Acceso a educaci車n y protecci車n de la ni?ez migrante
En vez de priorizar entre ni?os, el foco debe estar en exigirle a la pol赤tica p迆blica que la escuela pueda acoger a todos para el ejercicio de su derecho a la educaci車n
La escuela puede convertirse en el mejor espacio de acogida para un ni?o o ni?a en situaci車n de vulnerabilidad, como puede ser un migrante o refugiado. Lamentablemente, el proyecto de ley aprobado por el pleno de la C芍mara de Diputadas y Diputados, y que seguir芍 su tramitaci車n en el Senado, los ubica en una segunda categor赤a al momento de acceder a este derecho, al establecerse una prioridad respecto de ni?os chilenos.
En base a los resultados de la Casen 2022, un 29,5% de los hogares migrantes cuenta con al menos uno de sus integrantes mayor de edad con menos a?os de escolaridad que los establecidos por ley y un 6,5% con al menos una persona edad entre 4 y 18 a?os de edad que no est芍 asistiendo a un establecimiento educacional.
Seg迆n la 迆ltima estimaci車n oficial, de fines de 2022, en Chile hay un total de 210.521 ni?os, ni?as y adolescentes (NNA) migrantes menores de 19 a?os. La gran mayor赤a de ellos har芍 su vida en Chile y ser芍 parte del pa赤s que seguiremos construyendo todas y todos los que habitamos este territorio. ?Queremos dejar a un alto n迆mero de la poblaci車n sin educaci車n?
La educaci車n es fundamental para construir una mejor sociedad, sana y cohesionada, y para que las personas puedan llevar vidas productivas, acceder a empleo, entre otros aspectos. En vez de priorizar entre ni?os, el foco debe estar en exigirle a la pol赤tica p迆blica que la escuela, factor protector y de inclusi車n, pueda acoger a todo ni?o y ni?a para el ejercicio de su derecho a la educaci車n, por el bien de ellos y el de todos.
Otra de las normas aprobadas indica que en casos de ingreso al pa赤s de ni?ez no acompa?ada, se debe, en primer lugar, ordenar la salida de dichos ni?os, y solo en su defecto, su permanencia. Es importante no olvidar que la ni?ez migrante no acompa?ada en muchos pa赤ses posee herramientas de protecci車n complementaria, comprendiendo su especial vulnerabilidad y las necesidades de protecci車n.
No se entiende que frente al inter谷s transversal que hay sobre los ni?os, ni?as y adolescentes no acompa?ados que cruzan la frontera, se est谷 avanzando en deshacernos de las herramientas para recibir la protecci車n a la cual no han accedido en su vida.
Las propuestas respecto de sanciones a quienes trasladen a quienes ingresaron por paso no habilitado o a quienes arrienden no teniendo estatus migratorio, exponen a ni?os, ni?as y adolescentes que llegan al pa赤s con sus grupos familiares o solos, a caer en manos de grupos que se esconden en la clandestinidad para ofrecer el acceso informal a transporte o vivienda.
Este proyecto de ley posee m迆ltiples problemas respecto de la poblaci車n migrante y refugiada. Sin embargo, respecto de la ni?ez migrante es fundamental que haya, en lo que queda de tramitaci車n, un enfoque coherente con est芍ndares internacionales e internos, en los que hemos avanzado los 迆ltimos a?os, como es la ley de garant赤as. Avanzar en este tipo de pol赤ticas que relativiza el acceso a derechos, debe alertarnos y alarmarnos a todos quienes habitamos este territorio. No podemos olvidar que estos ni?os, ni?as y adolescentes, quienes ya habitan en nuestro pa赤s, muchos desde su primera infancia, ser芍n parte de la sociedad que construyamos como pa赤s en el futuro. El que puedan desarrollarse adecuadamente accediendo a sus derechos fundamentales augura que puedan ser personas que contribuyan a hacer de Chile un mejor lugar.