Los l¨ªmites del eje derecha/izquierda
La conducta electoral no se est¨¢ rigiendo por razones ideol¨®gicas, sino probablemente por juicios de probidad o competencia de los candidatos para ejercer el cargo
Las ¨²ltimas elecciones locales en Chile dejaron en evidencia cu¨¢n errado es interpretar predominantemente sus resultados en la clave del eje pol¨ªtico m¨¢s celebre de la historia: derecha/izquierda. Esto ya lo sab¨ªamos desde hace mucho tiempo, sobre todo cuando los estudios electorales en todas partes del mundo enfatizaban los atributos personales de los candidatos en desmedro de la l¨®gica espacial del eje, y muy especialmente cuando el territorio en el cual se compet¨ªa era de tama?o mediano y peque?o. Lo nuevo en esta discusi¨®n es la alegre e impune proyecci¨®n pol¨ªtica de resultados locales que se explican predominantemente por asuntos de naturaleza local en clave nacional, que es a lo que se refiere el eje derecha/izquierda.
Hace algunos d¨ªas atr¨¢s, el analista pol¨ªtico Pepe Auth, quien acostumbra a hacer predicciones de lo que ocurrir¨¢ sin nunca explicar las razones de sus fallas cuando los resultados ocurrieron, afirm¨® sin ning¨²n apego a los datos electorales que la derecha tiene todo para ganar tanto las elecciones presidenciales como parlamentarias del pr¨®ximo a?o. Esto puede efectivamente ser as¨ª, pero no por las razones que esgrime Auth. ?Qu¨¦ sentido tiene sumar, como cualquier ni?o lo hace en el colegio, los resultados de candidatos a gobernadores, consejeros regionales, alcaldes y concejales estableciendo como unidad de an¨¢lisis el partido o la lista de partidos que los present¨® para concluir que la derecha tiene todas las posibilidades de ganar? Esas posibilidades las tiene, pero no por esas razones que desconocen la naturaleza local de lo que se encontraba en juego en cada uno de estos territorios.
Usemos un ejemplo para establecer de una vez por todas los l¨ªmites a los que ha llegado el eje derecha/izquierda, tanto en Chile como en muchos otros pa¨ªses, para interpretar resultados y, por a?adidura, para proyectarlos. En la segunda vuelta de la elecci¨®n de gobernadores por la regi¨®n de Valpara¨ªso se enfrent¨® el candidato independiente de izquierda Eduardo Mundaca con la aspirante gremialista (ex secretaria general de la Uni¨®n Dem¨®crata Independiente, UDI) Mar¨ªa Jos¨¦ Hoffman. En la primera vuelta, el candidato Mundaca que iba por su reelecci¨®n como gobernador obtuvo el 33,93% de los votos, contra el 21,63% de los sufragios de Mar¨ªa Jos¨¦ Hoffmann.
Si uno incurre en el ejercicio l¨²dico de sumar las votaciones de todos los candidatos que compitieron en esta elecci¨®n (6) seg¨²n la l¨®gica del eje derecha/izquierda, eso arrojaba una votaci¨®n probable de Hoffmann del 48,86% (asumiendo que el resto de los candidatos eran de izquierda). Pues bien, el resultado de la elecci¨®n de la segunda vuelta arroj¨® un demoledor 62,51% de los votos para el candidato Mundaca contra el 37,49% de Hoffmann (11 puntos menos de lo que al simple sumatoria por l¨®gica espacial del eje suger¨ªa). Aun m¨¢s: si uno va a los resultados a nivel de mesas en donde el candidato del partido de derecha radical (Francesco Venezian, Republicano) alcanzaba una votaci¨®n superior a la que obtuvo a nivel de la regi¨®n, uno constata que muchos votantes republicanos votaron en segunda vuelta¡por el candidato de izquierda. Es importante no perder de vista que el voto en Chile es obligatorio, y que la votaci¨®n en segunda vuelta entre las dos primeras mayor¨ªas arroj¨® un n¨²mero menor de votos nulos y blancos que en primera vuelta.
Este simple ejemplo muestra lo poco exigente, y eventualmente pertinente que se ha vuelto el eje derecha/izquierda en las elecciones locales chilenas. Aun m¨¢s: este ejemplo, junto a varios otros, sugiere que la conducta electoral no se est¨¢ rigiendo por razones ideol¨®gicas, sino probablemente por juicios de probidad o competencia de los candidatos para ejercer el cargo (lo que la literatura en ciencia pol¨ªtica llama valence issues). Si bien esto hay que probarlo, lo que no merece mucha duda es el car¨¢cter temerario de interpretar y proyectar resultados en los t¨¦rminos pol¨ªticos e ideol¨®gicos del eje derecha e izquierda.
Lo anterior deja, entonces, abierta la pregunta por las razones que mueven a los electores a sufragar de tal o cual forma, y por consiguiente consolida la duda por lo que ocurrir¨¢ en las elecciones del pr¨®ximo a?o.
Es posible que la derecha gane tanto la elecci¨®n presidencial como la parlamentaria. Pero lo que es seguro es que no triunfar¨¢ por las razones se?aladas por Pepe Auth, cuya funci¨®n de or¨¢culo interesa a la prensa (sin hacerse jam¨¢s cargo de lo acertado de sus predicciones, ni menos de las razones de fondo que las desmienten), pero no tiene nada que ver con lo que finalmente ocurri¨®¡o podr¨ªa ocurrir.