El pintor Alberto Reguera se adentra en los cielos de Aert van der Neer
El artista segoviano expone en el Museo Thyssen-Bornemisza 10 obras inspiradas en el maestro holand¨¦s
El paisaje nocturno Claro de luna con un camino bordeando un canal, pintado hacia 1645-1650 por el holand¨¦s Aert van der Neer, es una de las obras m¨¢s sobresalientes de la colecci¨®n Thyssen. Hace un par de a?os, el director art¨ªstico del museo, Guillermo Solana, propuso al pintor segoviano Alberto Reguera (60 a?os) que creara una serie en torno a esta pieza maestra del museo. El resultado fueron 21 pin...
El paisaje nocturno Claro de luna con un camino bordeando un canal, pintado hacia 1645-1650 por el holand¨¦s Aert van der Neer, es una de las obras m¨¢s sobresalientes de la colecci¨®n Thyssen. Hace un par de a?os, el director art¨ªstico del museo, Guillermo Solana, propuso al pintor segoviano Alberto Reguera (60 a?os) que creara una serie en torno a esta pieza maestra del museo. El resultado fueron 21 pinturas de peque?o y mediano formato, de las que una decena se exponen desde hoy hasta el 9 de mayo en el mirador interior del edificio.
La luz nocturna y crepuscular ha inspirado la mayor parte de la obra de Reguera, un artista que vive y trabaja entre Madrid y Par¨ªs y ha cimentado su carrera durante largas estancias en Holanda y Noruega. Devoto de la pintura, Reguera se siente vinculado a los grandes paisajistas franceses y asi¨¢ticos y deudor de los espa?oles Lucio Mu?oz y Rafael Canogar.
La peque?a tabla de Aert van der Neer (35,6 por 65,5 cent¨ªmetros) cuelga ahora rodeada de las visiones nocturnas contempor¨¢neas de Reguera. Como en la obra del maestro holand¨¦s, la luna y las nubes son las protagonistas de cada uno de los cuadros. ¡°Lo m¨¢s importante para m¨ª es su cielo, la fusi¨®n de las luces nocturnas, cuando la l¨ªnea del horizonte baja hasta la tierra. Es ah¨ª tambi¨¦n donde yo veo una similitud entre el paisaje de Castilla y el holand¨¦s, en el encuentro de la niebla con la tierra¡±, dice Reguera.
En la sala en la que su obra comparte escenario con el maestro holand¨¦s, Reguera explica que no ha querido hacer reproducciones de la pintura de Van der Neer. ¡°Creo que he compuesto un puzle lleno de visiones abstractas de los momentos en los que la luz se funde con las nubes¡±. El artista aporta su visi¨®n contempor¨¢nea del arte haciendo que cada uno de sus cuadros sea tambi¨¦n un objeto con identidad propia. Para ello ha ensanchado y dado grosor al lienzo, extendiendo la pintura por los m¨¢rgenes de las telas hasta conseguir una contemplaci¨®n tridimensional de cada una de las obras.
No es la primera vez que Reguera utiliza los cielos como tema pict¨®rico. ¡°Los cielos de Aert van der Neer¡±, explica, ¡°constituyen para m¨ª una bell¨ªsima parada en el viaje celeste de la Historia de la Pintura, cuyo precedente estar¨ªa un siglo antes, en los azules de Patinir, y que continuar¨ªa siglos m¨¢s tarde, con los de James Arthur O¡¯Connor, los de Carus, los de Christian Dahl, los de Iv¨¢n Aivazovsky, o los de John Atkinson Grimshaw, entre otros. He trabajado mucho el tema de las nubes, como uno de los elementos m¨¢s abstractos que encuentro en la Naturaleza¡±.
Como los viejos maestros y con las ma?as de un avezado alquimista, Reguera fabrica los pigmentos que luego esparce sobre las telas. ¡°En Madrid y Par¨ªs todav¨ªa encuentro dos tiendas donde venden los pigmentos b¨¢sicos con los que despu¨¦s experimento y trabajo¡±, a?ade. ¡±Despu¨¦s, me enfrento al cuadro espolvoreando o lanzando pintura a chorros siempre a la carrera, para atrapar el movimiento de las nubes¡±.
Pero ese lanzamiento de pintura siempre es controlado y busca efectos espec¨ªficos en el espectador. En alguno de los cuadros, depende desde donde lo observe el visitante, predominar¨¢n la oscuridad o la luz, los ocres o los azules. Reguera explica que el efecto lo logra usando pigmentos met¨¢licos, con los que hace tiempo trabaja. ¡°El cobre o la plata son iridiscentes y cambian dependiendo del lugar desde el que mire el espectador. Seg¨²n la incidencia de la luz, un mismo pigmento puede verse oscuro o brillante y ofrecer diferentes visiones de un mismo paisaje. Un mismo cuadro tiene muchas vidas¡±.
En oto?o, la versi¨®n completa de la serie, las 21 obras, se expondr¨¢n en el Museo de la Universidad de Hong Kong. Desde 2007, Reguera empez¨® a exponer en Asia, con muestras en Singapur, Se¨²l, Shangh¨¢i y Hong Kong. En 2019 fue seleccionado para la VIII Bienal Internacional de Arte de Pek¨ªn y, en 2020, present¨® una exposici¨®n en la Delegaci¨®n de la Uni¨®n Europea en China.