Ona Carbonell y Gemma Mengual: ¡°Cerramos un c¨ªrculo de la sincro espa?ola¡±
Las espa?olas, que se juegan el podio este martes en la final, reflexionan sobre c¨®mo viven su deporte y la evoluci¨®n del equipo
Gemma Mengual (Barcelona, 1977), plata en Pek¨ªn, y Ona Carbonell (Barcelona, 1990), plata en Londres, son los dos extremos geneal¨®gicos de la nataci¨®n sincronizada espa?ola. El mundo m¨ªtico y el mundo contempor¨¢neo. La piscina de R¨ªo las descubre inesperadamente reunidas en un d¨²o hist¨®rico. Dentro o fuera del podio, he aqu¨ª a dos de las mejores nadadoras que ha ofrecido este deporte.
Ona Carbonell. En el ciclo de Londres ten¨ªa una espina clavada que para m¨ª fue no ir convocada a Pek¨ªn. Cuando me vi fuera de los Juegos de 2008 quise dejarlo. Fue el peor palo que me he llevado nunca. No tuve una depresi¨®n pero estuve cerca. Llorando cada d¨ªa. Ahora tengo una espina distinta porque este ciclo ha sido muy duro por razones extradeportivas. En Londres todo el mundo nos envolv¨ªa y cre¨ªa en nosotras. Ahora hay gente que no cree. Todas esas inseguridades que la gente te intenta transmitir me han hecho madurar. He conseguido mantener la confianza en m¨ª misma.
Gemma Mengual. Estos Juegos son como un regalo porque me siento joven. Hace dos a?os me dec¨ªan: ¡®?T¨ªrate al agua!¡¯. Y yo: ¡®?Que no, que me voy a ahogar!¡¯. Pero mira. Aqu¨ª estoy.
O. C. Esto ha pasado porque ten¨ªa que pasar y es muy bonito vivirlo. Gemma y Andrea en Pek¨ªn; Andrea y yo en Londres; Gemma y yo en R¨ªo. Son todas las conexiones posibles. Es como si cerr¨¢semos un c¨ªrculo en la sincro espa?ola.
G. M. Las dos hemos sido solistas y eso hace que al crear el d¨²o ya no crees una coreograf¨ªa b¨¢sica. Quieres crear algo con una personalidad. Tienes que buscar darle el car¨¢cter que tenemos nadando, y deducir de eso una manera ¨²nica de hacer. Pero integrarlo no tiene por qu¨¦ ser dif¨ªcil porque al final no tenemos un estilo tan diferente. T¨² has venido detr¨¢s y nos has visto nadar a las que ¨¦ramos mayores. No es imitaci¨®n. Es lo que has mamado.
O. C. Sincronizar est¨¢ siendo m¨¢s f¨¢cil de lo que imaginaba. Cuando bailas m¨¢s con el coraz¨®n sincronizas menos y las dos estamos acostumbradas a una forma muy parecida de hacerlo. Es un tema de constituci¨®n. Las dos somos muy flexibles y fibrosas, con las piernas muy largas. El movimiento sale igual de forma innata. El punto de energ¨ªa, la amplitud.
G. M. Nosotras tenemos nuestra manera de hacer. No me gustar¨ªa ejecutar como un robot. La m¨²sica me mueve. Necesito expresar lo que siento. Las rusas me flipan. No les ves las caras en todo el d¨²o. Est¨¢n todo el tiempo movi¨¦ndose de arriba abajo. Ese movimiento tiene un componente art¨ªstico tambi¨¦n, claro. Admiro esa exactitud. Ellas ponen el chip, pim, pam, pum. Y adi¨®s. Les sale. Nosotras estamos hist¨¦ricas, calentando, intentando que nos corra la sangre y ellas siempre tan tranquilas antes de competir.
