La oposici¨®n de la Iglesia a la apertura digital de las puertas impide visitar templos rom¨¢nicos en Castilla y Le¨®n
Palencia, con la mayor concentraci¨®n en el mundo de monumentos de ese periodo, mantiene gran parte de los edificios cerrados pese a las inversiones millonarias de la Junta y otras instituciones para restaurarlos y mantenerlos
El silencio de los campos de Castilla es tambi¨¦n una forma de olvido. El abandono acalla los pueblos, en muchos de los cuales ya no repican las campanas porque no hay nadie para abrir las iglesias. O tal vez suenan cada 15 d¨ªas, cuando curas itinerantes llegan para decir misa. El rom¨¢nico se convierte en v¨ªctima colateral de este silencio. El patrimonio cultural de provincias como Burgos y Palencia, una de las ...
El silencio de los campos de Castilla es tambi¨¦n una forma de olvido. El abandono acalla los pueblos, en muchos de los cuales ya no repican las campanas porque no hay nadie para abrir las iglesias. O tal vez suenan cada 15 d¨ªas, cuando curas itinerantes llegan para decir misa. El rom¨¢nico se convierte en v¨ªctima colateral de este silencio. El patrimonio cultural de provincias como Burgos y Palencia, una de las mayores concentraciones del mundo de templos de este estilo ¡ª150¡ª, parece como si desapareciera del mapa pese a las inversiones p¨²blicas en su restauraci¨®n y mantenimiento y a pesar de los intentos de instituciones culturales como la Fundaci¨®n Santa Mar¨ªa la Real por usar la tecnolog¨ªa para reanimar los templos.
La batalla en favor del rom¨¢nico como fuente de turismo para Castilla y Le¨®n y el empe?o por reactivar provincias con menos de 160.000 habitantes, como Palencia, es antigua. Se cumple m¨¢s de una d¨¦cada desde que la Junta, la Fundaci¨®n y los obispados de Palencia y de Burgos, junto con otras instituciones locales, lanzaron el proyecto Rom¨¢nico Norte, gracias al cual se restauraron 54 monumentos (como Santa Marina, en Villanueva de la Torre; San Juan Bautista, en Respenda de Aguilar, y Santa Mar¨ªa, en Canduela), con una inversi¨®n de cerca de 10 millones de euros. Se pretend¨ªa entonces recuperar patrimonio y asegurar un retorno para una zona de m¨¢s de 2.300 testimonios rom¨¢nicos (lo que incluye todo tipo de vestigios) en las nueve provincias de la comunidad (en Espa?a hay m¨¢s de 9.000). Aquel proyecto incluy¨® una iniciativa para mantener los templos abiertos: un sistema de tarjetas, similar al que se usa en los hoteles.
Valga un ejemplo para entender esta propuesta que se qued¨® en testimonial (solo se prob¨® un programa piloto en dos de los templos). Una familia decide pasar unos d¨ªas de vacaciones en Palencia. En lugar de contratar un gu¨ªa para conocer el rom¨¢nico de la regi¨®n, se acerca al centro de visitantes del Monasterio de Santa Mar¨ªa la Real, se registra tras entregar sus datos, y les dan una o varias tarjetas para acceder a los templos de un recorrido que previamente han solicitado. Adem¨¢s, reciben c¨®digos QR para descargar audiogu¨ªas en sus tel¨¦fonos. Una vez en el lugar, solo tienen que pasar la tarjeta por un dispositivo en la entrada. Acceden al templo y, terminada la visita, cierran la puerta. Carmen Molinos, directora de Comunicaci¨®n de la Fundaci¨®n Santa Mar¨ªa la Real, explica: ¡°El precio no se estableci¨® porque no se pudo desarrollar, pero es m¨¢s barato que llevar a un gu¨ªa¡±.
No se lleg¨® a poner en marcha por la oposici¨®n de la Iglesia, que tem¨ªa robos y da?os en el interior de los templos por falta, argumentan varias fuentes consultadas, de garant¨ªas con la seguridad. EL PA?S se ha puesto en contacto con la di¨®cesis y se limitan a responder que desconoc¨ªan este proyecto. Fuentes de la Fundaci¨®n y la Junta de Castilla y Le¨®n aseguran a este diario que durante el desarrollo del Rom¨¢nico Norte se trabaj¨® en comisiones donde estaban representadas todas las partes, incluida la Iglesia, y que en ellas se expuso el sistema de tarjetas entre otros proyectos.
