La cancelaci¨®n de una obra teatral de Lydia Cacho en Toledo provoca nuevas acusaciones de censura contra PP y Vox
Los artistas denuncian que las malas pr¨¢cticas de las instituciones a la hora de firmar los contratos les dejan en una situaci¨®n de fragilidad y alimenta la injerencia pol¨ªtica
¡°Dos a?os de gira en Espa?a, p¨²blico ovacionando de pie a [las actrices] Marta Nieto, Marina Salas, Alicia Aguirre y a su director Jos¨¦ Martret. Esta es la primera vez que la obra es cancelada por el PP. Es un mon¨®logo de teatro documental independiente. #LaInfamia¡±. Con este mensaje publicado la noche del lunes en Twitter, la periodista y escritora mexicana Lydia Cacho confirmaba a sus seguidores que ...
¡°Dos a?os de gira en Espa?a, p¨²blico ovacionando de pie a [las actrices] Marta Nieto, Marina Salas, Alicia Aguirre y a su director Jos¨¦ Martret. Esta es la primera vez que la obra es cancelada por el PP. Es un mon¨®logo de teatro documental independiente. #LaInfamia¡±. Con este mensaje publicado la noche del lunes en Twitter, la periodista y escritora mexicana Lydia Cacho confirmaba a sus seguidores que el espect¨¢culo La infamia, basado en su libro autobiogr¨¢fico Memorias de una infamia, no iba a representarse, como estaba previsto, el 15 de diciembre en el teatro Rojas de Toledo, y apuntaba razones ideol¨®gicas al se?alar como responsable de esa decisi¨®n directamente al PP, que gobierna en el Ayuntamiento de la ciudad tras arrebatar la alcald¨ªa al PSOE en las elecciones municipales del pasado mayo. Es un acto que la autora ha calificado de ¡°censura¡± en una entrevista el lunes en la cadena SER. ¡°El nuevo Gobierno de PP y Vox que entr¨® en Toledo, y que elimin¨® el ¨¢rea de Igualdad, pregunt¨® qu¨¦ obras estaban cerradas y la cancelaron¡±, se?al¨® Cacho en la radio.
La denuncia de la periodista, que vive exiliada en Espa?a desde 2019 tras sufrir un intento de asesinato por parte de unos sicarios, emerge en un contexto de alarma en el mundo de la cultura por la sucesi¨®n de cancelaciones de este tipo que se est¨¢n produciendo tras la llegada de nuevos equipos a los gobiernos municipales y auton¨®micos liderados por el PP y Vox, como es el caso de Toledo, amparadas en una pr¨¢ctica habitual en el ¨¢mbito de las artes esc¨¦nicas: las actividades se programan con mucha antelaci¨®n, pero los contratos no se formalizan hasta pocas semanas antes de su celebraci¨®n, lo que da v¨ªa libre para alegar razones presupuestarias como motivo de la suspensi¨®n frente a acusaciones de censura ideol¨®gica.
Es lo que ocurri¨® tras conocerse en junio la cancelaci¨®n del espect¨¢culo Orlando en Valdemorillo (Comunidad de Madrid), la de El mar: visi¨®n de unos ni?os que no lo han visto nunca poco despu¨¦s en Briviesca (Burgos) o la de Romeo y Julieta despiertan hace un par de semanas en Granada. Y lo que vuelve a suceder ahora en Toledo: mientras la presidenta del Grupo Socialista en el Ayuntamiento, Milagros Tol¨®n, habl¨® de ¡°censura¡± tras conocer ayer la suspensi¨®n de La infamia y advirti¨® de ¡°la deriva ultraderechista y radical que est¨¢ tomando el Gobierno del PP y Vox en la ciudad de Toledo¡±, el PP replica que la decisi¨®n se ha tomado por razones presupuestarias: ¡°Ante la escasez de recursos, hay que priorizar¡±, ha explicado esta ma?ana a la prensa local la concejala Marisol Illescas. Una portavoz del PP ha asegurado a este peri¨®dico que ese dinero se ha destinado a poner en marcha un plan de igualdad y a la instalaci¨®n de puntos violeta para las pr¨®ximas fiestas de la ciudad.
