Un desaf¨ªo colosal para el Bar?a

No hay equipo en Europa con la autoestima del Bayern, hoy m¨¢s arrogante que nunca, insoportable para sus rivales, tambi¨¦n para el Bar?a. Los azulgrana intentan encontrar en la soberbia alemana el fuego para alimentar sus aspiraciones en el cruce de cuartos de este viernes en el estadio Da Luz de Lisboa (21.00, Movistar Liga de Campeones). La tradici¨®n asegura que sus duelos no son partidos cualquiera sino que acostumbran a marcar tendencia desde los tiempos de Cruyff y la Quinta de Lo Pelat (1996) hasta la llegada de Gua...

No hay equipo en Europa con la autoestima del Bayern, hoy m¨¢s arrogante que nunca, insoportable para sus rivales, tambi¨¦n para el Bar?a. Los azulgrana intentan encontrar en la soberbia alemana el fuego para alimentar sus aspiraciones en el cruce de cuartos de este viernes en el estadio Da Luz de Lisboa (21.00, Movistar Liga de Campeones). La tradici¨®n asegura que sus duelos no son partidos cualquiera sino que acostumbran a marcar tendencia desde los tiempos de Cruyff y la Quinta de Lo Pelat (1996) hasta la llegada de Guardiola (2008). El Bayern apost¨® por el catal¨¢n como entrenador en 2013 despu¨¦s de que Beckenbauer quedara rendido por los cuatro goles que tom¨® su equipo en poco m¨¢s de media hora en el Camp Nou el 8 de abril de 2009. La etapa deportiva de Tito, compa?ero de Guardiola, qued¨® marcada despu¨¦s, el 1 de mayo de 2013, cuando el Bar?a encaj¨® ante los alemanes un global de 7-0. El c¨¢ncer mat¨® a Tito Vilanova y los azulgrana no encontraron el camino del ¨¦xito hasta la llegada de Luis Enrique, sustituto del Tata Martino.

Los fichajes de Ter Stegen, Rakitic y Luis Su¨¢rez dibujaron un equipo diferente, expresado en el tridente que el uruguayo form¨® con Messi y Neymar, campeones en Berl¨ªn 2015. Aquel proyecto envejeci¨® tanto por la fuga del brasile?o y los 33 a?os de Su¨¢rez y Messi que el Bayern quiere firmar ahora su finiquito en Portugal. La supervivencia azulgrana, sin embargo, no tiene l¨ªmites y sus jugadores se niegan a dimitir y dejar de gobernar en el Camp Nou.

Al Barcelona, rutinario y v¨ªctima de la inercia, se le advierten m¨¢s defectos que virtudes, muy dependiente de Messi. La mejor versi¨®n del 10 permiti¨® eliminar al N¨¢poles en media hora de f¨²tbol plet¨®rico solo alterado por el VAR. Jug¨® el equipo de forma pujante y sincronizada, sin que los delanteros se desentendieran de la presi¨®n, hasta que se partieron en dos para refugiarse en las ¨¢reas, sobre todo la de Ter Stegen.

Mal asunto si el Bar?a cede el bal¨®n y se queda en su cancha, o no repliega bien, porque el Bayern le supera en pegada ¡ªtiene una media de 3,8 goles por partido¡ª y, si se escucha a sus portavoces, desde Rummenigge a Matth?us, Lewandowski es mejor que Messi y Ter Stegen todav¨ªa tiene que aprender de Neuer. Los n¨²meros les dan la raz¨®n: el rosarino ha marcado tres tantos en la Champions por 13 el polaco, a cuatro del r¨¦cord de Cristiano.

El club de Baviera es hoy una m¨¢quina dentro y fuera de la Bundesliga. Tiene continuidad en el juego, su f¨²tbol es de mucho ritmo y dispone de m¨²ltiples recursos, incluido Coutinho, prestado por el Barcelona. La vida es un camino de rosas y vino en el Bayern desde la llegada de Flick: 29 victorias en 32 partidos, 26 sobre 27 si se cuentan los ¨²ltimos ¡ªempat¨® con el Leipzig¡ª.

Los j¨®venes mezclan estupendamente con los veteranos en M¨²nich y, fuerte como se siente con la presi¨®n, solo se le adivinan problemas con los laterales por la sanci¨®n de Pavard y las molestias de Davies. Acaso peca de inexperiencia en las citas exigentes, una ventaja para un club veterano ¡ªla media de edad de los titulares es de 29,6 a?os¡ª como el Bar?a.

Griezmann o 4-4-2

Las dudas embargan sin embargo al equipo de Seti¨¦n desde que Messi advirti¨® que tal y como jugaba no le alcanzaba para ganar la quinta copa ¡°linda y deseada¡± a la que aspira el 10. No se sabe si actuar¨¢ Griezmann o Seti¨¦n optar¨¢ por un cuarto centrocampista despu¨¦s de recuperar a Arturo Vidal y Busquets. Demb¨¦l¨¦ recibi¨® este jueves el alta m¨¦dica.

Al Bar?a, muy discontinuo actualmente, le cuesta manejar la incertidumbre, manifiesta en Lisboa. Ha sido un equipo imbatible en la bonanza y vulnerable en la penuria si se repasa su trayectoria en Europa. Hoy no tendr¨¢ el exceso de confianza de Roma ni Liverpool porque se cuestiona hasta la continuidad de Seti¨¦n. Quien est¨¢ seguro de s¨ª mismo es el Bayern, m¨¢s alem¨¢n que nunca, favorito al t¨ªtulo despu¨¦s de despellejar al Tottenham y al Chelsea.

Los alemanes cuentan a fin de cuentas con los mismos trofeos que los azulgrana: cinco. Ambos son adem¨¢s los ¨²nicos campeones en Lisboa. La cita se presenta desequilibrante para ambos y decisiva para el Bar?a, consciente de que a un partido tiene opciones de poner el punto y seguido y no el punto final a su historia reciente ante el ogro Bayern.