Ucrania o por qu¨¦ Petro y Trump pueden ser amigos
Ni el presidente colombiano ni el estadounidense son capaces de comprender que en la guerra de Ucrania el agresor siempre fue Rusia. Poco a poco, Petro se va pareciendo a aquel que aborrece
A veces toca ir muy lejos para entender la importancia de los actos protagonizados por aquellos que ten¨ªamos al lado. Y aunque no es lo mismo, esta semana el presidente de Ucrania, le dio validez a aquello que el presidente de Colombia hizo con Donald Trump a finales del mes de enero. Aclaro: no es lo mismo, pues una cosa es que lo acusen a uno de comenzar una guerra y convertirse en dictador, cuando el mundo entero fue testigo de la forma en que Rusia (aunque ser¨ªa mejor d...
A veces toca ir muy lejos para entender la importancia de los actos protagonizados por aquellos que ten¨ªamos al lado. Y aunque no es lo mismo, esta semana el presidente de Ucrania, le dio validez a aquello que el presidente de Colombia hizo con Donald Trump a finales del mes de enero. Aclaro: no es lo mismo, pues una cosa es que lo acusen a uno de comenzar una guerra y convertirse en dictador, cuando el mundo entero fue testigo de la forma en que Rusia (aunque ser¨ªa mejor decir Putin) fue quien inici¨® la invasi¨®n y ha prolongado la guerra contra su vecina Ucrania, y otra muy distinta es comenzar una guerra pol¨ªtica y de aranceles con alto costo para su propio pa¨ªs por un asunto que pod¨ªa haberse dialogado y negociado, en vez de andar publicando beligerantes mensajes de madrugada contra el jefe de Estado del mayor socio de su propio pa¨ªs, como lo hizo Petro.
Sin embargo, la grandeza de Volod¨ªmir Zelensky al decir, sin sonrojarse y sin temor, aquello que todos sabemos de Trump, hace que uno pueda revaluar aquella desmesurada reacci¨®n del presidente colombiano cuando orden¨® que los aviones estadounidenses con inmigrantes esposados no aterrizaran en territorio colombiano.
Claro est¨¢ que Zelensky no tuvo que compararse con alg¨²n h¨¦roe hist¨®rico de su pa¨ªs, so?ar con whiskys imaginarios, ni tampoco hacer un paneg¨ªrico de la grandeza hist¨®rica y social de la naci¨®n que ha defendido sin descanso desde que empez¨® el horror liderado por Putin. El presidente de Ucrania simplemente dijo la verdad: que su hom¨®logo de los Estados Unidos prefiere creer las mentiras de un dictador como Putin que lleva, ese s¨ª, un cuarto de siglo gobernando con mano de hierro a Rusia, en vez de aceptar la verdad sobre aquello que cuentan reporteros del mundo entero, pol¨ªticos del mundo entero y cualquiera que tenga un m¨ªnimo de cordura.
Pero para eso Zelensky no necesit¨® de show en redes sociales, ni de mensajes populistas. La verdad se defiende sola y el presidente ucraniano solo necesit¨® de ella para interpretar aquello que muchos piensan, pero callan por miedo a las represalias. ?Cobardes todos! Incluso los que pelean con Trump v¨ªa Twitter (me reh¨²so a llamarlo X), porque en Twitter se escudan aquellos que son incapaces de aceptar un debate de ideas y buscan refugio en la caja de resonancia de sus seguidores y ¨¢ulicos.
No hay mejor ejemplo sobre esto ¨²ltimo que el que nos dio el mismo presidente Petro al enrostrarle a Colombia (v¨ªa Twitter, claro est¨¢) que su indecisi¨®n ante la situaci¨®n de Ucrania se justifica por la presente actuaci¨®n de Trump. Como si en un acto de clarividencia el presidente colombiano hubiera podido anticipar desde el 2022 que Trump iba a regresar a la Casa Blanca. ?Qu¨¦ clase de dem¨®crata es aquel que justifica su falta de acci¨®n ante la violaci¨®n de los derechos de otros con excusas sacadas de una bola de cristal?
Un defensor de derechos humanos, un dem¨®crata, un l¨ªder de los pueblos no se arredra ni ante las violaciones a los derechos humanos que Putin viene llevando a cabo en Rusia desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, as¨ª como tampoco calla ante las barbaridades de Trump II. Un hombre que promueve la pol¨ªtica del amor rechaza a quien agrede. Si ni Petro ni Trump son capaces de comprender que en la guerra de Ucrania el agresor siempre fue Rusia, pues qu¨¦ miedo. Porque poco a poco Petro se va pareciendo a aquel que aborrece: Trump.