Atlante, el equipo de obreros mexicanos, ahogado en Canc¨²n

Un gol anulado al Zacatepec frente al Atlante provoc¨® un persecuci¨®n a los hinchas visitantes, los atlantistas. Era 1991. La pizarra se?alaba un 2-2 y ambos clubes se jugaban el pase a la final para ascender a primera divisi¨®n. F¨¦lix Fern¨¢ndez, guardameta blaugrana, vio c¨®mo los aficionados de casa empezaron a perseguir a su propia porra. Corrieron al vestidor y all¨ª empezaron a recibir a sus seguidores ensangrentados. ¡°Tuvimos que curarlos, se fueron con nosotros en el bus, les prestamos nuestra ropa¡±, relata Fern¨¢ndez.

Escenas como esas marcaron la historia del Atlante, un equipo ense?a de la Ciudad de M¨¦xico con 101 a?os de historia y que enamor¨® a la entidad desde los inicios del siglo XX, pero que ahora agoniza en la segunda divisi¨®n exiliado, sin entrenador y con adeudos a sus jugadores.?

El club se fund¨® en los llanos polvorientos de lo que ahora es el barrio bohemio de la capital mexicana, la Condesa. La instituci¨®n, que adopt¨® los colores blaugrana, inici¨® como iniciativa de campesinos, panaderos y obreros que jugaban a la pelota. ¡°Por eso el Atlante tiene el cu?o de ser un equipo propiamente del pueblo. Los once jugadores que sal¨ªan cada semana eran prietos y se les empez¨® a llamar prietitos¡±, comenta el historiador Carlos Calder¨®n.

¡°Atlante es un tesoro de la cultura popular urbana. Un equipo que creci¨® en condiciones humildes, casi dir¨ªa que en miseria¡±, opina uno de los hinchas fervientes del conjunto y periodista de ESPN, Heriberto Murrieta. Uno de los jugadores emblema fue el alba?il Fernando Rojas, a quien apodaban Pata dura, el mote se lo gan¨® al jugar descalzo y pegarle como un tubo al esf¨¦rico en 1927.

La gloria empez¨® a encumbrar al equipo en la etapa amateur de la liga mexicana al ganar dos ligas (1931-32 y 1940-41). El primer t¨ªtulo profesional cay¨® en 1946-47 y luego tres torneos de copa. Con el tiempo el equipo afront¨® malos resultados que lo llevaron a ser un conjunto de media tabla.

Atlante ha tenido a seis distintos due?os en su historia. El primero fue el jefe del Estado Mayor del presidente mexicano L¨¢zaro C¨¢rdenas, el general Jos¨¦ Manuel N¨²?ez. Luego lo asumi¨® el due?o de una empresa litogr¨¢fica, Fernando Gonz¨¢lez. En 1978 pas¨® a manos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y ah¨ª ¡°se volvi¨® millonario el Atlante, contrat¨® grandes jugadores¡±, comenta Murrieta en referencia al m¨¢ximo goleador, Cabinho y a Ricardo La Volpe. Parad¨®jicamente, el equipo tuvo un renacimiento gracias a una instituci¨®n que, en la d¨¦cada de los ochenta, era solvente econ¨®micamente. ¡°Tuvieron mucho dinero, pero no lo hicieron campe¨®n¡±, comenta Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa, el exdue?o del equipo que compr¨® en 1987.

En su trayectoria los atlantistas acumulan cuatro descensos, el ¨²ltimo fue en 2014. ¡°Influyen mucho los cambios de due?os. La gente que lo ha tenido no lo ha apreciado. Tampoco dieron ¨¦nfasis a jugadores de la cantera, de los barrios bajos. En los ochenta de los torneos llaneros sal¨ªan los jugadores¡±, considera Calder¨®n. ¡°Han sido pocos los a?os de abundancia, de riqueza. Es un equipo que est¨¢ acostumbrado a sufrir¡±, menciona F¨¦lix Fern¨¢ndez.

Fue en 1993 cuando el equipo del pueblo alz¨® su segundo trofeo de liga y el tercero fue en 2007. El equipo ha jugado en los tres estadios principales de la Ciudad de M¨¦xico: el Azul, el Ol¨ªmpico Universitario y el Azteca. Tambi¨¦n ha jugado en Quer¨¦taro y en el Estado de M¨¦xico. Su ¨²ltima mudanza, la m¨¢s dolorosa para sus hinchas al llevarse al equipo a m¨¢s de 1.600 kil¨®metros con destino en las playas de Canc¨²n, Quintana Roo.

¡°Ahora el Atlante radica en un balneario globalizado, que si bien est¨¢ en la Rep¨²blica mexicana es un lugar vacacional¡±, considera Murrieta. ¡°Era complicado mantener al equipo en la capital porque deb¨ªamos pagar la renta del estadio, seguridad, pagar hasta 500.000 pesos de arbitraje y los ingresos ya no sal¨ªan. Trat¨¦ de buscar lo mejor¡±, comenta Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa, quien como presidente del conjunto autoriz¨® el traslado y destierro del equipo. Siete a?os despu¨¦s de ser campeones cayeron a segunda.

El club pertenece a Alejandro Burillo, familiar del due?o de Televisa, Emilio Azc¨¢rraga, desde 1996. ¡°No entiendo c¨®mo es que no se ha vendido y c¨®mo un due?o puede olvidar a su equipo. S¨¦ que hay interesados. Hay escenas dram¨¢ticas en las que ?no hay medicina para un viaje! Olv¨ªdate de la ropa y comodidades¡±, menciona Fern¨¢ndez. Los hinchas se han opuesto al patr¨®n y han protestado. Al ¨²ltimo t¨¦cnico, Eduardo Fentanes, la instituci¨®n le qued¨® a deber dos meses de sueldo. Mientras tanto el Atlante contin¨²a su camino dentro del laberinto.

Un club que ha nutrido de entrenadores

En el Atlante han emergido dos de los entrenadores m¨¢s destacados en M¨¦xico: Ricardo La Volpe, quien dirigi¨® al equipo en tres etapas (1988-89,1991-96 y 2012-13). En 1991 alz¨® el ¨²nico t¨ªtulo de liga que ha conseguido el entrenador argentino. Otro de ellos es Miguel Piojo Herrera, quien se estren¨® como estratega en el 2002 al 2004, gracias al apoyo de Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa, donde los mantuvo en la liguilla. De joven fue uno de los jugadores emblem¨¢ticos del conjunto atlantista. El director t¨¦cnico que hizo campe¨®n mundial a la selecci¨®n de M¨¦xico sub-17 en 2011, Ra¨²l Potro Guti¨¦rrez, tambi¨¦n se visti¨® de blaugrana. Otros han sido Jos¨¦ Guadalupe Cruz, Wilson Graniolatti y el ahora secretario general de la Federaci¨®n Mexicana de F¨²tbol, Guillermo Cant¨².