O. C. Nosotras nadamos m¨¢s desde el coraz¨®n. Tenemos pasi¨®n por bailar, por sentir y hacer sentir, y eso se nota en el agua. Ellas son muy constantes y han tenido mucha paciencia. Nosotras necesitamos m¨¢s est¨ªmulos. Cambiamos constantemente las coreograf¨ªas. Nos aburrimos de repetir mil veces un movimiento. Ellas se pueden pasar tres horas haciendo lo mismo, los 365 d¨ªas del a?o. Nosotras sabemos nuestros fallos pero nos cuesta abordarlos como lo hacen ellas. Repetir una rutina nos aburre porque no hemos crecido con esa din¨¢mica. A ellas las estimula m¨¢s el control.
G. M. Recuerdo al equipo de Canad¨¢ de los Juegos del 2000, que en aquella ¨¦poca era chul¨ªsimo. Lo vimos ahora y, comparado con lo que empez¨® a hacer Rusia en 2008¡ ?nos pareci¨® tan lento! ?Qu¨¦ separadas nadaban las canadienses! La evoluci¨®n ha ido hacia eso: velocidad, velocidad, ca?a, ca?a.
O. C. La sincronizada es subjetiva. A lo mejor al juez de la derecha le gusta la m¨²sica cl¨¢sica, al de la izquierda el rock y al del medio otra cosa. En el libre hay m¨¢s margen para crear. Estamos bailando el Concierto de Aranjuez con las piernas. Son figuras con mucha dificultad. Nuestro objetivo en el d¨²o libre es hacer un d¨²o en un solo. En vez de movimientos tan rectos para d¨²os o equipos, es como si bail¨¢ramos un solo juntas. Esto es muy dif¨ªcil pero es muy bonito. Es un reto. Es arriesgarse a hacer algo muy distinto. Es una apuesta. T¨² has tenido que aprender nuevas t¨¦cnicas de remada.
G. M. Cada vez se sabe m¨¢s de c¨®mo remar. En mi ¨¦poca era ¡®sobrevive, rema como puedas¡¯. Investig¨¢bamos c¨®mo lo hac¨ªan las americanas. Luego yo fui aprendiendo. El biomec¨¢nico del CAR nos va indicando c¨®mo poner las manos y las piernas seg¨²n el cuerpo de cada una. Hay cosas que a m¨ª no me van bien y a ti s¨ª. Nuestros puntos de flotabilidad son diferentes. Y te vas adaptando para que lo que se vea afuera sea lo m¨¢s parecido posible. Yo contigo tengo que remar m¨¢s que con Andrea. Porque t¨² flotas mucho boca abajo casi sin remar, y yo al rev¨¦s, floto mejor con la cabeza arriba. Entonces est¨¢s aprendiendo a poner las piernas m¨¢s altas al deslizarse con la cabeza fuera del agua. Y yo me estoy poniendo mazas porque estoy entrenando la fuerza para flotar con las piernas hacia arriba; porque yo tengo m¨¢s m¨²sculo y me cuesta mantenerme arriba.
O. C. Yo memorizo m¨¢s los movimientos; t¨² sientes m¨¢s la m¨²sica.
G. M. Y t¨² eres muy r¨¢pida mentalmente, con una memoria muy buena para las correcciones. Sabes corregirte, intuir c¨®mo has hecho el ejercicio sin verlo en el v¨ªdeo. Yo nado la sincro m¨¢s visceralmente y t¨² m¨¢s t¨¦cnicamente. Pero ahora soy menos visceral porque me tengo que fijar m¨¢s en la t¨¦cnica para aprender cosas nuevas. Estoy pensando en mi f¨ªsico, en llegar bien al final de cada rutina, porque tengo una edad y hay d¨ªas en que estoy m¨¢s cansada. Necesito calentar y descansar m¨¢s. Ahora intento nadar menos con el coraz¨®n y m¨¢s pensando en lo que hago y gestionando.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![Diego Torres](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F905d2291-3bc7-4951-9b10-14c4000df79f.png?auth=71540af241da7b2d45e7ccd8aac79de09feb0b15263f9f39b72b24c67ae654b5&width=100&height=100&smart=true)