El 28-A impulsa a Maragall y Collboni en la batalla por Barcelona

Cuando falta menos de un mes para las elecciones municipales, ERC gan¨® este domingo las generales en Catalu?a y el PSC obtuvo el segundo puesto. En la ciudad de Barcelona los dos partidos empataron (el PSC obtuvo solo 2.000 votos menos) y ganaron cada uno en cinco de los diez distritos de la ciudad. Los buenos resultados de republicanos y socialistas impulsan sus expectativas electorales en vistas a la batalla por la capital catalana, mientras el batacazo de En Com¨² Podem (que en porcentaje de votos cay¨® m¨¢s de nueve puntos respecto a las generales de 2016) empeora las de la alcaldesa, Ada Colau.

ERC es el principal rival de Barcelona en com¨² en las municipales del pr¨®ximo 26 de mayo, seg¨²n las encuestas. Mientras el diputado al Congreso Gabriel Rufi¨¢n aseguraba que la ciudad ser¨ªa la siguiente victoria del partido, el candidato a la alcald¨ªa de los republicanos, Ernest Maragall, intent¨® durante la noche electoral contener la euforia de su equipo de colaboradores m¨¢s pr¨®ximos. Pero victorias en distritos de rentas altas donde tradicionalmente no gana ni la izquierda el independentismo, como Les Corts o Sarri¨¤-Sant Gervasi, invitaban al optimismo. Alegr¨ªa y prudencia son, pues, las palabras que m¨¢s repiten fuentes del partido. "Hay que ver bien los datos, de d¨®nde salen los votos y hacia d¨®nde pueden ir en clave municipal", aseguran fuentes de un partido que interpret¨® err¨®neamente la victoria de ERC en la ciudad en las ¨²ltimas elecciones europeas.

Tambi¨¦n al PSC volvi¨® anoche la alegr¨ªa. En Barcelona, si se mira la ciudad y se parte en dos en vertical, los socialistas ganaron en todo el lado Bes¨°s: Horta Guinard¨®, Ciutat Vella, Sant Mart¨ª, Nou Barris y Sant Andreu. El PSC dobl¨® los resultados, rozando los 200.000 votos. "Ya sab¨¦is, Jaume Collboni alcalde de Barcelona", afirm¨® la Ministra y candidata al Congreso, Meritxell Batet sobre las expectativas del alcaldable de los socialistas.

"Ahora tenemos que apuntalar el resultado de ayer para avanzar y lograr que esa complicidad que hist¨®ricamente se ha trazado entre un gobierno socialista y el poder municipal pueda volver a repetirse¡±, ha afirmado este lunes Meritxell Batet en una comparecencia para valorar los resultados de las elecciones generales. La cabeza de lista estaba acompa?ada de un sonriente Jaume Collboni, el alcaldable socialista por Barcelona: ¡°Solo a 27 d¨ªas de las municipales se impone una reflexi¨®n de c¨®mo se afronta este tiempo. El mapa ha cambiado en positivo para el PSC y se nos abre posibilidades en el ¨¢rea de Barcelona y en la capital que hace meses no las ten¨ªamos¡±, ha dicho.

Aupados por esa recuperaci¨®n de voto en una ciudad que fue gobernada por el PSC durante m¨¢s de 30 a?os, los socialistas se ven con fuerza frente a la opci¨®n que representa ERC con Ernest Maragall. El PSC contrapone la idea de que lo primero es el inter¨¦s de la ciudad frente a una subordinaci¨®n al servicio del proc¨¦s: ¡°La ciudad no es un trofeo para poner en las vitrinas independentistas porque no tiene que estar al servicio del proc¨¦s. Colau ya opt¨® por subordinar la ciudad cuando rompi¨® el gobierno con el PSC, ya est¨¢ claro que su opci¨®n es tambi¨¦n la independestista¡±, ha asegurado Collboni.

En el cuartel general de los comunes, durante la noche el electoral el c¨®ctel de emociones fue notable. Esperaban una debacle de un calibre que no se produjo: con encuestas que auguraban una ca¨ªda hasta de ocho diputados, solamente perdieron cinco. Y aunque la ca¨ªda de apoyo alcanz¨® los 240.000 votos, la posibilidad de formar parte de un acuerdo de gobierno de Pedro S¨¢nchez con Podemos fue la alegr¨ªa de la noche. Poniendo la lupa, el resultado en Barcelona ha sido malo: un porcentaje de voto que ha ca¨ªdo del 25,7% al 16,3%, 53.000 votos menos y tercera fuerza en la mayor¨ªa de los distritos. Los comunes subrayan que los barceloneses votan en clave distinta en las generales y las municipales. Y es verdad. Pero esta vez la proximidad entre unas elecciones y otras es de solo 27 d¨ªas.

El candidato Jaume Asens ha asegurado este lunes que la p¨¦rdida de votos se debe a que las generales han sido una convocatoria en la que el electorado ha votado "en clave emotiva, por la presencia de los l¨ªderes del proc¨¦s en la c¨¢rcel y de voto ¨²til hacia el PSC" para frenar a la derecha.El tambi¨¦n teniente de lcalde en el Ayuntamiento ha asegurado que la victoria de ERC y PSC no tiene por qu¨¦ trasladarse a las municipales: "Son l¨®gicas muy distintas, la gente votar¨¢ en clave municipal, por las cosas que le afectan en su vida cotidiana, en funci¨®n de lo que est¨¢ en juego, la gente no es idiota y sabe leer la realidad", ha mantenido. Y ha advertido de que si los socialistas han ganado las elecciones ha sido "gracias al voto de generosidad" de Podemos y los comunes. "Pod¨ªa tener un precio electoral, pero hab¨ªa que echar al partido m¨¢s corrupto de Europa [en referencia al PP".

Mientras, Ciudadanos observa sin grandes alegr¨ªas los resultados en Barcelona. Obtuvo el 11% del sufragio ¨C101.892 votos¨C, igual que consigui¨® en las generales de 2016, pero la alarma se dispara si se realiza la comparaci¨®n con las elecciones catalanas de 2017: en aquellos comicios, el partido naranja obtuvo el apoyo del 23,9% de los electores de Barcelona ¨C218.746 votos¨C y fue la fuerza m¨¢s votada de la ciudad; en estas generales, Cs ha pasado a ser la cuarta fuerza m¨¢s votada de la capital catalana. Su candidato, Manuel Valls, ha emitido este lunes un comunicado en el que asegura que Cs "deben tener un papel fundamental desde un centro reformista que priorice el inter¨¦s general de Espa?a". El ex primer ministro franc¨¦s, que lidera una plataforma con otras fuerzas como Lliures y UPyD, ha reiterado p¨²blicamente su oposici¨®n a que Cs renuncie a acuerdos de Gobierno con el PSOE, una posici¨®n que le ha distanciado de la c¨²pula del partido naranja. "Todos hemos de contribuir a evitar que el Gobierno de Espa?a dependa de los nacionalistas y de los populistas", ha escrito hoy Valls, refiri¨¦ndose a la necesidad, en su opin¨®n, de que Pedro S¨¢nchez no necesite del independentismo y de Podemos para gobernar.