El reto: crear nuevos lectores

¡­Y en el origen estaba el principio del futuro del libro¡­ En la vuelta a la necesidad de crear nuevos lectores y de fomentar la lectura est¨¢ el porvenir de la creaci¨®n literaria y de la supervivencia de un negocio que enfrenta su quinto a?o de crisis consecutiva por la ca¨ªda de las ventas. Sin nuevos lectores no habr¨¢ compradores de libros, coincide media docena de escritores, editores, libreros y organizadores de la 72? Feria del Libro de Madrid, que inaugur¨® una nueva edici¨®n (hasta el 16 de junio) en el Parque del Buen Retiro de Madrid. Una idea que resume C¨¦sar Antonio Molina, director de la Casa del Lector, escritor y exministro de Cultura: ¡°Hubo un equ¨ªvoco al pensar que lo importante era que hubiera compradores de libros, aunque los libros no se leyeran. Un error garrafal. Lo que hay que crear es lectores y una vez que se creen, ellos comprar¨¢n libros¡±. La idea la comparten escritores como Javier Gom¨¢, que dio la conferencia inaugural de la feria, Luisg¨¦ Mart¨ªn y Guadalupe Nettel.

El vac¨ªo est¨¢ creado. La enmienda se quiere empezar.

La euforia por las cifras millonarias de ventas de libros es recuerdo. Desde 2008 caen de manera imparable, mientras, parad¨®jicamente, las encuestas se?alan un aumento en la lectura que dice practicar ya el 63% de los espa?oles (quienes leen al menos una vez cada tres meses), y uno de cada tres espa?oles no lo hace nunca. ?Y, aparte de vender libros, qu¨¦ hace la feria por promover la lectura y crear nuevos lectores? ¡°Trabajar con los j¨®venes y m¨¢s peque?os en las actividades del pabell¨®n infantil e involucrar a los padres de familia en esta tarea¡±, asegura Teodoro Sacrist¨¢n, director de la feria.

La lucha por la reconversi¨®n de los h¨¢bitos de lectura se suma a la de la pirater¨ªa. Si bien es cierto que entre quienes leen, el 58% lo hace, tambi¨¦n, en formato digital ¡ªdiez puntos m¨¢s que hace dos a?os¡ª, solo la tercera parte reconoce pagar por las descargas. Es decir, que siete de cada diez descarga gratuitamente los libros. Otra paradoja es que a mayor oferta digital por parte de las editoriales, mayor pirater¨ªa. ¡°Se ha quebrado la din¨¢mica de una parte de la cadena del consumo cultural y se pone en riesgo la creaci¨®n¡±, advirti¨® hace unos meses Javier Cort¨¦s, presidente de la Federaci¨®n de Gremios de Editores de Espa?a, al presentar el bar¨®metro de H¨¢bitos de lectura y compra de libros 2012.

Por eso, las expresiones que se escuchan estos d¨ªas en la feria son del tipo:

¡ª?Esperamos un peque?o milagro!

¡ªDebemos garantizar nuevos lectores¡­

¡ªHay que cuidar a los libreros¡­

¡ªConfiamos en remontar¡­

¡ªHay que afrontar la crisis con entusiasmo e ilusi¨®n¡­

Peticiones y plegarias al dios de los libros en una cita que es un term¨®metro de lo que pasa en el sector cada a?o. As¨ª es que m¨¢s de 800 editoriales espa?olas, un sector que da trabajo a unas 30.000 personas, e incluso el Gobierno ¡ªla industria editorial representa el 0,7 por ciento del PIB (el a?o pasado factur¨® unos 3.000 millones de euros)¡ª estar¨¢n atentos a lo que suceda en los pr¨®ximos 17 d¨ªas en las 353 casetas.

En 2012 la feria registr¨® una ca¨ªda en las ventas del 19% respecto al a?o anterior, que a su vez hab¨ªa sido del 10% menos respecto a 2010.

Con dios de los libros o sin ¨¦l, los que s¨ª estar¨¢n m¨¢s presentes que nunca ser¨¢n los escritores que cumplir¨¢n religiosamente su ritual de ir a firmar libros y encontrarse con sus lectores. ?M¨¢s de 400 autores???M¨¢s de 500, o incluso 600!? Lo cierto es que ser¨¢ una apoteosis de escritores ofreciendo sus libros firmados; y no solo los fines de semana, tambi¨¦n habr¨¢ muchos de lunes a viernes, y no todos con novedades literarias. Todos con la misi¨®n de contribuir a las ventas. ¡°Es una forma de agradecer a los lectores habituales y conquistar otros¡±, seg¨²n Rodrigo Rivero, de la librer¨ªa L¨¦ y del comit¨¦ organizador.

Con este panorama sembrado de incertidumbre otra arma para afrontarlo es con ¡°m¨¢s ilusi¨®n y optimismo, sin esto no existe la edici¨®n¡±, asegura Valeria Ciompi de Alianza. Para Pilar Reyes, de Alfaguara, una clave est¨¢ en defender al librero, ¡°el actor cultural m¨¢s importante de la edici¨®n¡±, idea que Juan Casamayor, de P¨¢ginas de Espuma, refuerza: ¡°Hay que crear un plan estrat¨¦gico nacional para apoyar la red de librer¨ªas¡±. Ello, adem¨¢s, de que cada uno dentro del sector d¨¦ lo mejor de s¨ª, afirman Ofelia Grande, de Siruela, y ?ngeles Aguilera, de Planeta.

Diecisiete d¨ªas que ser¨¢n vistos como las caba?uelas para lo que queda del a?o.