La vocaci車n oce芍nica de Chile y la protecci車n de altamar
El puerto hist車rico de Valpara赤so ha sido propuesto como sede del Acuerdo Biodiversity Beyond National Jurisdiction (BBNJ). Lograrlo ser芍 especialmente beneficioso para nuestras universidades y centros de investigaci車n, instituciones y para toda la comunidad nacional
El mar no se aprende sin verlo, dec赤a Gabriela Mistral. Y pocos pueblos tienen tantas oportunidades de ver el mar como el chileno; la l赤nea de costa tiene 6.450 kil車metros y el territorio alcanza una anchura promedio de s車lo 180 kil車metros. El mar es, pues, parte de la identidad de Chile, un paisaje que nos identifica y que se ha anclado profundamente en nuestra cultura.
Desde luego, el mar es mucho m芍s que un paisaje. Chile, aislado por el desierto y la cordillera, tuvo una temprana vocaci車n mar赤tima, y el fuerte desarrollo del libre comercio en las d谷cadas reci谷n pasadas se tradujo ta...
El mar no se aprende sin verlo, dec赤a Gabriela Mistral. Y pocos pueblos tienen tantas oportunidades de ver el mar como el chileno; la l赤nea de costa tiene 6.450 kil車metros y el territorio alcanza una anchura promedio de s車lo 180 kil車metros. El mar es, pues, parte de la identidad de Chile, un paisaje que nos identifica y que se ha anclado profundamente en nuestra cultura.
Desde luego, el mar es mucho m芍s que un paisaje. Chile, aislado por el desierto y la cordillera, tuvo una temprana vocaci車n mar赤tima, y el fuerte desarrollo del libre comercio en las d谷cadas reci谷n pasadas se tradujo tambi谷n en un sistema portuario de enorme importancia. San Antonio es el puerto m芍s importante de nuestro pa赤s, con una ubicaci車n estrat谷gica respecto de los mercados de Asia y de Ocean赤a, con 車ptimas v赤as de conexi車n y condiciones topogr芍ficas para su operaci車n, adem芍s de extensas zonas aleda?as que permitir芍n su ampliaci車n. Otros puertos importantes son Valpara赤so, con un gran patrimonio cultural, y los de la zona norte, que vinculan una extensa macrozona regional con el comercio ultramarino.
El mar es tambi谷n una fuente de recursos muy relevantes para el consumo interno y para la exportaci車n a los mercados mundiales. Si nos situamos en el plano global, el oc谷ano brinda alimentaci車n a 3.000 millones de personas. Esos recursos, tanto los del mar territorial como los de altamar, est芍n en riesgo. Si bien tenemos regulaciones dom谷sticas y la Convenci車n del Mar ha dispuesto normas generales para la pesca en altamar, es preciso avanzar m芍s en el cuidado y la conservaci車n de las especies que han sido tan 迆tiles y necesarias para la humanidad.
Pero no es el 迆nico desaf赤o. La contaminaci車n de las aguas marinas se ha convertido en un problema de primer orden. El vertimiento de residuos t車xicos y de basura, especialmente de pl芍sticos, est芍 alterando los ecosistemas y as赤 afectan a todos los seres vivos. La p谷rdida de ox赤geno, la acidificaci車n de las aguas, el aumento de la temperatura y la elevaci車n del nivel del mar son procesos que est芍n ocurriendo y que, de no detenerlos, causar芍n da?os irreversibles que afectar芍n a toda la bi車sfera y, por cierto, al modo en que los seres humanos nos relacionamos con nuestro planeta.
Una v赤a r芍pida y eficiente para enfrentar estos desaf赤os es el establecimiento de vastas zonas protegidas en el oc谷ano. Quiero destacar que Chile, en una acci車n conjunta de la Canciller赤a, el Ministerio del Medio Ambiente y otros organismos, ha desempe?ado una labor incansable y pionera en este 芍mbito. Ha sido una pol赤tica de Estado, que ha tenido continuidad con gobiernos de distintas orientaciones pol赤ticas.
Hasta la fecha, el 43% de las aguas jurisdiccionales chilenas cuenta con alg迆n nivel de protecci車n. Aqu赤 se incluyen cinco 芍reas marinas protegidas creadas durante mi segundo Gobierno, algunas de ellas muy extensas. Consideremos tambi谷n que la meta fijada por la comunidad internacional es proteger el 30% de la superficie jurisdiccional, de manera que Chile va bastante m芍s adelante en ese objetivo. En esa administraci車n participamos activamente en una iniciativa pionera y convocante como el sistema de Conferencias Our Ocean, en donde ayudamos a crear conciencia sobre la necesidad de adoptar acciones concretas y urgentes para proteger el oc谷ano.
El a?o pasado, y como una muestra m芍s de la continuidad de las pol赤ticas de protecci車n marina de Chile, el Presidente Gabriel Boric, en la Cumbre de las Am谷ricas, propuso a los pa赤ses ribere?os del Pac赤fico el establecimiento de una iniciativa para proteger los corredores biol車gicos desde las costas de Canad芍 hasta el archipi谷lago de Chilo谷 (llamada Am谷ricas para la Protecci車n del Oc谷ano, AMPO), iniciativa que fue aceptada y valorada como un nuevo paso para asegurar el cuidado de los mares.
Y hay un elemento m芍s, que tiene la mayor importancia. Desde 2017, la comunidad internacional viene discutiendo en torno a la adopci車n de un acuerdo llamado Biodiversity Beyond National Jurisdiction (BBNJ), es decir, la conservaci車n de la biodiversidad en altamar, un espacio tan vasto como inexplorado en su mayor parte, que contiene una incontable variedad de especies. Lo que s赤 sabemos es que este enorme espacio, que cubre el 60% de la superficie de nuestro planeta, es clave para la continuidad de la vida sobre la Tierra tal como la conocemos. Esa discusi車n ha llegado a su fin: el pr車ximo 19 de junio, en Nueva York, la comunidad internacional se reunir芍 para adoptar la versi車n final del texto.
El acuerdo regula la creaci車n de 芍reas marinas protegidas en alta mar, establece un sistema de evaluaciones de impacto ambiental de actividades en esa zona y abre oportunidades para la creaci車n de capacidades y transferencia de tecnolog赤a para los pa赤ses en desarrollo. Tambi谷n propone un sistema de uso sostenible de material gen谷tico, con mecanismos para el reparto justo de beneficios de su uso. Es, entonces, un instrumento clave para la protecci車n de 芍reas hasta ahora sin ninguna sujeci車n a restricciones.
Chile, como lo hemos visto al comienzo, es un pa赤s de vocaci車n oce芍nica, que desde hace a?os ha trabajado por mejorar los est芍ndares de protecci車n de los recursos y ecosistemas marinos. Esta vocaci車n es la que ha llevado a proponer que Chile, y concretamente el puerto hist車rico de Valpara赤so, sea la sede del Acuerdo BBNJ. Lograrlo ser芍 especialmente beneficioso para nuestras universidades y centros de investigaci車n, para nuestras instituciones y para toda la comunidad nacional. Nuestra trayectoria en la protecci車n del medio ambiente terrestre y de los oc谷anos, avala nuestra disposici車n a contribuir a la gobernanza global del oc谷ano desde una ciudad ※hundida para arriba§, como dijo Nicanor Parra, sobre la bah赤a de Valpara赤so.