Periferias, lujo cultural

Secreto de minor¨ªas ilustradas con inquietudes culturales, el festival Periferias de Huesca siempre fue una anomal¨ªa del destino. Que una ciudad de 50.000 habitantes dispusiese de una programaci¨®n tan de autor, tan selecta, tan particularmente pu?etera en las cosas buenas e interesantes del mundo art¨ªstico, aunque la mayor¨ªa de ellas fuesen minoritarias, era un accidente incongruente que en alg¨²n momento ¨Cel pragmatismo del mundo real¨C ten¨ªa que resolverse¡­ por lo civil o por lo criminal. En ...

Secreto de minor¨ªas ilustradas con inquietudes culturales, el festival Periferias de Huesca siempre fue una anomal¨ªa del destino. Que una ciudad de 50.000 habitantes dispusiese de una programaci¨®n tan de autor, tan selecta, tan particularmente pu?etera en las cosas buenas e interesantes del mundo art¨ªstico, aunque la mayor¨ªa de ellas fuesen minoritarias, era un accidente incongruente que en alg¨²n momento ¨Cel pragmatismo del mundo real¨C ten¨ªa que resolverse¡­ por lo civil o por lo criminal. En este caso, el contubernio PP-VOX en Arag¨®n impuls¨® la censura de las ideas, que el gobierno municipal en manos del PP ejecut¨®. Tan cruel como caprichoso. Ya saben: cuando oigo la palabra cultura, saco la pistola¡­

La vida es as¨ª. Que insignes personalidades de derechas como Fernando S¨¢nchez Drag¨®, Alaska, Fernando Savater o Antonio Escohotado ¨Centre lo moderno de antes y lo rancio de ahora¨C pasasen por alguna de sus ediciones no ha impedido que los sabios dictaminasen que Periferias era un festival que ¡°solo sirve para regar a culturetas progres con cientos de miles de euros¡±. Con la palabra ¡°progres¡± hemos topado. Y con el dinero tambi¨¦n.

Periferias, en efecto, era un festival avanzado, renovador, de ¡°progreso¡± de las tendencias, indudablemente vanguardista, s¨ª, pero tambi¨¦n popular en su esencia did¨¢ctica. En sus carteles tem¨¢ticos agrupados en torno a ideas sugerentes, y con un punto de fuga psicod¨¦lico en su justificaci¨®n te¨®rica, Luis Lles y Juanjo Javierre, los dos inventores del milagro, nos ilustraron con sapiencia y buen gusto en rituales de apareamiento cultural abierto de miras. Que debutasen en Espa?a Vladislav Delay, ESG, James Chance, Digital Mystikz, Sugarhill Gang, Mark Stewart & The Maffia, Der Plan, The Slits, Zeitkratzer, Technotronic, So Solid Crew, Andy Palacio, Antipop Consortium y Se?or Coconut no les ha dicho mucho a los nuevos gestores del ayuntamiento oscense. Claro, no son Beyonc¨¦, dir¨¢n ufanos e ignorantes. Pero con un presupuesto total de 120.000 euros no se paga ni el catering de Beyo (a la que habr¨ªan contratado, sin dudar, si hubiesen podido: prejuicios cero).

El ide¨®logo y periodista musical Luis Lles (qu¨¦ buen director de Radio 3 habr¨ªa sido: ritmo global, sono mondiale, siempre con el radar conectado) y el m¨²sico Juanjo Javierre (plet¨®rico, sobre todo, en Mestizos y Soul Mondo) hicieron equilibrios num¨¦ricos y consiguieron que Sun Ra Arkestra, Jeff Mills, Arto Lindsay, The Jayhawks, Violadores del Verso, The Human League, Antony And The Johnsons, Tinariwen, Morente, Alva Noto, Paco Ib¨¢?ez, Ni?o de Elche, Sisa, Gong, Lydia Lunch, Amina, Pan Sonic, Eyeless In Gaza, Leopoldo Mar¨ªa Panero, Esther Ferrer, Israel Galv¨¢n, Chiquito de la Calzada, Perico Fern¨¢ndez, Chantal Maillard, Sergio del Molino, Fernando Arrabal, Leo Bassi, Manuel Vilas y Joaqu¨ªn Reyes, por ejemplo, mostraran su poder en Huesca. Platos variados en los carteles: rigor, humor, fervor y amor perif¨¦rico.

En la ciudad de, entre otros ilustres, Ram¨®n Ac¨ªn, Pep¨ªn Bello, Antonio Saura, Carlos Saura e Ismael Grasa, Periferias fue un orgulloso estandarte de ideas libres y nada dogm¨¢ticas que se ofreci¨® como refugio intelectual posible, entre lo erudito y lo festivo. Gracias por todo.