Muere Nacho Trelles, el hombre que transform¨® el f¨²tbol mexicano

El f¨²tbol de M¨¦xico, antes de 1958, se dedicaba a coleccionar derrotas en las Copas del Mundo. Fue hasta la Copa del Mundo jugada en Suecia cuando, desde el banquillo, hubo un revulsivo. Se llamaba Ignacio Trelles (Guadalajara, 1916). Estaba contratado para ser la mano derecha del entrenador espa?ol Antonio L¨®pez Herranz, pero en realidad Trelles era el capataz que impart¨ªa las ¨®rdenes. Sus estrategias, apegadas a la estrategia del baloncesto, le sirvieron para que el Tri consiguiera su pri...

El f¨²tbol de M¨¦xico, antes de 1958, se dedicaba a coleccionar derrotas en las Copas del Mundo. Fue hasta la Copa del Mundo jugada en Suecia cuando, desde el banquillo, hubo un revulsivo. Se llamaba Ignacio Trelles (Guadalajara, 1916). Estaba contratado para ser la mano derecha del entrenador espa?ol Antonio L¨®pez Herranz, pero en realidad Trelles era el capataz que impart¨ªa las ¨®rdenes. Sus estrategias, apegadas a la estrategia del baloncesto, le sirvieron para que el Tri consiguiera su primer empate, 1-1 frente a Gales. En 1962 logr¨® que los mexicanos ganaran por primera vez en un Mundial: 3-1 frente a Checoslovaquia. Trelles era la br¨²jula y falleci¨® este mi¨¦rcoles a los 103 a?os por un infarto.

Nacho Trelles naci¨® durante los a?os de la Revoluci¨®n mexicana y el f¨²tbol a¨²n no era profesional en su pa¨ªs. Empez¨® a jugar en el club Necaxa en la ¨¦poca amateur, en 1934. Sus primeros a?os fueron de esplendor al ganar tres torneos de Liga y una Copa. En 1943 vio la profesionalizaci¨®n del campeonato mexicano. Sus andanzas pasaron por el Am¨¦rica, Monterrey, el extinto equipo de los Vikingos de Chicago y en el Atlante. ¡°En su regreso, en 1948, tuvo un choque con un portero y le rompi¨® la rodilla. En esos tiempos esas operaciones se deb¨ªan hacer en Estados Unidos o Argentina. Se tuvo que retirar", cuenta a EL PA?S Carlos Calder¨®n, historiador del f¨²tbol mexicano.

Ante el retiro obligado, Trelles tom¨® el curso de entrenador de f¨²tbol. Su primera oportunidad fue en el Zacatepec, un equipo del centro de M¨¦xico que para 1950 apenas se hab¨ªa inscrito para jugar en la segunda divisi¨®n. En su primer a?o les ascendi¨® y despu¨¦s gan¨® dos t¨ªtulos de la primera divisi¨®n. Esa inusual capacidad para trabajar con los futbolistas le vali¨® para ser llamado por la selecci¨®n de M¨¦xico, primero como asistente con roles de entrenador en jefe, y luego como el responsable del grupo. En la Copa del Mundo de 1962 el triunfo contra la dura Checoslovaquia le vali¨® para blindar su reputaci¨®n. Su sello fue cambiar los h¨¢bitos de los futbolistas mexicanos.

¡°Trelles era el personaje hist¨®rico m¨¢s importante de M¨¦xico¡±, resume Calder¨®n. El veterano entrenador estuvo al frente de la selecci¨®n de M¨¦xico en cinco ocasiones (1957, 1960-62, 1965-69, 1975-75 y 1990-91). Dirigi¨® a su pa¨ªs en m¨¢s de 106 partidos. Adem¨¢s de las dos Ligas conseguidas con el Zacatepec, hizo campe¨®n al desaparecido Marte, Toluca y al Cruz Azul, equipo al que se hizo hincha. Gan¨® siete t¨ªtulos, una de las grandes rachas en su pa¨ªs. ¡°Le acusaban de ser defensivo, pero ten¨ªa en su casa libros de estrategia de baloncesto. Utilizaba esas estrategias¡±, menciona Calder¨®n, autor del libro Nacho Trelles 100 a?os de f¨²tbol.

¡°Trelles ten¨ªa un genio de la fregada. Le critiqu¨¦ que en los entrenamientos nos pusiera a hacer tiros a gol. Recuerdo que un d¨ªa Nacho vino con un bal¨®n de f¨²tbol americano, me pidi¨® que lo agarrara y... ?No pod¨ªa! Me call¨® la boca. No ten¨ªamos entrenador de porteros, ¨¦l se adelant¨® a la ¨¦poca¡±, cont¨® a este peri¨®dico Antonio La Tota Carbajal, el m¨ªtico portero mexicano que jug¨® cinco Mundiales.

En sus ¨²ltimos a?os, Trelles estaba l¨²cido y se dedicaba a visitar el campo del entrenamiento del Cruz Azul. ¡°Uno no tiene posibilidades para juntar todos los recuerdos que uno quisiera, se quedan ah¨ª... En el alma¡±, dijo en julio de 2019. Con una gorra o boina, Trelles no se cans¨® de recibir galardones. El f¨²tbol mexicano ha perdido a su primer gran gur¨².