El tr¨¢fico dispara la contaminaci¨®n en Valencia y amenaza la salud
Los registros superan los "niveles aceptables", seg¨²n Medio Ambiente En la etapa de Barber¨¢ se movieron a puntos de baja poluci¨®n las estaciones medidoras
Valencia, especialmente en el centro, presenta concentraciones de contaminaci¨®n en el aire que superan la normativa y "los niveles aceptables para la protecci¨®n de la salud", seg¨²n los datos de la Consejer¨ªa de Agricultura y Medio Ambiente. El principal causante es el tr¨¢fico de veh¨ªculos. La contaminaci¨®n atmosf¨¦rica est¨¢ relacionada con enfermedades respiratorias, cardiacas y con un aumento del riesgo de contraer c¨¢ncer, se?alan los expertos.
El Ayuntamiento quiere disminuir progresivamente el paso de autom¨®viles por el centro. Uno de los objetivos de la medida es reducir la concentraci¨®n de gases nocivos para la salud.
Durante la etapa de la anterior alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, se alejaron del centro y de lugares que soportan un alto nivel de tr¨¢fico las estaciones medidoras de contaminaci¨®n fijas (hay ocho en total). Y se instalaron en puntos cercanos a zonas verdes, en general abiertos y en los que vive poca gente, como el parque de Cabecera o las inmediaciones del cementerio general.
Los niveles que recogen las estaciones "pueden ser sensiblemente diferentes dependiendo de la ubicaci¨®n de la medici¨®n" y "se ver¨¢n afectados por emisiones de tr¨¢fico, residenciales o industriales cercanos", indica Ferran Ballester, coordinador del ¨¢rea de investigaci¨®n en Ambiente y Salud del centro Fisabio-Salud P¨²blica de la Generalitat valenciana.
La mayor advertencia sobre la superaci¨®n de los niveles aceptables de di¨®xido de nitr¨®geno no la han dado las estaciones medidoras, situadas en la periferia, sino los cuatro estudios realizados desde 2011 con "dos¨ªmetros pasivos" (peque?os contenedores que se instalan en diferentes puntos de la ciudad) por la Consejer¨ªa de Medio Ambiente y el Centro de Estudios Ambientales del Mediterr¨¢neo.
El traslado de las estaciones medidoras fijas los alej¨® de los lugares m¨¢s habitados y transitados por la poblaci¨®n. Y ha complicado el conocimiento sobre el impacto de la contaminaci¨®n en la salud. "Al desplazar la ubicaci¨®n de un captador se ha perdido la posibilidad de conocer la evaluaci¨®n a medio y largo plazo de la calidad del aire en la ciudad ya que la red en la actualidad no es la misma que hace cinco o 10 a?os", afirma Ballester. "La no disponibilidad de series temporales estables de los niveles de contaminaci¨®n del aire ha dificultado" adem¨¢s, a?ade el investigador, la elaboraci¨®n de "estudios epidemiol¨®gicos sobre el impacto de la contaminaci¨®n en la salud de la poblaci¨®n".
Los nuevos responsables del Ayuntamiento y la Consejer¨ªa de Agricultura y Medio Ambiente quieren mejorar el sistema de medici¨®n. La concejal de Calidad Ambiental, Pilar Soriano, considera que la distribuci¨®n actual de la red de estaciones medidoras genera un "efecto m¨¢scara". Y que el aire que respiran los habitantes de la ciudad es en realidad peor. "Nos gustar¨ªa saber cu¨¢l es el nivel de contaminaci¨®n en lugares como la ronda Tr¨¢nsitos o la Gran V¨ªa", afirma. Cuando se disponga de mejores datos Soriano afirma que el Ayuntamiento actuar¨¢ especialmente en zonas "sensibles", como los entornos de escuelas, parques infantiles y hospitales.
Mover de nuevo las estaciones fijas parece de momento descartado porque volver¨ªa a cortar la continuidad de la informaci¨®n. La normativa europea establece que los medidores deben ubicarse en zonas de tr¨¢fico, de "fondo" (un nivel intermedio) y zonas verdes. Y desde ese punto de vista la distribuci¨®n actual respeta la ley. Tanto el Ayuntamiento como la Generalitat se inclinan por aumentar las fuentes de informaci¨®n.
"Lo m¨¢s operativo ser¨ªa complementar lo que ya se tiene pero sin cambiar ninguna de las estaciones presentes", indica el secretario auton¨®mico de Medio Ambiente, Juli¨¤ ?lvaro. Los t¨¦cnicos recomiendan, adem¨¢s, realizar una campa?a de dos¨ªmetros "en cada estaci¨®n del a?o". Juli¨¤ afirma que la intenci¨®n del departamento es acercarse a esa frecuencia, que supondr¨ªa hacer m¨¢s controles en un a?o que los realizados en el ¨²ltimo lustro. "As¨ª dispondremos de diagn¨®sticos con mayor detalle que faciliten la adopci¨®n de planes y medidas para rebajar los niveles de emisi¨®n de gases a niveles aceptables para la salud de la poblaci¨®n", agrega Juli¨¤.
Una de las medidas decididas por el Ayuntamiento es reducir gradualmente el tr¨¢fico en el centro hasta permitir solo la circulaci¨®n de vecinos y veh¨ªculos autorizados, como el transporte p¨²blico. Buena parte de los desplazamientos por el centro son ahora de paso, indica el concejal de Movilidad Giuseppe Grezzi. Con el actual dise?o urbano, un coche puede acceder por casi todo el per¨ªmetro de la antigua muralla de la ciudad y salir por cualquier otro punto del casco hist¨®rico.
Un informe realizado por un grupo de arquitectos en el entorno de la Lonja revel¨® que el 70% de los veh¨ªculos pasaban por all¨ª de forma "oportunista", dice Grezzi, "cruzaban el centro para ir a otro lugar". M¨¢s all¨¢ del centro, el plan del Ayuntamiento es potenciar formas alternativas al veh¨ªculo privado en el conjunto de Valencia para limitar los niveles de contaminaci¨®n atmosf¨¦rica y ac¨²stica.
Ballester cree, adem¨¢s, que en el control de la contaminaci¨®n deber¨ªa intervenir Salud P¨²blica siguiendo "el d¨ªa a d¨ªa de la calidad del aire en nuestras ciudades y las posibles implicaciones para la salud". Los esfuerzos hasta ahora se han centrado en mantenerse en los par¨¢metros que marcan las directivas europeas. Pero el investigador se?ala que Bruselas es m¨¢s laxa que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Respecto a las part¨ªculas en suspensi¨®n PM10 y PM2,5 que emiten especialmente los veh¨ªculos di¨¦sel, la UE permite que las ciudades alcancen niveles que doblan las recomendaciones de la OMS.
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