi¨¦n el repliegue comercial de otros actores internacionales que, ante la guerra en Ucrania, se muestran cautos antes de aventurarse a proyectos en pa¨ªses de renta media como Colombia.
Un escenario propicio para que China, una potencia con margen suficiente para participar en varios frentes, se convierta en ¡°un jugador de inversi¨®n internacional m¨¢s importante en Colombia¡±, asevera Sergio Guzm¨¢n, director del centro de pensamiento Colombia Risk Analysis, que precisamente publicar¨¢ en un mes un estudio sobre este asunto. David Castrill¨®n considera que tras las m¨²ltiples inversiones chinas en Ecuador, donde durante a?os acapararon las obras m¨¢s emblem¨¢ticas, el turno le corresponde a Colombia: ¡°Parece como si estuvieran enamorados de Colombia. Adem¨¢s, seg¨²n las investigaciones que hemos hecho, las empresas chinas han tenido ¨¦xito en las licitaciones locales y han jalado a otras empresas que han visto que pueden participar y les puede ir bien¡±.
Guzm¨¢n lamenta que los ¨²ltimos Gobiernos no hayan delineado una estrategia clara para sacar mejor provecho de las relaciones bilaterales. Al mismo hilo, Castrill¨®n manifiesta su inconformidad y lo contrasta con la ¡°visi¨®n regional y de pa¨ªs por pa¨ªs que tiene China de Latinoam¨¦rica. Tiene sus pol¨ªticas y mecanismos claros para negociar con cada Gobierno seg¨²n sus particularidades. Estamos en desventaja porque no sabemos en realidad qu¨¦ queremos de ellos¡±.
Una desventaja que, recuerda Guzm¨¢n, encarna ciertos riesgos. Sin demonizar las relaciones con un pa¨ªs fundamental en la escena global, recuerda que las relaciones con China comportan particularidades: ¡°En ocasiones, el modelo chino puede tener mayor tolerancia a la falta de transparencia o con los pliegos sastre, hechos a la medida de un oferente en una subasta. Son cuestiones que se pueden constatar en otros pa¨ªses, en los que China no se ha ruborizado tras verse inmerso en casos de corrupci¨®n¡±. Menciona como ejemplo el caso del puerto de Sri Lanka, los millonarios sobornos para lograr contratos en Venezuela o los problemas de la hidroel¨¦ctrica de Coca Codo, en Ecuador.
Chaves, de la C¨¢mara Colombo-china, resalta que Colombia es uno de los pocos pa¨ªses sudamericanos, junto a Brasil, que no han adherido al plan estrat¨¦gico de desarrollo comercial de China, una iniciativa llamada La Franja y la Ruta. Javier Luque concluye que a¨²n falta un buen trecho por andar: ¡°Si bien hay un crecimiento, Colombia es el que menos ha recibido inversi¨®n en Suram¨¦rica, dejando por fuera a Paraguay, que tiene relaciones con Taiw¨¢n. Nunca hemos recibido una visita de Estado. Colombia ha recibido un poco menos del 0,2% de la inversi¨®n china en el mundo entre 2005 y 2021¡å.
?Alguna tesis para explicarlo? ¡°Tiene que ver¡±, remata Luque, ¡°con un viejo prejuicio oficial de que, si nos acercamos mucho a China, Estados Unidos, el gran socio hist¨®rico, se podr¨ªa alejar. Hay un miedo precedido por un componente ideol¨®gico que ya no es v¨¢lido. Desde que Julio C¨¦sar Turbay (presidente entre 1978 y 1982) abri¨® las relaciones diplom¨¢ticas con China, solo los presidentes Samper, Pastrana, Santos y Duque la han visitado. Nunca ha sido un pa¨ªs al que se le haya considerado estrat¨¦gico¡±.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.