El hijo de Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora pide al presidente de Guatemala un acuerdo que acabe con la persecuci¨®n penal del periodista
El fundador del diario ¡®elPeri¨®dico¡¯ est¨¢ en arresto domiciliario tras m¨¢s de 800 d¨ªas de c¨¢rcel, aislamiento y torturas
La decisi¨®n de la justicia guatemalteca de permitir al periodista Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora (Guatemala, 68 a?os) su salida de prisi¨®n, donde ha pasado m¨¢s de 800 d¨ªas, para cumplir en su casa una orden de arresto domiciliario, tiene un sabor agridulce para sus familiares y sus abogados. Es un arma de doble filo. ¡°Hemos logrado algo de justicia, pero este proceso no ha acabado¡±, explica en Londres el hijo del editor, Jos¨¦ Carlos Zamora, que reclama al Gobie...
La decisi¨®n de la justicia guatemalteca de permitir al periodista Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora (Guatemala, 68 a?os) su salida de prisi¨®n, donde ha pasado m¨¢s de 800 d¨ªas, para cumplir en su casa una orden de arresto domiciliario, tiene un sabor agridulce para sus familiares y sus abogados. Es un arma de doble filo. ¡°Hemos logrado algo de justicia, pero este proceso no ha acabado¡±, explica en Londres el hijo del editor, Jos¨¦ Carlos Zamora, que reclama al Gobierno guatemalteco la consecuci¨®n de un acuerdo amistoso que ponga fin a un proceso judicial que podr¨ªa prolongarse a¨²n durante a?os. Frente al alivio de volver a tener a su padre en casa, aunque sea privado de libertad, existe el riesgo de que la atenci¨®n internacional se desvanezca ante el espejismo de soluci¨®n de un caso que est¨¢ muy lejos de haber concluido satisfactoriamente.
La familia del periodista se ha aliado con la organizaci¨®n Reporteros Sin Fronteras y el prestigioso bufete londinense Doughty Street Chambers, especializado en Derecho Internacional Humanitario, para mantener viva la presi¨®n sobre el Gobierno de Guatemala.
El nuevo presidente del pa¨ªs, Bernardo Ar¨¦valo, que tom¨® posesi¨®n el pasado enero, se ha comprometido a hacer lo posible por solucionar la injusticia que sufre Zamora. El periodista fue encarcelado el 29 de julio de 2022, despu¨¦s de la persecuci¨®n por parte del equipo del expresidente Alejandro Giammattei (2020-2024) y por la todav¨ªa fiscal general, Consuelo Porras, a la que el Departamento de Estado de Estados Unidos ha incluido en su lista de personajes p¨²blicos corruptos y antidemocr¨¢ticos.
El diario elPeri¨®dico, con Zamora al frente, tuvo un papel fundamental en la lucha por la mejora de la democracia y las libertades en Guatemala, con numerosos reportajes de investigaci¨®n en los que destap¨® esc¨¢ndalos de corrupci¨®n de varios gobiernos. En mayo de 2023, el peri¨®dico no resisti¨® m¨¢s las presiones de las autoridades y cerr¨® sus puertas. Acabaron en la calle 200 profesionales.
¡°Cuando alguien sufre una persecuci¨®n como la que est¨¢ sufriendo Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora, el impacto sobre la libertad de informaci¨®n se extiende por todas partes, no solo en Guatemala¡±, ha denunciado Rebecca Vincent, la directora de campa?as internacionales de Reporteros Sin Fronteras, que ha acompa?ado en Londres al hijo del editor.
La Fiscal¨ªa de Guatemala acus¨® a Zamora de blanqueamiento, obstrucci¨®n a la justicia y tr¨¢fico de influencias. Una construcci¨®n procesal, que el propio presidente Ar¨¦valo junto a varios organismos internacionales ha calificado de ¡°espuria¡±, realizada por la Fiscal¨ªa a partir de la venta de un cuadro del artista y amigo personal Elmar Rojas, que el periodista realiz¨® para seguir financiando el peri¨®dico. Por 38.000 d¨®lares (35.000 euros al cambio actual).
¡°El caso de Zamora refleja una tendencia actual por la que se usa la ley para sugerir que un periodista no es de fiar. Intentan sugerir que se trata de una persona corrupta, o defraudadora. Han intentado acusar a Jos¨¦ Rub¨¦n de alg¨²n tipo de corrupci¨®n o de fraude, lo cual es absolutamente falso. Es una t¨¢ctica que busca provocar cierto malestar en gobiernos u organizaciones humanitarias, inc¨®modas ante la posible existencia de delitos fiscales o de corrupci¨®n, y lograr as¨ª que miren hacia otro lado¡±, explica a EL PA?S Caoilfhionn Gallagher, la abogada de Doughty Street Chambers que lidera la asesor¨ªa jur¨ªdica internacional de Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora.
Un posible acuerdo amistoso
El hijo del periodista no quiere arrojar del todo la toalla frente a la justicia guatemalteca, pero sospecha que todav¨ªa est¨¢ en manos de una ¡°c¨¦lula criminal¡± que protege a los corruptos y se protege a s¨ª misma, y que va a seguir maniobrando para retrasar el proceso judicial de Zamora. Sabe que el presidente Ar¨¦valo est¨¢ a disgusto con la situaci¨®n, pero cree que su empe?o por no interferir en la justicia y mantener la apariencia de un Estado de derecho en Guatemala acaba suponiendo un freno en la posible soluci¨®n del caso.
¡°Creo que el presidente Ar¨¦valo es genuinamente decente. Creo que est¨¢ intentando hacer lo correcto y hacerlo conforme a la ley. Donde podr¨ªa hacer m¨¢s es a la hora de terminar con la c¨¦lula criminal, que est¨¢ enquistada en el ministerio p¨²blico y en un grupo de jueces¡±, dice el hijo. ¡°Mientras se trate a esa gente como poder judicial, el pa¨ªs tendr¨¢ las manos atadas e incluso habr¨¢ m¨¢s persecuci¨®n pol¨ªtica¡±.
Jos¨¦ Carlos Zamora busca un acuerdo amistoso con el presidente Ar¨¦valo que ponga fin al calvario y la telara?a judicial que mantiene atrapado a su padre. ¡°Hemos documentado durante a?os el caso ante la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos, y va a ir a la Corte Interamericana. Ser¨ªa una demanda contra el Estado de Guatemala, que llevar¨ªa responsabilidades para todos los implicados, as¨ª como una posible indemnizaci¨®n. Seguro que el Estado no desea llegar hasta el final, que podr¨ªa tener un resultado terrible. Por eso existe la posibilidad de un acuerdo antes de que termine el proceso¡±, se?ala el hijo del editor arrestado.
El 28 de agosto, seis expertos independientes de Naciones Unidas emitieron una declaraci¨®n urgente, dirigida al Gobierno guatemalteco, en la que exigieron una respuesta urgente ante las supuestas condiciones inhumanas de arresto de Zamora. Pusieron adem¨¢s sobre la mesa su seria preocupaci¨®n ante el hecho de que hubiera sido sometido a torturas, y dejaron claras sus sospechas de que el procesamiento del periodista estaba vinculado a sus trabajos de investigaci¨®n. ¡°T¨¢cticas as¨ª provocan un efecto atemorizante en los periodistas del pa¨ªs¡±, conclu¨ªan.