La justicia argentina ordena la detenci¨®n de 61 bolsonaristas reclamados por Brasil por el intento de golpe contra Lula
Los fugados tienen condenas firmes en su pa¨ªs y han pedido asilo pol¨ªtico ante el Gobierno del ultraderechista Milei
La justicia argentina ha pedido este viernes a Interpol la detenci¨®n de 61 bolsonaristas pr¨®fugos de la justicia brasile?a. Todos ellos est¨¢n condenados o procesados por el asalto golpista a las sedes de la Presidencia, el Congreso y el Tribunal Supremo el 8 de enero de 2023, en el inicio del Gobierno de Luiz In¨¢cio Lula da Silva. Fuentes judiciales confirmaron a EL PA?S que ¡°los operativos se est¨¢n produciendo en estos momentos y se completar¨¢n durante los pr¨®ximos d¨ªas. Muchos tienen condenas en su pa¨ªs de hasta 17 a?os de c¨¢rcel¡±. Ya hay dos detenidos. Los arrestos se producen en v¨ªsperas del primer cara a cara entre Lula y el presidente de Argentina, Javier Milei, durante la cumbre del G-20 que se celebrar¨¢ entre el lunes y martes pr¨®ximo en R¨ªo de Janeiro.
Hace un mes, el Tribunal Supremo de Brasil pidi¨® a Argentina la extradici¨®n de los pr¨®fugos. Las ¨®rdenes de detenci¨®n, primer paso de un proceso que ser¨¢ largo, fueron emitidas por el juez federal Daniel Rafecas, que recibi¨® el expediente desde la Canciller¨ªa argentina.
El perfil de los bolsonaristas que huyeron hacia Argentina es variado: hombres y mujeres j¨®venes y de mediana edad, estudiantes, agentes inmobiliarios, administrativos, amas de casa y hasta un pastor evang¨¦lico. Rompieron las tobilleras electr¨®nicas de su prisi¨®n domiciliaria y escaparon con lo puesto. Apenas cruzaron la frontera desde Brasil pidieron ante la Comisi¨®n Nacional de Refugiados en Buenos Aires que se los considerase asilados pol¨ªticos.
Entrevistados por EL PA?S semanas atr¨¢s, todos ellos coincidieron en que hab¨ªan elegido Argentina por cercan¨ªa, pero tambi¨¦n porque ¡°se sent¨ªan seguros¡± con el ultraderechista Milei en la Casa Rosada. Se consideran inocentes, v¨ªctimas de una persecuci¨®n pol¨ªtica y de las circunstancias. El 8 de enero del a?o pasado, dicen, fueron arrastrados por la marea que sali¨® a las calles en Brasilia, convencidos todos de que Lula le hab¨ªa robado las elecciones a su l¨ªder, Jair Bolsonaro. La justicia brasile?a no pens¨® lo mismo y ya conden¨® a m¨¢s de 200 personas por el intento de golpe.
Brasil y Argentina, socios en el bloque Mercosur, tienen suscrito en ese marco un acuerdo de extradici¨®n por el que ¡°se obligan a entregarse rec¨ªprocamente (¡) a las personas que se encuentren en sus respectivos territorios y sean requeridas por las autoridades competentes de otro Estado parte, para ser procesadas por la presunta comisi¨®n de alg¨²n delito, para que respondan a un proceso en curso o para la ejecuci¨®n de una pena privativa de libertad¡±. De todos modos, eso solo ocurrir¨ªa siempre y cuando el Gobierno de Milei rechace las peticiones de asilo presentadas por los bolsonaristas. Los pr¨®fugos deber¨¢n ahora esperar el avance del tr¨¢mite en prisi¨®n. Hasta ahora viv¨ªan en casas alquiladas en distintas ciudades de Argentina, como Buenos Aires o capitales de provincia.
El mi¨¦rcoles, la polic¨ªa bonaerense detuvo a Joelton Gusm?o de Oliveira en un control de rutina en la ciudad de La Plata, 60 kil¨®metros al sur de Buenos Aires. Cuando las autoridades averiguaron sus antecedentes, encontraron que enfrentaba una condena ¡°a 17 a?os de detenci¨®n en Brasil por cr¨ªmenes contra la democracia¡±. Ahora se sumar¨¢n a Gusm?o de Oliveira otros 60 pr¨®fugos.
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