Muere el escritor chileno Antonio Sk¨¢rmeta, autor de ¡®El cartero de Neruda¡¯

El escritor chileno Antonio Sk¨¢rmeta (Antofagasta, 1940) ha muerto este martes a los 83 a?os, seg¨²n inform¨® la Universidad de Chile, donde el autor reconocido internacionalmente estudi¨® Filosof¨ªa y luego se desempe?¨® como acad¨¦mico. El ganador del Premio Nacional de Literatura en 2014 es parte de la llamada Generaci¨®n de los 60, junto a los poetas y escritores chilenos Poli D¨¦lano, Oscar Hahn y Claudio Bertoni. En las obras del novelista, guionista, dramaturgo, diplom¨¢tico y amante del s¨¦ptimo arte destaca su representaci¨®n del pueblo chileno, la forma coloquial del habla y el drama. Tambi¨¦n su fascinaci¨®n por la poes¨ªa, su adoraci¨®n a Shakespeare y la importancia de la fraternidad entre la gente, independiente de sus or¨ªgenes y logros.

Una de sus novelas m¨¢s reconocidas es Ardiente paciencia (1985), una obra en la que imagin¨® una sensible amistad entre el poeta chileno Pablo Neruda y su cartero, que fue llevada al cine en dos ocasiones: la primera dirigida por el mismo Sk¨¢rmeta, y la segunda por el impulso del actor italiano Massimo Troisi en El cartero (y Pablo Neruda), en 1994, dirigida por el ingl¨¦s Michael Radford, nominada en cinco categor¨ªas a los premios Oscar, incluida Mejor Pel¨ªcula y Direcci¨®n, qued¨¢ndose con el de Mejor banda sonora.

Durante la Unidad Popular de Salvador Allende, Sk¨¢rmeta, parte del Movimiento de Acci¨®n Popular Unitaria (MAPU), integr¨® el equipo fundador de la revista cultural La Quinta Rueda. El golpe de Estado en Chile en 1973 lo llev¨® al exilio. El entonces treinta?ero sigui¨® desarrollando su carrera literaria en pa¨ªses como Argentina, Bolivia, pero principalmente en la Alemania Occidental, donde y adapt¨® varias de sus obras al cine. En los distintos escenarios se uni¨® a grupos de artistas e intelectuales chilenos que trabajaron en tareas de solidaridad y literarias, como la Araucaria de Chile, la revista cultural de la resistencia chilena editada en Madrid, en la que Sk¨¢rmeta colaboraba con frecuencia. Su primera incursi¨®n con la literatura fue a trav¨¦s de los cuentos, como El entusiasmo (1965) y Desnudo en el tejado (1969). Durante los a?os en el exilio cambi¨® de registro y escribi¨® varias novelas, la primera de ellas So?¨¦ que la nieve ard¨ªa (1975), seguida por No pas¨® nada (1980), La insurrecci¨®n (1982) y Ardiente paciencia.

Tras el plebiscito de 1988, en el que los chilenos votaron poner fin a la dictadura de Augusto Pinochet, Sk¨¢rmeta regres¨® al pa¨ªs sudamericano e instal¨® en Santiago su taller literario Heinrich B?ll en el instituto cultural alem¨¢n Goethe, donde form¨® a una importante generaci¨®n de escritores. Tambi¨¦n desarroll¨® una carrera de articulista en distintos medios de comunicaci¨®n, como la revista Caras y el diario La ?poca, donde sac¨® punta a su ojo cr¨ªtico sobre temas que iban desde lo cultural hasta lo deportivo. Y escribi¨® textos ilustrados por artistas para ni?os ¡°porque tambi¨¦n me gusta dedicarme a exaltar la fantas¨ªa de quienes van a ser los futuros poetas narradores¡±, dijo cuando recibi¨® el Premio Nacional de Literatura. En 1998 public¨® La Composici¨®n (1998), uno de los escasos libros en Chile que aborda qu¨¦ es una dictadura y que tiene como protagonista a Pedro, un ni?o que debe hacer una tarea escolar.

