Dios, alcohol y soul incendiario: Nathaniel Rateliff, el Van Morrison del siglo XXI
Tras una vida marcada por la religi¨®n y la b¨²squeda de un camino art¨ªstico, el m¨²sico estadounidense, que apoya al pol¨ªtico Bernie Sanders, publica ¡®The Future¡¯, un trabajo que galopa con la fuerza de un pura sangre
De cara bonachona, aunque con una penetrante mirada de ojos azules y una tupida barba rojiza, su aspecto remite a uno de esos incendiarios pastores evang¨¦licos del viejo cintur¨®n b¨ªblico estadounidense. De hecho, Nathaniel Rateliff lo fue. O algo que se le pareci¨® bastante. ¡°Fue hace mucho tiempo¡±, reconoce. ¡°Pero dej¨¦ que Dios dejase de ser un problema para m¨ª¡±, confiesa. Oriundo de Misuri, uno de los Estados pertenecientes a esa extensa regi¨®n donde el cristianismo evang¨¦lico tiene un profundo arraigo social que condiciona la moral, la educaci¨®n e incluso la pol¨ªtica, este m¨²sico de 43 a?os ...
De cara bonachona, aunque con una penetrante mirada de ojos azules y una tupida barba rojiza, su aspecto remite a uno de esos incendiarios pastores evang¨¦licos del viejo cintur¨®n b¨ªblico estadounidense. De hecho, Nathaniel Rateliff lo fue. O algo que se le pareci¨® bastante. ¡°Fue hace mucho tiempo¡±, reconoce. ¡°Pero dej¨¦ que Dios dejase de ser un problema para m¨ª¡±, confiesa. Oriundo de Misuri, uno de los Estados pertenecientes a esa extensa regi¨®n donde el cristianismo evang¨¦lico tiene un profundo arraigo social que condiciona la moral, la educaci¨®n e incluso la pol¨ªtica, este m¨²sico de 43 a?os form¨® parte de un grupo de misioneros cuando era adolescente. Se dedicaba a reclutar personas para la Iglesia hasta que decidi¨® dejarlo cuando se cans¨® de las formas en las que sus compa?eros predicaban, imponiendo su visi¨®n sobre los dem¨¢s. ¡°Entonces, encontr¨¦ la salvaci¨®n en la m¨²sica¡±, afirma.
Una salvaci¨®n que ahora, m¨¢s de dos d¨¦cadas despu¨¦s, se expresa de una forma tan ardiente que bien podr¨ªa dejar en pa?ales los sermones apocal¨ªpticos que hablan de Dios, el pecado y la muerte. El fuego que hoy maneja Rateliff se desprende a trav¨¦s de un febril soul, cuyo ¨²ltimo testimonio es The Future, el ¨¢lbum que acaba de publicar junto a su banda, The Night Sweats, con la que vuelve a reunirse tras su anterior e introspectivo disco, And It¡¯s Still Alright, un trabajo en solitario con el que rindi¨® homenaje a su amigo fallecido, el talentoso m¨²sico Richard Swift.
Me encanta Van Morrison. Es un cantante muy poderoso. Eso s¨ª, est¨¢ un poco loco. Solo espero no acabar como ¨¦l¡±
Con un grupo vitam¨ªnico, The Future galopa con la fuerza de un pura sangre de soul y rhythm and blues de vieja escuela. ¡°La palabra ¡®futuro¡¯ era una forma de conectar las canciones. Escrib¨ª la mayor¨ªa durante la pandemia. Intento aproximarme a la idea de esperanza en todas ellas. Es algo que sal¨ªa instintivo, quiz¨¢ porque es mi forma de ser. No buscaba regresar a las cosas que nos sucedieron, sino que quer¨ªa mirar hacia delante y ser optimista¡±, explica el cantante y compositor durante una entrevista en un hotel cercano a la Gran V¨ªa de Madrid.
