El artista vasco Ibon Aranberri gana el primer premio que otorga la Fundaci¨®n Macba

Ibon Aranberri (Guip¨²zcoa, 1969) es el primer ganador del Premio Fundaci¨®n Macba dotado con 50.000 euros. El Museo de Arte Contempor¨¢neo de Barcelona ha estrenado un galard¨®n propio, independiente a los nacionales, pero en el que ha involucrado a todo el sector del arte espa?ol y portugu¨¦s, desde Barcelona, premiando a un creador que, seg¨²n el jurado, tiene ¡°la capacidad para transformar las salas del museo en un espacio para la imaginaci¨®n social¡±.

Las l¨¢grimas ca¨ªan por el rostro del artista vasco, que ha celebrado este reconocimiento como una forma de ¡°seguir trabajando¡± tras un proyecto (ya casi) concluido que comenz¨® en la pandemia y se tradujo en dos exposiciones: Vista Parcial (Museo Reina Sof¨ªa, 2023) y Entresaka (Atrium Museoa). ¡°Sent¨ªa que me estaban sepultando en vida con esta idea de una retrospectiva de media carrera¡±, ha explicado el creador que combina en su obra la escultura, la fotograf¨ªa y el cine, entre otras disciplinas. ¡°Lo recibo con el ¨¢nimo de seguir¡±, ha dicho, ¡°es mucho dinero, adem¨¢s, para los presupuestos que solemos manejar los artistas¡±.

Al lado de Aranberri, el colectivo Cabello/Carceller, Sandra Gamarra y David Bestu¨¦ han escuchado que son los tres finalistas de esta primera edici¨®n. Cada uno recibir¨¢ 10.000 euros.

Este primer acto de anuncio del premio (la celebraci¨®n concluye la noche del martes con una gala de entrega) ha materializado la idea con la que se concibi¨®. Ainhoa Grandes, presidenta de la Fundaci¨®n Macba, Cristina L¨®pez, directora de este organismo, y Elvira Dyangani Ose, directora del museo, las impulsoras del reconocimiento, convocaron a artistas, galeristas, coleccionistas y museos para tantear qu¨¦ les parecer¨ªa celebrar la obra reciente de creadores (desarrollada en los dos ¨²ltimos a?os) para que sus nombres y sus trabajos ¡°formaran parte de la conversaci¨®n social¡±, ha explicado Grandes. Es decir, ayudar a ese inc¨®modo momento que suele ocurrir cuando se le pregunta a una amiga, conocido o familiar por dos o tres nombres de artistas contempor¨¢neos, y solo son capaces de citar de memoria a exponentes como Barcel¨®.

Adem¨¢s de la tarea de que se identifique a los nuevos creadores (no tiene que ser sin¨®nimo de emergentes), el galard¨®n pretende reubicar el trabajo art¨ªstico en la agenda. Encontrarle un hueco, no solo en una colecci¨®n privada o en las salas de un museo, sino que cuando se hable de g¨¦nero se recuerde, por ejemplo, a Helena Cabello y Ana Carceller, pareja de creadoras pionera en la reflexi¨®n sobre este tema en el arte, aunque hasta hace menos de una d¨¦cada, las referencias bibliogr¨¢ficas sobre su trabajo fueran escasas, algo de lo que son conscientes. ¡°Asaltar la instituci¨®n forma parte de nuestro trabajo porque no fuimos invitades durante mucho tiempo a ocuparlas¡±, han explicado. Creen que ¡°otro mundo y otras personalidades son posibles en el arte¡±, y conf¨ªan en que ¡°todo el mundo tiene derecho a ser seres completos y expresarnos como queremos¡±.

Pero, por lo menos en este momento, tienen dudas sobre lo que est¨¢ por venir. No citan el avance de la ultraderecha en Europa, la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, la reacci¨®n contra el feminismo y, el consecuente retroceso en los derechos de las mujeres, pero en sus breves palabras resuena la necesidad de aferrarse a este nuevo galard¨®n. ¡°Hemos trabajado sin la presi¨®n del ¨¦xito, no esper¨¢bamos premios ni benepl¨¢citos, por eso vamos a disfrutar de este porque viene una d¨¦cada complicada¡±, han dicho sobre un galard¨®n que reconoce sus muestras Una voz para Erauso. Ep¨ªlogo para un tiempo trans, en Azkuna Zentroa; y La ocupaci¨®n, en el Museo Patio Herreriano de Valladolid.

Sandra Gamarra, la artista peruana que se convirti¨® en la primera latinoamericana en representar a Espa?a en la pasada edici¨®n de la Bienal de Venecia, la mayor cita mundial del arte contempor¨¢neo, ha a?adido otro tema a esa conversaci¨®n que en los ¨²ltimos a?os ha tenido su particular foro en las salas de los museos. Su trabajo consiste en investigar el patrimonio art¨ªstico y cultural para demostrar la falta de narrativas decoloniales. Ese fue el espejo que le puso delante a Espa?a en Pinacoteca migrante, su muestra en la cita veneciana y por la que ha sido galardonada. ¡°Uso la pintura para desmontar los relatos ya hechos¡±, ha descrito su trabajo compuesto por im¨¢genes de colecciones estatales espa?olas que forman parte de un imaginario muy propio, pero que se podr¨ªan encontrar en cualquier lugar de Europa y Norteam¨¦rica. ¡°El museo te determina, hace estanco el conocimiento, yo quiero querer romper las certezas y la comodidad, y ese monocanal en el que se ven las cosas¡±.

Bestu¨¦ combina pr¨¢cticas escult¨®ricas diversas, alrededor de espacios concretos, entre otros, su ciudad, Barcelona, para, ha dicho, ¡°contar algo del presente y rescatar cosas del pasado que no est¨¢n del todo claras¡±. As¨ª lo hizo en Ciudad de arena, en Fabra i Costas de la ciudad condal, y Pajarazos, en el Museo Patio Herreriano de Valladolid, sus dos exposiciones reconocidas con este premio.

Antes de empezar a hablar, el artista ha preguntado si pod¨ªa hacerlo en catal¨¢n. Inmediatamente, ha recibido la aprobaci¨®n de las tres creadoras de este premio que, minutos antes, hab¨ªan remarcado que este es ¡°un galard¨®n espa?ol y portugu¨¦s que se da desde Barcelona¡± y al que han conseguido convocar a un comit¨¦ de seis especialistas en arte contempor¨¢neo (responsables de lista de candidatos) y a un jurado compuesto por seis expertos, entre los que se encuentran el asesor de cultura de la Generalitat, el director del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sof¨ªa o Abdellah Karroum, director del Museo ?rabe de Arte Moderno en Doha, Qatar. Es decir, internacional y multidisciplinar.