La inflaci¨®n en Colombia baja al 5,20% en 2024, pero encara leves s¨ªntomas de presi¨®n al bolsillo
El resultado del ?ndice de Precios al Consumidor (IPC) para el ¨²ltimo mes del a?o genera expectativa por su impacto en el aumento del precio de los arriendos y los peajes
Colombia cerr¨® 2024 con una inflaci¨®n anual de 5,20% tras un proceso de desescalada notable de m¨¢s de cuatro puntos porcentuales en un a?o ¨Cdesde el 9,28% de diciembre de 2023¨C. La bestia negra de la econom¨ªa, al parecer, es cosa del pasado. No obstante, existen se?ales para evitar triunfalismos. Las presiones registradas en algunos rubros en diciembre, un mes marcado por el consumo navide?o de los hogares y la compra de tiquetes terrestres o a¨¦reos, se daban por descontadas. Pero desde los ¨²ltimos meses han surgido otras alertas menos previsibles. Algunas est¨¢n ancladas, por ejemplo, a los sacudones al alza en la cotizaci¨®n del d¨®lar. Otras, al impacto del entrante verano sobre el costo de los alimentos. O, por ¨²ltimo, al te¨®rico lastre que supondr¨¢ para el mercado laboral el alza del 9,5% al salario m¨ªnimo decretado por el Gobierno.
La variaci¨®n mensual para diciembre fue del 0,46%. El segmento denominado de ¡°alojamiento¡± fue el que m¨¢s presion¨® el ¨ªndice en puntos porcentuales. Es decir, los arrendamientos y los recibos de la luz, el agua y el gas tiraron del ¨ªndice de precios (0,18%). Lo siguieron los restaurantes y los hoteles (0,11%). ¡°Esta historia est¨¢ mucho m¨¢s jalonada por lo que sucede en los precios de los almuerzos, de los corrientazos y comidas consumidas por fuera del hogar. Toda la comida preparada como empanadas, pasteles, pizzas generaron esta variaci¨®n¡±, explic¨® Piedad Urdinola, directora del Departamento Administrativo Nacional de Estad¨ªstica (DANE). Y en tercer lugar los alimentos (0,10%). Sobre este rengl¨®n recalc¨® que, por ejemplo, para el caso de las frutas la ca¨ªda fue menos pronunciada que en otros meses. Tambi¨¦n llam¨® la atenci¨®n sobre el ligero crecimiento de los costos en las legumbres y las grasas y los aceites. La directora Urdinola record¨®, en cualquier caso, que la tendencia en la curva inflacionaria general ya es similar al panorama prepand¨¦mico.
El dato, presentado sobre el filo de la tarde del jueves llega en medio de m¨²ltiples y agitados debates. Primero, por tratarse de una tasa que sirve de gu¨ªa para fijar otros indicadores. El precio de los arriendos y de los peajes, por ejemplo, se indexa de acuerdo a la evoluci¨®n inflacionaria. O la Unidad de Pago por Captaci¨®n (UPC), que es el monto anual que el Estado transfiere a las aseguradoras en salud por cada afiliado para su mantenimiento. El Gobierno, en plena incertidumbre financiera del sistema sanitario, estableci¨® el 2 de enero un incremento del 5,36% para este segmento en 2025. Un monto etiquetado de inveros¨ªmil por los gremios de un sector endeudado hasta el cuello.
¡°El de salud es un tema que se mueve en paralelo a otra realidad, y es que el pa¨ªs importa muchos de los medicamentos que se venden. Hay que ver los resultados de inflaci¨®n a lo largo de este semestre, porque el proceso podr¨ªa tener distorsiones debido a la tasa de cambio¡±, explica la acad¨¦mica de la Universidad del Rosario Clara In¨¦s Pardo. El caso sirve como recuerdo de que el campo a¨²n puede estar minado. O de la complejidad que supondr¨¢ llevar para este a?o la inflaci¨®n al rango meta del 3% establecido por el Banco de la Rep¨²blica.
Es un objetivo que despierta reservas en Andr¨¦s Langebaek, director de estudios econ¨®micos del grupo Bol¨ªvar: ¡°Una de las razones tiene que ver con el salario m¨ªnimo. Esto tendr¨¢, quiz¨¢s en el primer trimestre, un impacto importante sobre algunos servicios o comida fuera del hogar. Tambi¨¦n de celadur¨ªa o de peluquer¨ªa. Eso nos preocupa¡±. Agrega que sus c¨¢lculos de largo plazo sugieren que la fase descendente en la inflaci¨®n de alimentos, tan marcada el a?o pasado, no ser¨ªa tan fluida en 2025. Por su parte, Jackeline Piraj¨¢n, economista principal de ScotiaBank Colpatria, incide sobre los escollos que podr¨ªan surgir con el alza del salario m¨ªnimo: ¡°Es el dato importante. Sobrepas¨® m¨¢s de tres puntos porcentuales las estimaciones preliminares que ten¨ªan el Ministerio de Hacienda y el Banco de la Rep¨²blica¡±.
Razones suficientes para que la analista apele a la prudencia: ¡°La subida impacta al 50% de la canasta familiar. Eso podr¨ªa impedir que la inflaci¨®n toque el rango meta este a?o. Entonces, a pesar de que el dato de hoy es importante para saber c¨®mo se corrigen los precios en Colombia, creemos que hay que monitorear qu¨¦ tan lento seguiremos convergiendo hacia el objetivo en el primer trimestre de 2025¡å.
Queda claro que el precio de los arriendos seguir¨¢ sacudiendo el tablero de estad¨ªsticas del DANE a lo largo del a?o. No en vano tiene un peso que bordea el 25% dentro de los componentes que m¨¢s pesan dentro de la canasta familiar en Colombia. ¡°Hay que aclarar que los arriendos est¨¢n mucho m¨¢s indexados a la inflaci¨®n que al salario m¨ªnimo. Y tambi¨¦n que se indexan a lo largo del a?o dependiendo del mes en que se renueva cada contrato¡±, precisa Carolina Monz¨®n, gerente de investigaciones econ¨®micas de Ita¨² Colombia.
Lo dice para recordar que el jal¨®n a los precios se puede producir en cualquier mes. ¡°Ese proceso deber¨ªa continuar. Sin embargo, con una inflaci¨®n de cierre de 2024 inferior a la de 2023, creemos que esas variaciones deber¨ªan ser menores, aunque todav¨ªa positivas siendo un eje clave para los hogares¡±, a?ade Monz¨®n. Por ¨²ltimo, la directora del DANE record¨® que la ciudad colombiana con la mayor tasa de inflaci¨®n en 2024 fue Bucaramanga. Fue la ciudad m¨¢s costosa para vivir. Y a nivel internacional apunt¨® que el pa¨ªs ha cerrado las brechas con pa¨ªses vecinos y ya se acerca a los niveles de algunas de las grandes econom¨ªas de la regi¨®n como M¨¦xico (4,21%), Chile (4,5%) o Brasil (4,76%).