Jos¨¦ Manuel ?lvarez Bautista: ¡°Convivir con diferentes opiniones es un acto de amor¡±
Este ingeniero industrial onubense, amante de la bicicleta y especialista en suministros energ¨¦ticos, se suscribi¨® a EL PA?S porque, seg¨²n cuenta, el diario le explica de forma sencilla cuestiones muy complejas
Como buen ingeniero industrial, Jos¨¦ Manuel ?lvarez Bautista (Ayamonte, 48 a?os) toma sus decisiones sobre todo por cuestiones pr¨¢cticas. Por ejemplo, va siempre a trabajar en bicicleta desde el barrio sevillano de La Macarena, donde vive de alquiler, al centro de la ciudad porque as¨ª se olvida de problemas de aparcamiento, o se suscribi¨® a EL PA?S hace dos a?os porque, seg¨²n cuenta, era el medio donde le explicaban de forma m¨¢s sencilla cosas muy complejas: ¡°Es muy f¨¢cil de leer¡±. Pero nada de esto quiere decir que no sea un sentimental: este ayamontino, casado, con dos hijos, nada m¨¢s llegar explica lo mucho que le conmovi¨® la reciente muerte de Antonio Gala y que se qued¨® a vivir en Sevilla por amor, sentimiento que considera la base de la democracia. Nos sentamos con ¨¦l en la legendaria taberna Las Teresas, en el barrio de Santa Cruz, donde fotos de visitantes ilustres (entre ellos el inolvidable Antonio Fraguas, Forges) nos contemplan.
Pregunta. ?Tambi¨¦n fue a votar en bicicleta?
Respuesta. Fui a votar caminando desde el hospital p¨²blico en el que estuve ingresado antes [muestra la pulsera de ingreso, que a¨²n lleva puesta]. Me llev¨¦ un buen susto, pero nunca me abstengo. Lo que pasa es que por los problemas de salud de estos d¨ªas me he enterado del adelanto de las elecciones casi con dos d¨ªas de retraso [risas].
P. ?Y qu¨¦ sentimiento le invadi¨®? ?Es usted una de esas personas que cuando no ganan ¡°los suyos¡± mira a los vecinos con suspicacia, o piensa: ¡°As¨ª es la democracia¡±?
R. Pens¨¦ simplemente que es otra oportunidad. Yo ser¨ªa feliz con que nos quisi¨¦ramos un poco m¨¢s y pudi¨¦ramos intentar cada vez un modelo diferente con m¨¢s calma. Convivir con diferentes opiniones es un acto de amor.
P. ?Y qu¨¦ tal de encaminados vamos en esa senda de amor?
R. Pues depende de qu¨¦ sistema estemos hablando. En el familiar es donde a m¨ª me va mejor, sobre todo ahora que mi mujer y yo estamos trabajando las incidencias normales de una pareja con hijos. La pena es que, como dec¨ªa Antonio Gala, esencialmente vivimos en una plutocracia en la que parece que votamos pero despu¨¦s realmente gobiernan los intereses de los grandes grupos econ¨®micos y poderes f¨¢cticos.
P. ?Eso cambia un poco en funci¨®n de qui¨¦n gana las elecciones o no?
R. Cuando gana la izquierda se nota en las pol¨ªticas sociales, en el acceso a ayudas. Trabajo en una empresa en la que doy asesor¨ªa energ¨¦tica a grandes y peque?as empresas y lo vi muy claro el a?o pasado cuando se tomaron medidas para estabilizar el precio de la energ¨ªa. Ah¨ª s¨ª que no hab¨ªa izquierda ni derecha en la interpretaci¨®n de los hechos: el precio de la electricidad fue cayendo hasta que alcanz¨® cotas normales gracias a la excepci¨®n ib¨¦rica.
P. ?Qu¨¦ le hace perder totalmente la confianza en un periodista o en un medio?
R. Cuando s¨¦ mucho sobre un tema y lo veo mal reflejado o cuando no estoy de acuerdo con la opini¨®n que se da sobre ese hecho.
P. ?Y cu¨¢l es el tema sobre el que se informa obsesivamente en los ¨²ltimos tiempos?
R. Ahora estoy estudiando ingenier¨ªa inform¨¢tica por la UNED porque quiero poder crear mis propios programas y me interesa much¨ªsimo todo lo que tenga que ver con inteligencia artificial. Los d¨ªas que estuve ingresado en el hospital sufr¨ª un dolor muy importante y metido en el box me preguntaba, ?por qu¨¦ los seres humanos tenemos conciencia? Yo la miro a los ojos a usted y s¨¦ que la tiene, pero, ?qu¨¦ pasa si un d¨ªa un sistema ordenado, como el ChatGPT, se puede manifestar de una forma que parezca que tiene conciencia? Es un debate apasionante.
P. Denos un coscorr¨®n a los periodistas de EL PA?S.
R. Me molesta que parece que todo pasa en Madrid. Pues no. Espa?a es un Estado auton¨®mico.
P. La vivienda es una de las principales preocupaciones de los espa?oles. ?Le atormenta no ser propietario?
R. Para nada. Yo intento no vivir por encima de mis posibilidades: soy feliz tomando un caf¨¦ aqu¨ª o yendo un d¨ªa a mi club de lectura. Me preocupa tener buena relaci¨®n con mi mujer, que mis hijos est¨¦n bien, levantarme por la ma?ana con motivaci¨®n para ir al trabajo, poder pagar el alquiler con tranquilidad¡ bueno, ?y que el nuevo alcalde de Sevilla [del PP] cuide las bicicletas! [risas].
P. ?Nos recomienda un libro de sus ¨²ltimas lecturas?
R. Estoy leyendo Canijo, de Fernando Mansilla, una novela fascinante sobre el problema de la hero¨ªna en Sevilla tras el Mundial del 82.