12 ultras del Legia detenidos tras los disturbios en Madrid
Los aficionados polacos se enfrentan con los agentes en los aleda?os del Santiago Bernab¨¦u
Los ultras del Legia de Varsovia, unos de los m¨¢s peligrosos de Europa, han causado incidentes en Madrid como ya hicieron en el duelo contra el Dortmund. En esta ocasi¨®n, se han enfrentado con la Polic¨ªa Nacional en los aleda?os del Santiago Bernab¨¦u antes del partido contra el Real Madrid, para el que se hab¨ªa preparado un dispositivo con 2.000 efectivos.?Los agentes dispararon balas de goma y cargaron contra los violentos aficionados polacos que arrojaban botellas de vidrio. El SAMUR atendi¨® a siete heridos, cinco hinchas y dos polic¨ªas. Los disturbios se saldaron con 12 detenidos de nacionalidad polaca, tres la pasada madrugada, seg¨²n confirm¨® Delegaci¨®n de Gobierno a Europa Press.?
Cerca de las 18.00, un grupo de ultras lleg¨® en silencio a Sol. Los escoltaba la Polic¨ªa. Se tomaron todas las medidas de seguridad habituales en partidos de alto riesgo. Los agentes trataron de controlar a los aficionados del Legia, reservaron un vag¨®n del metro para ellos, que los llev¨® al Bernab¨¦u sin detenerse en ninguna parada. El punto de encuentro de los aficionados eran los jardines de la Avenida del Brasil, a 400 metros del estadio del Real Madrid. Los polacos robaron bufandas y comida de los tradicionales puestos de venta e intentaron arrebatar las c¨¢maras de algunos periodistas.
Tras contenerlos por unos minutos en la calle de Pedro Texeira, los agentes permiteron que los hinchas avanzaran poco a poco. Cuando llegaron a la calle de Rafael Salgado, que bordea el norte del Santiago Bernab¨¦u, comenzaron los primeros disturbios. Los caballos de la Polic¨ªa se descontrolaron porque los ultras arrojaron botellas de vidrio y las fuerzas de seguridad respondieron con balas de goma. El SAMUR atendi¨® a varios hinchas polacos, que ten¨ªan cortes en la cabeza.
Los aficionados merengues tambi¨¦n se vieron afectados porque las fuerzas de seguridad no los dejaban entrar a la zona de sus puertas de acceso y se gener¨® una situaci¨®n ca¨®tica.
La pelea dur¨® algunos minutos y la Polic¨ªa decidi¨® acorralar a los polacos. Uno de los hinchas, con un altavoz, empez¨® a calmar a la gente y a pedirle a los agentes que retrocedieran para ganar espacio y poder entrar de manera tranquila al estadio.
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