Por qu¨¦ estos monos tit¨ª son fieles a su pareja durante toda la vida

Sofya Dolotovskaya, investigadora del Centro de Primates de Alemania, recorri¨® la zona norte del Amazonas peruano con el prop¨®sito de estudiar el comportamiento sexual de los monos tit¨ª cobrizos que viven en la selva. Los resultados del trabajo, que se public¨® este lunes en la revista Nature, revelan que estos primates son una de las pocas especies animales fieles a su pareja.

En el trabajo de campo, que dur¨® 14 meses, ...

Sofya Dolotovskaya, investigadora del Centro de Primates de Alemania, recorri¨® la zona norte del Amazonas peruano con el prop¨®sito de estudiar el comportamiento sexual de los monos tit¨ª cobrizos que viven en la selva. Los resultados del trabajo, que se public¨® este lunes en la revista Nature, revelan que estos primates son una de las pocas especies animales fieles a su pareja.

En el trabajo de campo, que dur¨® 14 meses, la investigadora y su equipo estudiaron catorce grupos de monos tit¨ª cobrizos para determinar si eran o no gen¨¦ticamente mon¨®gamos. ¡°Se pudo genotipar cuarenta y un individuos utilizando muestras fecales de las que se extrajo y secuenci¨® el ADN en el Laboratorio de Gen¨¦tica del Centro Alem¨¢n de Primates en G?ttingen¡±.

Los hallazgos del estudio confirman que ninguno de los descendientes de las parejas examinadas fue engendrado por un mono distinto al padre social, al compa?ero de la madre. La investigaci¨®n prob¨® que los primates analizados se reproduc¨ªan con la misma pareja con la que compart¨ªan el d¨ªa a d¨ªa. Es decir, eran compa?eros y compa?eras fieles y leales.

Dolotovskaya explica que solo hay siete especies de mam¨ªferos con monogamia gen¨¦tica comprobada en la naturaleza. ¡°Descubrir una nueva especie con estos comportamientos sociales y este sistema de apareamiento es interesante en s¨ª mismo¡±, dice por correo la investigadora. Otro de los hallazgos relevantes del trabajo es entender que los monos tit¨ª cobrizos no parecen evitar la endogamia y a veces pueden aparearse con individuos relacionados. ¡°A pesar de esto, el grado de parentesco gen¨¦tico entre las parejas es bajo¡±, concluye Dolotovskaya.

De acuerdo con la investigaci¨®n, los monos tit¨ª cobrizos viven en peque?os grupos familiares, formados por machos, hembras y cr¨ªas, que defienden un solo territorio. Habitualmente, nace un solo hijo al a?o, que abandona el grupo cuando alcanza la madurez sexual o poco despu¨¦s y busca una pareja, con la que ocupa un territorio propio. El estudio demostr¨® un nivel excepcionalmente alto de cuidado masculino. ¡°El beb¨¦ tit¨ª es llevado casi exclusivamente por el padre¡±.

Una de las razones principales de la monogamia en esta especie es que el macho y la hembra permanecen cerca casi todo el tiempo. Los socios de la pareja mantienen una relaci¨®n s¨®lida, pasan el d¨ªa y la noche en estrecha proximidad y se acicalan mutuamente. Este comportamiento ¨Cdice Dolotovskaya¨C permite proteger a la pareja para que no se ponga en contacto con individuos fuera del grupo. ¡°Comprobamos tambi¨¦n que los tit¨ªs son muy territoriales, cada pareja tiene su ¨¢rea domiciliar y no se encuentran a otros animales con frecuencia. Como consecuencia, no hay muchas oportunidades para copulaciones con otros monos¡±.

Los socios de la pareja mantienen una relaci¨®n s¨®lida, pasan el d¨ªa y la noche en estrecha proximidad y se acicalan mutuamente

La investigadora cuenta que en muchas otras especies hay cr¨ªas que nacen de copulaciones por fuera de la pareja, pero son criados por el padre social. ¡°Este comportamiento es muy com¨²n incluso en los mam¨ªferos que viven en pareja¡±, dice Dolotovskaya. Y explica: ¡°La raz¨®n es que la elecci¨®n de pareja a menudo es limitada y, a veces, equivocada. Muchas especies solo se dan cuenta de que la pareja elegida no es la mejor gen¨¦ticamente despu¨¦s de ya estar conviviendo con ella. Entonces, con el fin de garantizar los mejores genes posibles para sus propios hijos, puede buscar los genes de un vecino o de un macho flotante sin renunciar a la seguridad de su propio territorio y al padre social solidario¡±.

Esto no pasa en los tit¨ªs. A diferencia de otras especies, en estos monos cobrizos, que se alimentan de frutas, hojas e insectos, la cr¨ªa con una pareja distinta no proporciona una ventaja gen¨¦tica. ¡°Por eso creemos que evitaron los riesgos de la infidelidad¡±, dice Dolotovskaya, quien vivi¨® las inclemencias del Amazonas durante los meses de investigaci¨®n. ¡°Adem¨¢s de los mosquitos y la humedad, me acuerdo de una vez que est¨¢bamos caminando por el bosque cuando una de las cient¨ªficas que me acompa?aba pis¨® a una de las serpientes m¨¢s venenosas y peligrosas de la selva¡±, explica Dolotovskaya. Y a?ade: ¡°Nos asustamos, pero por suerte no la mordi¨®¡±.

Eckhard W. Heymann, cient¨ªfico del Centro Alem¨¢n de Primates y director de la estaci¨®n de campo del Per¨² donde se realiz¨® la investigaci¨®n, afirma por correo que en un ecosistema inalterado los j¨®venes monos titi cobrizos migran lo suficientemente lejos de su grupo natal para encontrar una pareja adecuada sin incurrir en el riesgo de endogamia y reduciendo las posibilidades de infidelidad. ¡°Estudios adicionales deben mostrar si la monogamia gen¨¦tica tambi¨¦n prevalece en otras poblaciones de monos titi cobrizos, especialmente en h¨¢bitats fragmentados¡±, dice Heymann. Y concluye: ¡°El examen del sistema de apareamiento y los mecanismos de relaci¨®n social de estos monos pueden arrojar luz sobre la evoluci¨®n de la monogamia social y gen¨¦tica en los mam¨ªferos¡±.

Puedes seguir a MATERIA en Facebook, Twitter, Instagram o suscribirte aqu¨ª a nuestra newsletter