Su carrera tambi¨¦n incluy¨® la diplomacia. Durante el Gobierno del socialista Ricardo Lagos (2000-2006) se desempe?¨® como embajador de Chile en Alemania.

Una vez confirmada la muerte del escritor, esposo de la escultora Nora Preperski, el presidente Gabriel Boric public¨® un mensaje en sus redes agradeci¨¦ndole por ¡°la vida vivida¡±. ¡°Por los cuentos, las novelas y el teatro. Por el compromiso pol¨ªtico. Por El show de los libros [programa de televisi¨®n cultural presentado por Sk¨¢rmeta entre 1992 y 2002 y exportado a pa¨ªses de Am¨¦rica Latina y Europa] que ampli¨® las fronteras de la literatura. Por so?ar que la nieve ard¨ªa en el Chile que te doli¨® tanto¡±, escribi¨® el mandatario de izquierdas, que se espera que participe en un acto en homenaje al artista en el Teatro Nacional Chileno de la Universidad de Chile, en el centro de la capital, donde est¨¢ siendo velado esta tarde.

El escritor chileno Rafael Gumucio, quien fue parte de los talleres del instituto cultural alem¨¢n Goethe, tambi¨¦n expres¨® en sus redes sociales que ¡°le debe¡± a Antonio Sk¨¢rmeta ser escritor: ¡°Su perpetuo entusiasmo que est¨¢ en sus libros y estaba en cada uno de sus gestos, fue una experiencia fundamental. Sus libros son j¨®venes, tiernos, lleno de esa sonrisa donde yo no pod¨ªa dejar de ver alg¨²n tipo de melancol¨ªa¡±.

Como dramaturgo escribi¨® El plebiscito, un mon¨®logo teatral nunca escenificado que fue llevada al cine en la pel¨ªcula No, de Pablo Larra¨ªn, nominada al Oscar en 2012. Esa no fue su ¨²nica aproximaci¨®n a la dictadura. En su novela Los d¨ªas del arco¨ªris (Premio Planeta 2011) tambi¨¦n se adentra con profundidad a aquel periodo. ¡°Es una novela acerca de la fuerza de la imaginaci¨®n para conseguir, a¨²n en un mundo globalizado y fr¨ªo como este, cambios como los que hoy disfrutamos¡±, afirm¨® el escritor cuando recibi¨® el Premio Iberoamericano Planeta-Casa de Am¨¦rica por la obra. Tambi¨¦n se hizo con el premio Planeta en 2003 por su novela El baile de la Victoria, que fue adaptada al cine por el espa?ol Fernando Trueba con el argentino Ricardo Dar¨ªn como protagonista.

En un homenaje que le realiz¨® la Universidad de Chile en 2020, Adriana Vald¨¦s, entonces directora de la Academia Chilena de la Lengua, destac¨® la forma en que Sk¨¢rmeta revitaliz¨® siempre la escena literaria. ¡°Su imagen en nuestras letras es la de una enorme energ¨ªa, creatividad desbordante y en alguna parte de nuestra conciencia de lectores va a seguir siempre pedaleando en el San Crist¨®bal y transmitiendo su contagioso entusiasmo¡±, se?al¨®. Para ¨¦l, sus libros expresan un ¡°afectuoso respeto por la verdad¡± de sus personajes. ¡°De ellos intento comprender y expresar lo que son. En esta estrategia he descubierto que lo que son incluye de manera muy determinante lo que quieren ser. Creo en el poder de la imaginaci¨®n, que no es exclusivo de los artistas. Ahora, su discurso de cambio no debe ser ut¨®pico sino po¨¦tico. Vanguardista no es el artista que sale corriendo adelante, sino aquel que hace correr hacia adelante a los dem¨¢s¡±, dijo el escritor en una entrevista con EL PA?S en 2013.