El ¡®caso Desir¨¦e¡¯ deja al borde de la ruina a la cl¨ªnica y al m¨¦dico que la atendieron
El centro El Castro hizo frente a tres millones de fianza civil y al acusado le han embargado su casa y el sueldo por la amputaci¨®n de una pierna a la joven acr¨®bata de Vigo
La cl¨ªnica El Castro de Vigo, que atendi¨® a la gimnasta de ¨¦lite Desir¨¦e Vila, de 18 a?os, tras sufrir una lesi¨®n en 2015 que devino en la amputaci¨®n de una pierna por una supuesta mala praxis m¨¦dica, se encuentra en preconcurso de acreedores y tiene de plazo hasta marzo para negociar sus deudas.
El abogado del traumat¨®logo del centro, Pedro Larrauri, ¨²nico acusado por una supuesta negligencia m¨¦dica, ha denunciado que a consecuencia de ¡°una fianza desproporcionada¡±, tanto la cl¨ªnica como su cliente atraviesan una situaci¨®n econ¨®mica muy cr¨ªtica al haberle embargado el juzgado el sueldo y su casa con car¨¢cter preventivo a la espera del fallo del tribunal.
El letrado Manuel Carpintero ha lamentado en un comunicado que ¡°adem¨¢s del desprestigio profesional del traumat¨®logo y el descr¨¦dito del centro m¨¦dico, una fianza desproporcionada los sit¨²en al borde de la ruina total¡±, mientras ha denunciado la ¡°indefensi¨®n¡± de Larrauri al rechazar el tribunal varias pruebas y testimonios fundamentales para su defensa.
Una de las claves del caso, seg¨²n apunta el letrado, est¨¢ en el hecho de que el acusado cambiase de abogado dos meses antes del juicio. ?l intent¨® sin ¨¦xito suspenderlo para presentar nuevas pruebas documentales y periciales, por lo que, sostiene, podr¨ªa derivar en una posible nulidad del proceso penal para acabar en la v¨ªa civil.
El centro m¨¦dico aleg¨® ante el juzgado mercantil de Pontevedra que se encuentra al borde de la quiebra por hacer frente a la fianza de casi tres millones de euros que ha tenido que depositar como responsable civil subsidiaria en el caso, en previsi¨®n de lo que decida el tribunal que presidi¨® el juicio celebrado la pasada semana y que ha quedado visto para sentencia.
La Fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular solicitaron el pago de una indemnizaci¨®n a la gimnasta de 2,8 millones de euros, de la que tendr¨¢ que responder el centro m¨¦dico y el traumat¨®logo que diagnostic¨® a Desir¨¦e Vila a trav¨¦s de sus respectivas compa?¨ªas aseguradoras.
Manuel Carpintero tambi¨¦n ha reprochado que toda la investigaci¨®n del caso se haya centrado en la cl¨ªnica El Castro y la instrucci¨®n ¡°se haya olvidado del gimnasio Flic Flac que ha dejado entrenar sola a una menor ejecutando saltos mortales sobre la tela el¨¢stica sin supervisi¨®n de entrenadores y monitores". Seg¨²n el letrado, ¡°tambi¨¦n se ha obviado un estudio sobre la Cl¨ªnica Povisa, dando por buenas, y sin contradicci¨®n, lo manifestado por el cirujano vascular¡±, respecto al bypass que practic¨® a la gimnasta, lo cual, en su opini¨®n, ¡°ha convertido al m¨¦dico Pedro Larrauri en su chivo expiatorio¡±.
Para la defensa , el fondo de todo el proceso est¨¢ en determinar en qu¨¦ momento se produce la isquemia o falta de circulaci¨®n sangu¨ªnea en la pierna de Desir¨¦e; si fue antes (en la cl¨ªnica El Castro) o despu¨¦s de ingresar en Povisa, donde fue intervenida y se le amput¨® la pierna.
Manuel Carpintero afirma que en informes y partes m¨¦dicos se indica que ¡°el inicio del proceso isqu¨¦mico se produce tras la operaci¨®n de bypass¡±, porque no pudo aceditarse que fuera debido a un error de diagn¨®stico del doctor Larrauri ni del tratamiento que recbi¨® la joven tras la lesi¨®n, como se expuso en el juicio.
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