El desierto de Marruecos se inunda por primera vez en m¨¢s de medio siglo
Una oleada de inusuales temporales de lluvia crea lagunas entre las dunas y revive humedales para las aves
Los n¨®madas m¨¢s viejos del Zagora y Merzuga, en el des¨¦rtico sureste de Marruecos, no recuerdan haber visto en m¨¢s de medio siglo extensas lagunas y riachuelos fluyendo entre las dunas. Flamantes acumulaciones de agua surgidas en las ¨²ltimas semanas sorprenden a los visitantes de uno de los parajes tur¨ªsticos m¨¢s frecuentados del pa¨ªs magreb¨ª. Los sucesivos temporales de lluvias excepcionales al final del verano y el comienzo del oto?o han causado este inusual fen¨®meno, sin precedentes recientes, que ha transformado el paisaje del S¨¢hara.
El relieve de estas regiones ha facilitado el embalsamiento de agua en barrancos y vaguadas y la resurrecci¨®n de lagos como el del parque nacional de Iriqui, desecado hace d¨¦cadas. Tras el temporal de lluvia de la primera quincena de septiembre, im¨¢genes captadas por el sistema MODIS del sat¨¦lite Terra de la NASA y del sat¨¦lite Sentinel 2, del programa europeo Coopernicus, constataron el renacimiento de un humedal de alto valor ecol¨®gico en la ruta migratoria de flamencos y otras especies acu¨¢ticas.
¡°La ¨²ltima vez que tuvo agua fue en 1968¡å, asegura Adel Munan, investigador de la Universidad de Kenitra, citado por la agencia Efe. El lago Iriqui presenta ahora 13 kil¨®metros de largo por 11 de ancho. ¡°Todo un ecosistema resucita¡±, celebra Muman, a la espera del retorno de las aves migratorias y de la reaparici¨®n de crust¨¢ceos como los triops, considerados como una de las especies vivas m¨¢s antiguas del planeta, cuyos huevos resisten durante d¨¦cadas en ambientes secos.
¡°En mi cabeza ronda la duda de si todo fue uno de los cl¨¢sicos espejismos que se dan en las zonas des¨¦rticas¡±, relataba a finales de septiembre un viajero espa?ol tras difundir algunas de las primeras im¨¢genes de las lagunas del desierto publicadas por National Geographic. Las regiones del sur de Marruecos han registrado hasta 250 litros metros cuadrados en una o dos jornadas, el equivalente a la media anual pluviom¨¦trica de la zona.
¡°Lo nunca visto¡±, reconoc¨ªa Huc¨ªn Yuaabed, portavoz de la Direcci¨®n General de Meteorolog¨ªa marroqu¨ª, al portal informativo digital Hespress. ¡°Estas precipitaciones amenazan con modificar el clima de la zona al aumentar la humedad del aire y la evaporaci¨®n de agua¡±, advirti¨®. A pesar del diluvio ca¨ªdo en el ¨²ltimo mes sobre el sur de pa¨ªs, la media nacional de las reservas de agua en los pantanos de Marruecos se situaba el martes en apenas el 29% de su capacidad m¨¢xima tras m¨¢s de seis a?os de sequ¨ªa.
Las intensas precipitaciones se repitieron a finales de septiembre en amplias zonas del sur y el este del pa¨ªs. Al menos 10 personas murieron y otras siete fueron dadas por desaparecidas. En la primera oleada del temporal perecieron 18 personas, entre ellas una ciudadana espa?ola que viajaba en un convoy de todoterrenos tur¨ªsticos que fue arrastrado por la riada al atravesar un vado. El pasado fin de semana, la acumulaci¨®n de agua en las instalaciones del aeropuerto internacional de Marraquech, principal destino Tur¨ªstico de Marruecos, forz¨® el desv¨ªo de varios vuelos a otros aer¨®dromos. El estado de alerta por lluvias torrenciales segu¨ªa vigente este mi¨¦rcoles en varias regiones del pa¨ªs magreb¨ª.
Los temporales ha sido causados por ¡°una masa de aire tropical extremadamente inestable, debido a la posici¨®n excepcional del frente intertropical en el sur¡±, seg¨²n la Direcci¨®n General de Meteorolog¨ªa de Marruecos. ¡°Las masas de aire tropical h¨²medo se movieron hacia el norte, encontr¨¢ndose con masas de aire fr¨ªo, lo que result¨® en la formaci¨®n de nubes inestables y violentas¡±, precis¨® el organismo oficial.
Las crecidas han tenido un efecto devastador. Los oasis y la capa fre¨¢tica act¨²an como reguladores naturales de las reservas de agua, pero la construcci¨®n de embalses y el masivo bombeo de extracci¨®n de los pozos para abastecer a la agricultura extensiva parecen haber alterado el equilibrio tras un largo periodo sin lluvias, seg¨²n la Asociaci¨®n de Lucha contra la Erosi¨®n, la Sequ¨ªa y la Desertificaci¨®n en Marruecos. Numerosas casas han sido edificadas cerca de las riberas de r¨ªos cuyos cauces casi siempre permanecen secos, en la creencia de que el agua no volver¨ªa a discurrir por ellos. Varias poblaciones se han erigido adem¨¢s en estrechos desfiladeros.
Las regiones de Al Hauz y Tarudant, situadas en el Atlas y que hace un a?o sufrieron un terremoto que caus¨® cerca de 3.000 muertos, se han visto tambi¨¦n afectadas por las recientes inundaciones. Decenas de miles de personas siguen viviendo all¨ª en tiendas de campa?a tras la destrucci¨®n de unas 60.000 viviendas por el se¨ªsmo.