De Manuel Rosales a Eduardo Fern¨¢ndez, as¨ª es la b¨²squeda de una candidatura alternativa a Mar¨ªa Corina Machado en Venezuela
La oposici¨®n muestra un gran consenso en torno a la ganadora de las primarias, pero ante su inhabilitaci¨®n algunos sectores apuestan por un plan b
Las facciones de la oposici¨®n venezolana intentan recomponer contra reloj la hoja de ruta que les permita participar unidas en las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. Sus intereses no siempre han coincidido y sus visiones estrat¨¦gicas a menudo han chocado, pero la coalici¨®n de partidos cr¨ªticos con Nicol¨¢s Maduro se encuentra ahora en un momento trascendental y tiene muy poco tiempo para decidir. El plazo para prese...
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Las facciones de la oposici¨®n venezolana intentan recomponer contra reloj la hoja de ruta que les permita participar unidas en las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. Sus intereses no siempre han coincidido y sus visiones estrat¨¦gicas a menudo han chocado, pero la coalici¨®n de partidos cr¨ªticos con Nicol¨¢s Maduro se encuentra ahora en un momento trascendental y tiene muy poco tiempo para decidir. El plazo para presentar candidatos vence el 25 de marzo y Mar¨ªa Corina Machado, la aspirante con m¨¢s posibilidades de ganar e inhabilitada por el chavismo, pidi¨® en un mensaje difundido a trav¨¦s de las redes sociales ¡°confianza¡± a sus seguidores. La veterana pol¨ªtica asegur¨® que tomar¨¢ ¡°las decisiones correctas¡± para llevar a las corrientes antichavistas a una victoria electoral.
En su mensaje, Machado ha abierto la puerta a soluciones alternativas para darle continuidad a la iniciativa pol¨ªtica que impulsa con vistas a las elecciones en caso de que el veto institucional en su contra no pueda ser modificado. A pesar de la casi total unanimidad existente en torno a Mar¨ªa Corina Machado, hay activistas, acad¨¦micos y partidos minoritarios que siguen promoviendo la propuesta de candidatos alternativos que la reemplacen.
Manuel Rosales, gobernador del estado Zulia, y l¨ªder de Un Nuevo Tiempo, ha sido propuesto p¨²blicamente por el dirigente opositor Luis Emilio Rond¨®n, uno de sus hombres de confianza, como un posible candidato. Un Nuevo Tiempo, un partido de la Plataforma Unitaria, de l¨ªnea socialdem¨®crata moderada, es una de las pocas organizaciones pol¨ªticas de la oposici¨®n que conserva su tarjeta admitida en las instancias del Consejo Nacional Electoral. Rosales no se hab¨ªa inscrito como candidato en las pasadas elecciones primarias del 22 de octubre.
Siempre insistiendo en la idea del consenso de partidos, otros sectores han propuesto de candidato a Eduardo Fern¨¢ndez, un veterano l¨ªder socialcristiano, candidato presidencial en 1988, dirigente fundamental de la democracia, que en estos a?os ha cultivado una l¨ªnea pol¨ªtica salom¨®nica y moderada. ¡°Quienes quieran capitalizar el malestar nacional no pueden ser personas arrogantes, pose¨ªdas por revanchismos¡±, sostiene V¨ªctor Alvarez, economista, antiguo dirigente chavista y hoy activista por el cambio. Su apuesta es Fern¨¢ndez.
¡°Un buen candidato tiene que ser un promotor del reencuentro de un pa¨ªs, terminar con la conflictividad, tener ideas claras de los problemas nacionales, con ascendencia ¨¦tica y moral sobre las Fuerzas Armadas en un proceso transici¨®n, Venezuela necesita un proyecto de uni¨®n nacional¡±, sostiene Mercedes Malav¨¦, activista opositora socialcristiana, secretaria general de Uni¨®n y Progreso, el partido que fund¨® Fern¨¢ndez hace ocho a?os.
¡°Para recuperar su recuperaci¨®n institucional, es necesario adelantar una serie de acuerdos viables, realistas, con los factores que est¨¢n en el poder, en funci¨®n de las necesidades del pa¨ªs, partiendo de la base de que el modelo econ¨®mico del oficialismo fracas¨® por completo¡±, agrega esta activista. ¡°He trabajado con Eduardo Fern¨¢ndez sobre la necesidad de generar una candidatura de consenso en este momento pol¨ªtico¡±, contin¨²a Malav¨¦, quien opone este comportamiento a la m¨¢s intransigente actitud de Machado. ¡°Desde el punto de vista partidista esto luce mal visto. Nuestra propuesta de un candidato de consenso incluye a otros sectores de la vida del pa¨ªs, un acuerdo sencillo en torno a un proyecto de gobernabilidad, interpretar de forma cabal la Constituci¨®n Nacional, superar definitivamente el modelo rentista de la naci¨®n¡±.
Hace un par de semanas, Eduardo Fern¨¢ndez viaj¨® a Maracaibo -segunda ciudad del pa¨ªs en importancia, capital del estado Zulia- para conversar personalmente con Rosales, y fortalecer, en la medida de los posible, una alianza entre los partidos de la oposici¨®n. ¡°Vine a reunirme con el gobernador Rosales para conversar con ¨¦l y pedirle que use toda su influencia para impedir que las fuerzas del cambio se dividan¡±, indic¨® a los periodistas.
Aunque ha recibido el respaldo de ciertas individualidades y partidos peque?os, Fern¨¢ndez -al fin y al cabo una personalidad conocida- tiene, con todo, una proyecci¨®n modesta en las encuestas y poco apoyo pol¨ªtico. En las filas del comit¨¦ de campa?a de Machado, la figura predominante de la oposici¨®n, hay total hermetismo en torno a nombres alternativos, entre los que ha sonado tambi¨¦n el de Gerardo Blyde, con una dilatada experiencia en negociaciones.
Machado, en cualquier caso, est¨¢ abocada a acordar internamente, porque el desigual y extenso campo opositor solo tiene dos tarjetas electorales disponibles para participar -la de Un Nuevo Tiempo y la de la Plataforma Unitaria-, luego de que el Consejo Nacional Electoral invalidara a 16 partidos pol¨ªticos opositores en los ¨²ltimos d¨ªas.
En las filas de la candidatura de Machado, su eventual sustituci¨®n es un tema que, de entrada, produce desagrado y es descartado de inmediato. Algunas voces aisladas han susurrado la posibilidad de Magalli Meda, su mano derecha en muchos temas pol¨ªticos y log¨ªsticos, con quien en ocasiones aparece retratada. Militante de Vente Venezuela, partido donde tiene enorme influencia, Meda es poco conocida en la opini¨®n nacional. El nombre de Meda ha circulado como especulaci¨®n, y tambi¨¦n ha sido negado, en principio porque nadie quiere hablar de ning¨²n nombre. Lo que se discute es c¨®mo enfrentar con arrestos la tesis del ¡°consenso¡± que intentan imponer sus rivales internos, y que podr¨ªa tomar vuelo para confrontarse en el campo de las fuerzas democr¨¢ticas.
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