¡®Queridos miembros de la Junta¡¯, de Julie Schumacher: esta universidad es una ruina (y los profesores no digamos)
La novela ganadora del premio Thuber de Humor es una divertida s¨¢tira sobre la burocracia y el mundo acad¨¦mico. Trata sobre el fracaso, la traici¨®n y las expectiativas con un profesor como protagonista dedicado a escribir cartas de recomendaci¨®n
Queridos miembros de la Junta, que obtuvo el Premio Thurber de Humor Americano, est¨¢ construida a partir de la combinaci¨®n de dos modelos. Por un lado, la novela de campus, y en concreto ejemplos como Lucky Jim de Kingsley Amis, Intercambios del recientemente desaparecido David Lodge o Pnin de Vladimir Nabokov. Por otro lado, la forma epistolar, un dif¨ªcil desaf¨ªo t¨¦cnico que Julie Schumacher ¡ªprofesora en la Universidad de Minnesota y autora de varios libros para adultos y j¨®venes¡ª supera con brillantez.
Jason Fitger, el protagonista de ...
Queridos miembros de la Junta, que obtuvo el Premio Thurber de Humor Americano, est¨¢ construida a partir de la combinaci¨®n de dos modelos. Por un lado, la novela de campus, y en concreto ejemplos como Lucky Jim de Kingsley Amis, Intercambios del recientemente desaparecido David Lodge o Pnin de Vladimir Nabokov. Por otro lado, la forma epistolar, un dif¨ªcil desaf¨ªo t¨¦cnico que Julie Schumacher ¡ªprofesora en la Universidad de Minnesota y autora de varios libros para adultos y j¨®venes¡ª supera con brillantez.
Jason Fitger, el protagonista de Queridos miembros de la Junta (y de dos novelas posteriores, The Shakespeare Requirement y The English Experience), es un profesor de escritura creativa y literatura de mediana edad en una universidad de segunda fila. Tuvo una carrera literaria inicialmente prometedora que se estanc¨®. Est¨¢ divorciado, en parte por haber aireado asuntos privados en sus novelas. No parece investigar ni escribir mucho y dedica su tiempo a escribir cartas de recomendaci¨®n para alumnos y compa?eros: es autor de 1300, confiesa en un momento del relato, que cubre un a?o de su vida.
Mientras, el departamento de filolog¨ªa vive continuos recortes y situaciones humillantes: el despacho de Fitger est¨¢ junto al ba?o y se llena de malos olores, se caen trozos del techo, se suprimen plazas; otros departamentos disfrutan de lujosas remodelaciones. Fitger es un personaje irritante y apasionado, que despierta antipat¨ªa en compa?eros y superiores y tiene un talento formidable para meter la pata. Trata tenazmente de ayudar a un alumno (cuyo proyecto es una reescritura de Bartleby ambientada en un burdel) y lucha contra la burocracia, la estupidez de la jerarqu¨ªa administrativa y acad¨¦mica, y con tecnolog¨ªas cuya principal funci¨®n es complicar las cosas. Responde a peticiones absurdas: recomendaciones que le piden j¨®venes que solo ha visto diez minutos o una alumna plagiaria, referencias para empresas de pintura o de pesca.
Sus alumnos escriben pastiches gore; una alumna triunfa a lo grande para desconcierto del profesor. Muchas de las cartas de Fitger son contraproducentes porque cuentan con elementos superfluos o (auto)destructivos: ¡°espero que no la confinen a una oficina sin ventanas poblada ¨ªntegramente por clones sin contacto con la sociedad¡±, escribe a una empresa; sobre un alumno, explica ¡°no puedo hacer comentario alguno sobre la parte de su carrera acad¨¦mica relacionada con la educaci¨®n f¨ªsica (?qu¨¦ se supone que estudian, bal¨®n prisionero?)¡±. Despotrica de la situaci¨®n del departamento en cartas sobre otro tema, de una trabajadora de la universidad cuenta que fue su amante para evitar que se vaya a un centro que a su juicio no la merece. Las misivas son cada vez son m¨¢s disparatadas, pero tambi¨¦n construyen una capa m¨¢s melanc¨®lica y un personaje m¨¢s quijotesco. Schumacher emplea con destreza y sentido del ritmo la parodia y la observaci¨®n, utiliza los t¨®picos y sostiene la novela en la voz de Fitges: vers¨¢til y personal, err¨¢tica y precisa, en¨¦rgica y desesperanzada.
El libro es una s¨¢tira muy divertida de la burocracia y la academia, una reflexi¨®n sobre el fracaso, la traici¨®n y las expectativas, y una defensa de las humanidades sin la cursiler¨ªa habitual, porque ya se?alaba Albert Camus que la mejor manera de hablar de lo que se ama es hablar a la ligera.
Queridos miembros de la Junta
Traducci¨®n de Alberto Moyano
Piel de Zapa, 2025
206 p¨¢ginas
21,84 euros