La ballena gris perdida en el Mediterr¨¢neo agoniza en Mallorca

La joven ballena gris Wally (as¨ª la han bautizado), de ocho metros de longitud y originaria del Pac¨ªfico, est¨¢ agonizando en la playa de Santa Ponsa, un municipio tur¨ªstico de Mallorca que este jueves ha amanecido con el enorme cet¨¢ceo nadando en su costa. Hace tres d¨ªas, el mismo animal fue avistado en Ibiza. Desde que accedi¨® por el Estrecho de Gibraltar, la ballena lleva m¨¢s de dos meses extraviada en el Mediterr¨¢neo, un mar que se ha convertido en un ag¨®nico laberinto en el que no encuentra alimento. ¡°?Escuchad! La respiraci¨®n es cada vez m¨¢s lenta¡±, exclama Debora Morrinson la dire...

La joven ballena gris Wally (as¨ª la han bautizado), de ocho metros de longitud y originaria del Pac¨ªfico, est¨¢ agonizando en la playa de Santa Ponsa, un municipio tur¨ªstico de Mallorca que este jueves ha amanecido con el enorme cet¨¢ceo nadando en su costa. Hace tres d¨ªas, el mismo animal fue avistado en Ibiza. Desde que accedi¨® por el Estrecho de Gibraltar, la ballena lleva m¨¢s de dos meses extraviada en el Mediterr¨¢neo, un mar que se ha convertido en un ag¨®nico laberinto en el que no encuentra alimento. ¡°?Escuchad! La respiraci¨®n es cada vez m¨¢s lenta¡±, exclama Debora Morrinson la directora de conservaci¨®n de Palma Aquarium, a bordo de una lancha de la organizaci¨®n Save the Med, mientras el enorme mam¨ªfero saca sus toneladas grises del agua y rebufa a dos metros de la embarcaci¨®n. ¡°?Est¨¢ delgad¨ªsima, es una pena tremenda!¡±, a?ade Morrinson, mientras trata de llamar la atenci¨®n del rorcual para alejarlo de la costa y evitar que quede varado. Dada su situaci¨®n, expertos consultados plantean su sacrificio para que deje de sufrir.

Salvamento Mar¨ªtimo y la Polic¨ªa Local han acordonado la zona a primera hora de la ma?ana, cuando un vecino ha avisado al 112 de que una enorme ballena (pueden llegar a medir 15 metros de longitud) nadaba en una zona de apenas cinco metros de profundidad. ¡°Hace 10 a?os que no se detectaba una ballena de esta especie en el Mediterr¨¢neo. Y no es una buena noticia porque significa que alg¨²n factor la ha hecho huir del Pac¨ªfico¡±, explica por tel¨¦fono el catedr¨¢tico de zoolog¨ªa de la Universitat de Valencia Juan Antonio Raga. El experto admite que el debate del sacrificio est¨¢ sobre la mesa, pero que ¨¦l es m¨¢s partidario de que ¡°la naturaleza siga su curso¡±. El objetivo del Govern de las Islas Baleares, explican fuentes de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente, es que no quede varada en la playa, pues pesa toneladas. El cet¨¢ceo est¨¢ exhausto, muy delgado y expertos consultados creen que ha venido a morir a Mallorca.

El mam¨ªfero lleva horas dando vueltas en c¨ªrculo por la bah¨ªa arenosa de Santa Ponsa, repleta de hoteles en primera l¨ªnea de mar. Decenas de curiosos se agolpan en las rocas y en el arenal para avistar el animal. Cada pocos minutos sale a respirar y el ruido de su exhalaci¨®n se escucha incluso desde la costa. Nada muy lentamente, cerca del fondo, y no se espanta con las dos lanchas (una de Save the Med y otra de Salvamento) que la observan a escasos metros. ¡°Est¨¢ sufriendo. Yo nunca he visto una ballena gris en Mallorca. Y menos una cr¨ªa. Hay que esperar...¡±, se resigna Morrinson. Hace dos d¨ªas fue avistada en el litoral de Ibiza y se calcula que no tiene m¨¢s de dos a?os (pueden llegar a vivir 60).

¡°Cuando hace una semana tambi¨¦n fue detectada en el litoral valenciano, pens¨¢bamos que llevaba buen camino y se dirig¨ªa al Estrecho de Gibraltar. Pero de nuevo ha tomado un mal camino. Esto se ha complicado m¨¢s¡±, a?ade Raga por tel¨¦fono. Esta especie, a diferencia de otras ballenas, se alimenta en las profundidades, y en el Mediterr¨¢neo no hay suficiente sustento para ella.

La carrera ag¨®nica de Wally es medi¨¢tica desde hace semanas. Ha sido avistada en Marruecos, Francia e Italia. Las entidades proteccionistas recuerdan que navegar cerca de ella est¨¢ prohibido y puede poner en peligro su seguridad. Este jueves, han sido necesarias varias patrullas de la Polic¨ªa Local para desalojar la zona de rocas. Por momentos, la ballena se ha llegado a acercar tanto a la costa que si se alargaba el brazo se pod¨ªa tocar. Ha habido un curioso que incluso se ha lanzado al agua con una tabla de surf para poder verla m¨¢s de cerca. Las dos poblaciones m¨¢s numerosas de ballena gris se encuentran en el Pac¨ªfico, en las costas de Estados Unidos y en las de Corea.

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