Santiago Lorenzo: ¡°Hay que hacer las cosas a lo bestia. O vives o no¡±
El escritor sigue pregunt¨¢ndose desde su pedan¨ªa segoviana de 23 habitantes qu¨¦ est¨¢ pasando con el ¨¦xito de su ¨²ltimo libro, 'Los asquerosos'
En el huerto del escritor Santiago Lorenzo (Portugalete, Bizkaia, 55 a?os) hay seis lechugas ¡°tan securrias que es un dolor verlas¡±. Espera que el calor se lo compense endulzando las uvas de la parra bajo la que charlamos. En la grabadora se cuelan los pajarillos de la pedan¨ªa segoviana de 23 habitantes en la que vive desde que se vino ¡°con el armario grande¡± el 1 de agosto de 2012 (con ¨¦l las fechas siempre son exactas). Aqu¨ª escribi¨® Los asquerosos (Blackie Books, 2018), su quinto libro, del que lleva m¨¢s de 50.000 copias vendidas. Para haberse hecho famoso con una novela sobre lo molesta que es la gente, es exquisitamente cordial y generoso con su tiempo.
Pregunta. Cuando se vive en un sitio as¨ª, ?ad¨®nde se escapa uno?
Respuesta. Yo nunca voy a ning¨²n lado. No s¨¦ conducir. A cuenta del libro me invitan a cosas, pero me da mal rollo. En el bus la gente va haciendo ruido.
P. Dice que es m¨¢s f¨¢cil escribir en la ciudad porque pasan cosas, y ya ha escrito su novela de aislamiento rural. ?De qu¨¦ ir¨¢ la siguiente?
R. Igual ni escribo nada m¨¢s. En realidad, ?para que vas a escribir? Adem¨¢s, si escribes una novela que va bien, en la siguiente, hagas lo que hagas, te van a decir que eres gilipollas. ?Pues que se queden con las put¨ªsimas ganas!
P. ?De d¨®nde viene la man¨ªa de estar solo?
R. Igual que hay gente anor¨¦xica o glotona. O pajeros... Pero estoy muy orgulloso de haber conocido a mucha gente muy distinta. Con 23 a?os hice una lista con la gente que conoc¨ªa y se hab¨ªa muerto; me salieron varios folios. Eso es que has conocido a mucha gente.
P. A su mujer la ve cada dos semanas. ?Ese es el secreto?
R. A nosotros nos funciona fenomenal. Ocho a?os, requetecasados.
P. El 7 de julio de 1981, se mud¨® de Portugalete a Valladolid, el 18 de octubre de 1985 se fue a Madrid a estudiar. ?Qu¨¦ pas¨® el 28 febrero de 2005?
R. Dej¨¦ el alcohol. Iba a probar 15 d¨ªas y van 14 a?os. Siempre beb¨ªa solo, me pon¨ªa hasta las cartolas. Estaba en una fase en que me temblaban las manos, me pod¨ªa desmayar en un bar. Yo cultivo mis verg¨¹enzas, pero aquello me daba tanta que ya no ten¨ªa gracia ni el enlatado. Fue una gozada dejarlo. Me record¨® a empezar a beber; descubres un mundo nuevo. Y tambi¨¦n fue una gozada haber estado empapuzado de alcohol. Lo que hay que hacer es las cosas a lo bestia. O vives o no.
P. ?Pas¨® algo ese d¨ªa para tomar la decisi¨®n?
R. Estaba en el maravilloso bar Couto de la Cuesta de San Vicente, jarreando a vinos. Pens¨¦: ¡°Est¨¢s en el mismo t¨¦rmino municipal, a un viaje de metro, de plantarte ante la caja de cerillas que hay pintada en el cuadro La tertulia del Caf¨¦ Pombo, de Guti¨¦rrez Solana. Pero no vas a ir. ?A qu¨¦? No, mejor s¨¢came otra botella de chinch¨®n¡±. Y la gozada es hacer lo contrario. Decir, me voy a subir ¡ªcomo he hecho alguna vez¡ª a ese monte de ah¨ª y saber que tienes escasas posibilidades de aparecer muerto.
P. Colecciona cosas.
R. Antig¨¹edades recientes ¡ªobjetos de los sesenta y setenta que van a ser antig¨¹edades pasado ma?ana¡ª, tambi¨¦n soldados, trenes el¨¦ctricos, maquetas... A veces me pregunto por qu¨¦ malgasto las horas haciendo cualquier otra cosa que no sean maquetas. Libros no colecciono; solo me quedo con los que me han dejado bobo. El resto se los regalo a las visitas.
P. Le comparan con Jardiel Poncela, Azcona, Valle-Incl¨¢n¡ ?Se pasan?
R. Claro. Si me hubieran influido esos, escribir¨ªa mejor.
P. ?Qui¨¦n entonces?
R. Todo el mundo quiere hacer como que es Venus salida de una concha. Pero es mentira; lo que pasa es que uno en su puta vanidad se calla qui¨¦n le ha influido.
P. ?Como usted ahora?
R. ?Pero tengo la decencia de decirlo! ?Ay! Tengo una chorrada que siempre olvido decir [pone voz nasal]: ¡°Mis influencias son el dramaturgo vallisoletano Etelvino de Cigales; el poeta checo Vishki Ydi? y el poeta murciano Gin¨¦s Mart¨ªn y Blanco... ?Vino cigales, whisky Dyc y Martini blanco!
P. Qu¨¦ elaborado.
R. Se me ocurri¨® en un autob¨²s. Lo puede escribir como quiera.
P. Lo har¨¦. S¨ª menciona a veces a Dionisio Ridruejo...
R. Me encantan los desplazados. Ridruejo y Manuel Tag¨¹e?a son dos sujetos sim¨¦tricos de los a?os treinta y cuarenta. Uno empieza en Falange y otro en el Partido Comunista, y ambos se desencantaron. Y para m¨ª el gran espa?ol es Benito P¨¦rez Gald¨®s. Me alegro de que no naciera en la Pen¨ªnsula.
P. Antes de escritor fue cineasta. ?Lo echa de menos?
R. Lo echo de m¨¢s. He conocido a cada soplagaitas... Y tambi¨¦n a la gente m¨¢s extraordinaria, unos talentazos, pero siempre mandaban los gilipollas. Forj¨¦ grandes amistades, y la camarader¨ªa que solo da el riesgo. Hice cortos, un largo y luego una segunda pel¨ªcula que deploro. Cuando te viene un productor dici¨¦ndote lo que tienes que hacer, lo dejas.
P. De cineasta de culto a escritor mainstream...
R. Sigo pregunt¨¢ndome en turnos de ma?ana y tarde qu¨¦ est¨¢ pasando con este libro. Yo lo he hecho como siempre. Parece algo que dir¨ªa Emilio Arag¨®n, pero es la put¨ªsima verdad. Pens¨¦ que iba a caer mal, es un libro muy falt¨®n, sin personajes, solo un gilipollas y un mismo decorado. Ser¨ªa un corto de aficionados. A m¨ª me gusta mi tercera novela, Las ganas, que vendi¨® 3.000 copias. Lo que s¨ª considero un ¨¦xito es haber acabado Los asquerosos aqu¨ª en mi casa el 18 de junio de 2018, que es la fecha de la batalla de Waterloo en 1815.