Gumersindo Bueno, director general de Patrimonio de la Junta, que entonces formaba parte de la Fundaci¨®n y particip¨® en el proyecto Rom¨¢nico Norte, se?ala: ¡°Los titulares de los centros se encuentran m¨¢s c¨®modos con una persona de gu¨ªa, adem¨¢s del custodio al que llamamos y amablemente te abre¡±. Los custodios son todas esas personas repartidas por los pueblos que guardan en sus casas las llaves de iglesias y parroquias. En la mayor¨ªa de los casos es gente mayor, la que queda en la Espa?a vac¨ªa. Trabajan de manera voluntaria y gratuita, y no siempre est¨¢n disponibles para atender las necesidades del turismo.
Aunque desde la Junta se hizo una gran inversi¨®n p¨²blica en la restauraci¨®n de unos templos que permanecen cerrados, Bueno se muestra comprensivo con otra de las dudas que manifest¨® la Iglesia cuando se opuso a este sistema. ¡°Las iglesias son lugares de culto, es un dato esencial¡±, dice el director general. ¡°Hay una comunidad que hace uso de los templos y, al margen de las creencias de cada uno, hay que respetar el derecho a la libertad religiosa, que nos impide colocar c¨¢maras en el interior. Sobre el problema de la seguridad, el sistema podr¨ªa garantizar que no hubiera problemas con los bienes, muchos de los cuales son de gran valor¡±, contin¨²a. ¡°La primera funci¨®n de una iglesia no es ser un lugar tur¨ªstico, por lo menos mientras est¨¦ sacralizada. Aun as¨ª, tenemos que ir convenciendo a los titulares de que esto es una gu¨ªa. No se puede invertir en aquello que no se usa¡±.
Fuentes de la Fundaci¨®n responden que en todo momento se plante¨® un sistema en el que los visitantes se registraran entregando sus datos, incluso su DNI, para as¨ª saber en caso de desperfecto o robo qui¨¦n hab¨ªa pasado por all¨ª. ¡°Lo hemos convertido en nuestra lucha, sobre todo en territorios rurales¡±, explica V¨ªctor ?lvarez, director del ¨¢rea de Turismo y Cultura de la Fundaci¨®n. ¡°Tenemos un buen ejemplo en Aguilar de Campoo, ahora es una fuente de ingresos muy importante¡±.
24 habitantes
Durante mucho tiempo, Cristina P¨¢rbole, historiadora de la Fundaci¨®n, custodi¨® la iglesia de Vallespinoso de Aguilar, un pueblo palentino de 24 habitantes, seg¨²n datos del INE de 2020. En ese periodo funcionaba un programa de apertura de monumentos gestionado por la Junta y el Obispado que permit¨ªa abrir el templo de julio a septiembre. ¡°Con el paso de los a?os el programa se fue reduciendo. Hace unos tres, solo se abr¨ªa de mediados de julio a agosto¡±, recuerda. Fue entonces cuando lanz¨® en redes la campa?a #PorUnRom¨¢nicoAbierto destinada, dice, a que ¡°la gente conociera la situaci¨®n¡±. La iniciativa lleg¨® a las Cortes de Castilla y Le¨®n y consigui¨® que se ampliara el periodo de apertura este a?o del 13 de julio al 13 de septiembre en ¡°algunos templos¡±.
Con esta decisi¨®n se asegur¨® que custodios como Carlina, de 90 a?os, responsable de las llaves en Villanueva de la Torre, estuviera m¨¢s liberada de sus labores. O que en Vallespinoso, donde no hay un responsable, se dejara la iglesia abierta. ¡°Este verano han crecido los visitantes un 20%¡±, recuerda P¨¢rbole, que a¨²n se muestra insatisfecha con las medidas. ¡°La tecnolog¨ªa es un aliado, pero ya no es suficiente¡±, contin¨²a ?lvarez, ¡°puede ser m¨¢s ¨²til para crear programas de empleo para que j¨®venes se puedan ocupar de las iglesias, estudiantes de Historia del Arte, por ejemplo¡±.
En conclusi¨®n, la mayor parte de estos templos permanecen cerrados excepto cuando hay liturgia, en per¨ªodos vacacionales o cuando los custodios abren las puertas. Pero desde la Fundaci¨®n recuerdan que, como ya sucede, ¡°en los pr¨®ximos planes de restauraci¨®n y conservaci¨®n del patrimonio se incluir¨¢ un pacto con la Administraci¨®n y el obispado para que sea condici¨®n obligatoria [a cambio de las subvenciones] que estos centros se puedan visitar¡±, respetando su funci¨®n lit¨²rgica.