Sin importar la opci¨®n, los votantes del plebiscito por una nueva Constituci¨®n en Chile creen que van a ganar

Con la pandemia en retirada y la primavera a la vuelta de la esquina, millones de chilenos han salido este domingo a votar en el plebiscito constitucional. En distintos puntos de Chile se han registrado kilom¨¦tricas filas que avanzan a un ritmo ¨¢gil. A diferencia de elecciones con papeletas m¨¢s complejas, como las de diputados o alcaldes, aqu¨ª solo existen dos alternativas: apruebo o rechazo. Des...

Con la pandemia en retirada y la primavera a la vuelta de la esquina, millones de chilenos han salido este domingo a votar en el plebiscito constitucional. En distintos puntos de Chile se han registrado kilom¨¦tricas filas que avanzan a un ritmo ¨¢gil. A diferencia de elecciones con papeletas m¨¢s complejas, como las de diputados o alcaldes, aqu¨ª solo existen dos alternativas: apruebo o rechazo. Desde ancianos en sillas de ruedas hasta j¨®venes que debutan como sufragistas han protagonizado las im¨¢genes de la primera mitad de la jornada electoral. Uno de los aspectos m¨¢s llamativos es que, hombres y mujeres, independiente de su nivel socio econ¨®mico y de su tendencia pol¨ªtica, tienen algo en com¨²n: el convencimiento de que su opci¨®n ser¨¢ la ganadora.

Los que van por el rechazo est¨¢n confiados en las encuestas, que desde hace dos semanas dejaron de publicar resultados, ya que la ley lo proh¨ªbe. Sin embargo, durante meses los sondeos dieron un holgado triunfo a la opci¨®n de desechar la propuesta constitucional, con una ventaja de entre ocho y 11 puntos. ¡°Estoy feliz, de buen ¨¢nimo. A diferencia del primer plebiscito [de 2020, cuando el 80% vot¨® a favor de redactar una nueva Constituci¨®n], creo que esta vez mi opci¨®n s¨ª va a ganar¡±, comenta Mar¨ªa Cecilia, de 76 a?os, en el centro de votaci¨®n de Campus Oriente de la Universidad Cat¨®lica, en el municipio de Providencia, el quinto m¨¢s rico de Chile.

Como varios que comparten su opci¨®n, Mar¨ªa Cecilia apoya una nueva Carta Fundamental, pero no la escrita por la convenci¨®n. La ingeniera Ana Mar¨ªa Alarc¨®n, de 56, asegura que lo ideal es que un equipo de expertos y legisladores sean los que redacten un nuevo texto. ¡°Uno que una a la sociedad¡±, donde la gente tenga ¡°m¨¢s libertad¡± y no ¡°tanto derechos¡±. Votante del apruebo en el refer¨¦ndum de entrada, Alarc¨®n lamenta que ¡°desde que comenz¨® el proceso se fue polarizando y no prim¨® el bien com¨²n¡±.

La misma seguridad y optimismo de las mujeres, las comparte Mario Espinoza, de 30 a?os, un joven que particip¨® intensamente en las revueltas de 2019 y que marc¨® apruebo. ¡°Estoy muy esperanzado. Hoy el resultado deber¨ªa ir contra todo pron¨®stico y ganar el apruebo. Tenemos una concentraci¨®n de medios que dificulta conocer ese resultado, pero as¨ª ser¨¢, los multitudinarios eventos en la calle dan cuenta de ello¡±, sostiene el consultor en el Instituto Superior Frei Montalva, ubicado en el centro de Santiago. ¡°El proceso, que siempre estuvo en el barro, me pareci¨® virtuoso porque abri¨® las puertas a discusiones que antes no ten¨ªan espacio: derechos, salud, educaci¨®n¡±, agrega, tras hacer una fila que se extend¨ªa por dos calles.

Los expertos electorales calculan que con un 30% del escrutinio se podr¨ªa marcar tendencia, siempre que la diferencia sea amplia. Si es muy estrecho el margen entre ambas opciones, recomiendan esperar hasta contar con, al menos, la mitad de los votos.

Si bien ha primado la esperanza entre los votantes, ha habido quienes marcaron la papeleta con los ojos cerrados. Ana Bel¨¦n Soto, de 19 a?os, sali¨® de la urna ¡°s¨²per abrumada¡±. Quer¨ªa votar por el apruebo, pero finalmente se decant¨® por el rechazo dando prioridad al ¡°bien com¨²n¡±. Camila, psic¨®loga de 37 a?os que, hasta el ¨²ltimo minuto no ten¨ªa decidido qu¨¦ hacer, pero ¡°lamentablemente¡± se decant¨® por el rechazo. Seg¨²n las encuestas, la ventaja del rechazo es mayor entre quienes no votaron en los procesos anteriores: 2 a 1.

Las extensas filas desde primera hora de la ma?ana dan algunas pistas de una participaci¨®n r¨¦cord. Por primera vez en la historia de Chile, se ha utilizado un sistema de inscripci¨®n autom¨¢tica y voto obligatorio en un padr¨®n electoral de 15,1 millones. Algo in¨¦dito de la jornada tambi¨¦n ha sido el voto de presos con condenas menores a tres a?os. Estaba previsto que unos 900 imputados participaran de las elecciones.

A pesar del evidente entusiasmo, tambi¨¦n se vieron decenas de personas esperando excusarse afuera de distintos Juzgados de Polic¨ªa Local a lo largo del pa¨ªs. Los expertos calculaban que cerca de un mill¨®n de ciudadanos no asistir¨¢n a sufragar por los motivos que permite el Servicio Electoral (Servel): licencia m¨¦dica, encontrarse fuera o a m¨¢s de 200 kil¨®metros del lugar de votaci¨®n u otro impedimento grave. Los que no se excusaron deber¨¢n pagar una multa de hasta 190 d¨®lares.

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