A Rateliff el fervor religioso le viene de familia. Se crio con unos padres muy creyentes que tocaban en la iglesia en St. Louis, en plena Am¨¦rica profunda. ¡°Mis comienzos con la m¨²sica se los debo principalmente a mi madre. Ella tocaba la guitarra y me empujaba a hacerlo. Al final, incluso me compraron una bater¨ªa. Era algo que me agradaba. Creo que mi primera banda fue con mi madre, cuando ten¨ªa siete a?os. ?Sabes lo que te digo?¡±, pregunta con media sonrisa. Cuando cumpli¨® 10 a?os, se mudaron a Denver, donde su padre falleci¨® cuando ¨¦l ten¨ªa 14 y tuvo que dejar de estudiar para ponerse a trabajar en una f¨¢brica de productos de alimentaci¨®n. Sin embargo, no abandon¨® la m¨²sica: por las noches tocaba en locales de micr¨®fono abierto. ¡°Era de esos sitios donde la gente sal¨ªa y hac¨ªa de todo. Yo sol¨ªa tocar dos canciones, tiempo suficiente para que la gente no te prestase m¨¢s atenci¨®n¡±, r¨ªe. ¡°?La verdad? Creo que despu¨¦s de esas noches le perd¨ª el miedo a cualquier escenario¡±.
Entonces era un cantautor que escuchaba a Leonard Cohen, Bob Dylan e incluso ¡°mucho doo-wop¡±. La religi¨®n segu¨ªa teniendo un peso importante en su vida, pero un buen d¨ªa se hart¨® de tanta monserga. Primero, se lanz¨® de lleno al blues con Born In The Flood, una formaci¨®n que obtuvo bastante ¨¦xito en Denver. Y, luego, se busc¨® la vida en solitario con el folk. Se mantuvo en el circuito regional de Colorado, pero no consegu¨ªa romper el cascar¨®n a nivel nacional. Anclado y obsesionado con su camino art¨ªstico y su lucha interna tras abandonar la religi¨®n, se dio a la bebida. El alcohol protagoniz¨® parte de sus primeros a?os de m¨²sico profesional. ¡°Beb¨ªa mucho y mis canciones iban de eso, pero sin conseguir encontrar un sitio¡±, explica.
Ese sitio le lleg¨® con el soul. Y el soul lleg¨® con The Night Sweats, la banda de talentos a la que se uni¨® y que le llev¨® a fichar por Stax, el m¨ªtico sello de soul sure?o, casa de Otis Redding, Wilson Pickett o Carla Thomas. ¡°La m¨²sica soul celebra la vida. Esa es su mayor fuerza. Suele ser esperanzadora, alegre, vitalista. Pocas veces ver¨¢s canciones de soul que tengan algo que ver con estar enfadado¡±, comenta. Los dos discos anteriores a The Future que Rateliff sac¨® con la banda eran toda una celebraci¨®n. Y poco le preocupa si el g¨¦nero que encumbr¨® a su amado Otis Redding ya se ve como un estilo del pasado. ¡°No me importa¡±, dice con una risotada. ¡°Intento hacer la m¨²sica que me gusta. Amo el soul y lo hago con todo el coraz¨®n¡±.
Un coraz¨®n que tambi¨¦n guarda un compromiso social y pol¨ªtico. El m¨²sico est¨¢ detr¨¢s de The Marigold Project, una fundaci¨®n propia que aborda cuestiones de justicia racial, social y econ¨®mica en diferentes ciudades. Y, al mismo tiempo, ha sido uno de los mayores apoyos p¨²blicos del candidato dem¨®crata Bernie Sanders. ¡°Bernie es una gran voz. Es un pol¨ªtico que ha abordado estos temas desde dentro del Partido Dem¨®crata. Y eso ha hecho sentir culpable a parte del aparato dem¨®crata. Un aparato elitista. Hay mucha gente enfadada en Estados Unidos. Gente que solo busca hacer cambios sin pensar en las consecuencias de esos cambios. Eso nos llev¨® a Donald Trump. Creo que Bernie siempre ha sido la soluci¨®n para la izquierda en mi pa¨ªs¡±.
Rateliff ha dormido poco. Tiene desfase horario y se esfuerza por conversar, pero es primera hora de la ma?ana y est¨¢ notablemente cansado. Una imagen muy distinta a su ferviente m¨²sica, que en escena es como un cicl¨®n. Tiene la virtud de penetrar con una intensidad inusual, incluso en las baladas o los medios tiempos. Una virtud que recuerda a Van Morrison, como si este tipo tambi¨¦n blanco, bajito y con carisma fuera su disc¨ªpulo m¨¢s aventajado. ¡°Me encanta Van Morrison¡±, asegura. ¡°Es un cantante muy poderoso. Eso s¨ª, est¨¢ un poco loco. Solo espero no acabar como ¨¦l¡±, a?ade entre risas.