Pero la explicaci¨®n, como en los casos antes citados, no ha convencido ni al PSOE ni a los directamente perjudicados. Tras sufrir en carne y hueso la censura en su pa¨ªs, Cacho no ha dudado en calificar de ¡°censura¡± la cancelaci¨®n de La infamia, en la que reconstruye el secuestro del que fue v¨ªctima despu¨¦s de que publicara en 2005 una investigaci¨®n sobre una red de pederastia, subrayando de paso la persistencia de la violencia contra las mujeres en su pa¨ªs. Basada en sus Memorias de la infamia y adaptada al teatro por la propia Cacho, la obra se estren¨® en Madrid en diciembre de 2021, con direcci¨®n de Jos¨¦ Martret, y desde entonces ha estado de gira por toda Espa?a, cosechando aplausos tanto por lo que cuenta como por la interpretaci¨®n de las actrices Marta Nieto y Marina Salas, que se alternan en el papel de la protagonista.
Seg¨²n ha explicado a este diario Eva Paniagua, directora de Come y Calla, empresa productora del espect¨¢culo, la representaci¨®n qued¨® apalabrada a finales de abril con la Concejal¨ªa de Igualdad de la anterior corporaci¨®n, del PSOE, suprimida ahora e integrada ahora en el ¨¢rea de Asuntos Sociales, Inclusi¨®n, Familia y Mayores, que decidi¨® programar la funci¨®n el 15 de diciembre en el teatro Rojas como parte de las actividades previstas en torno a la celebraci¨®n del D¨ªa Internacional contra la Violencia de G¨¦nero el 25 de noviembre y reserv¨® una partida de 7.500 euros, confirman a este peri¨®dico fuentes del PSOE. ¡°Por las din¨¢micas institucionales, los contratos se suelen firmar unos 20 d¨ªas antes, pero das por hecho que el trato est¨¢ cerrado y bloqueas la fecha fijada en la agenda de los artistas. Pero visto lo que est¨¢ pasando, el sector est¨¢ preocupado. No solo por las cancelaciones que estamos conociendo, sino por lo que vendr¨¢: ahora nos enteramos porque precisamente hay cancelaciones, pero dentro de unos meses, directamente no nos llamar¨¢n y ya est¨¢. Vamos a tener que ser muy valientes los productores para meternos en proyectos que puedan tener el riesgo de ser rechazados en el futuro. Y esto es muy perjudicial para el sector y para el arte¡±, lamenta la productora.
Como consecuencia de esa preocupaci¨®n, justo hace un mes naci¨® la plataforma ciudadana OLA (Organizaci¨®n por la Libertad Art¨ªstica), integrada por creadores, activistas y defensores de la libertad de expresi¨®n. Alberto Gonz¨¢lez Pulido, miembro y asesor jur¨ªdico del colectivo, explica que precisamente uno de los objetivos de OLA es acabar con lo que denomina ¡°las malas pr¨¢cticas de las instituciones en cuanto a la firma de los contratos art¨ªsticos¡±, que dejan a los creadores en ¡°una situaci¨®n de fragilidad extrema que facilita la censura¡±. ¡°En las negociaciones del Estatuto del Artista, llevamos reivindicando mucho tiempo que se obligue al sector p¨²blico a firmar cartas de compromiso. Esa precariedad laboral determina la injerencia pol¨ªtica, no solo a posteriori como estamos viendo ahora con estos ¨²ltimos casos, sino de antemano: si est¨¢s a merced de los pol¨ªticos y son ellos los que deciden lo que se programa o no, t¨² mismo puedes llegar a autocensurarte para adaptarte a sus gustos¡±, advierte Gonz¨¢lez Pulido.