La Copa, de padres a hijos

Su singularidad es manifiesta. Solo tres familias, tres padres y tres hijos, pueden presumir de haber ganado la Copa de Europa. Tres estirpes de campeones y dos son espa?olas. De los Sanch¨ªs, Manuel padre y Manolo hijo, a los Busquets, Carlos y Sergio, y los Maldini, Cesare y Paolo.

Manuel Sanchis Mart¨ªnez (Alberique, Valencia, 1938) lleg¨® al Real Madrid en 1964 y estuvo siete temporadas. Lateral veloz, fibroso, de los que sub¨ªa la banda con sentido, su imagen con las medias ca¨ªdas era un cl¨¢sico de la ¨¦poca. Adem¨¢s de la Sexta, gan¨® cuatro Ligas y una Copa. Internacional. Disput¨® el Mu...

Su singularidad es manifiesta. Solo tres familias, tres padres y tres hijos, pueden presumir de haber ganado la Copa de Europa. Tres estirpes de campeones y dos son espa?olas. De los Sanch¨ªs, Manuel padre y Manolo hijo, a los Busquets, Carlos y Sergio, y los Maldini, Cesare y Paolo.

De la yey¨¦ a la S¨¦ptima.

Manuel Sanchis Mart¨ªnez (Alberique, Valencia, 1938) lleg¨® al Real Madrid en 1964 y estuvo siete temporadas. Lateral veloz, fibroso, de los que sub¨ªa la banda con sentido, su imagen con las medias ca¨ªdas era un cl¨¢sico de la ¨¦poca. Adem¨¢s de la Sexta, gan¨® cuatro Ligas y una Copa. Internacional. Disput¨® el Mundial 66 con la Selecci¨®n y marc¨® un gol a Suiza. Falleci¨® con 79 a?os en octubre de 2017.

El primog¨¦nito, Manolo Sanch¨ªs Hontiyuelo (Madrid, 1965) naci¨® casi con la Sexta entre las manos. A los 12 a?os ya ten¨ªa ficha con el Real Madrid. Debut¨® con el primer equipo en Primera con 18 de la mano de Di St¨¦fano. La Champions se le resisti¨® nada menos que 15 temporadas, pero de sus palabras se deduce que siempre estaba presente en sus oraciones.

¡°Fui cumpliendo a?os con la desesperaci¨®n del madridismo por no ganar la Copa. Pasaron 32 a?os, los que ten¨ªa cuando conseguimos la S¨¦ptima. Desde que comenc¨¦ a jugar en el primer equipo, una de las cosas que m¨¢s deseaban mis padres era que yo pudiera ganarla. El d¨ªa de ?msterdam mi padre, que estaba all¨ª, fue casi m¨¢s feliz que yo. Me contaron que al acabar le entr¨® una llorera tremenda de satisfacci¨®n y felicidad¡±.

Manolo tiene en la memoria sus charlas familiares en la huerta de su casa de Valencia. ¡°Las conversaciones con mi padre casi siempre eran sobre f¨²tbol. ?l defend¨ªa su generaci¨®n, yo la m¨ªa. Y cuando la cosa se pon¨ªa un poco complicada, siempre me dec¨ªa: ¡®Vamos a ver, ?t¨² cu¨¢ntas Copas de Europa tienes? Ninguna. Yo tengo una, se acab¨® la conversaci¨®n¡¯. Y me tocaba callarme. Cuando ganamos la S¨¦ptima decidimos sumar y los dos ten¨ªamos dos¡±.

En la larga espera por su Champions tuvo sus momentos de duda. Luego gan¨® una segunda en 2000. ¡°Aquel Madrid m¨ªo gan¨® cinco Ligas consecutivas y pele¨¢bamos siempre por ella. Aquella semifinal contra el PSV (1988) gener¨® frustraci¨®n y malestar. Tuve suerte y me lleg¨®, pero por ejemplo al Buitre, a M¨ªchel, a Martin V¨¢zquez, no. Hubo momentos en los que pens¨¦ que nunca llegar¨ªa mi hora. Sobre todo cuando pasas la treintena y te das cuenta de que tienes m¨¢s f¨²tbol por detr¨¢s que por delante. El d¨ªa de ?msterdam si sumamos todas las circunstancias que nos rodearon a todos yo era quien m¨¢s derecho ten¨ªa a tenerla un rato m¨¢s que los dem¨¢s. Por el tiempo que llevaba, por la historia familiar, por la capitan¨ªa¡­ Y solo la tuve un minuto m¨¢s que los dem¨¢s. No me dejaron mucho m¨¢s¡±.

Finalmente valora su casi exclusiva situaci¨®n. ¡°Que solo haya tres familias habla de lo dif¨ªcil que es la circunstancia, y es para sentirte muy especial. No solo por haber tenido la misma profesi¨®n de tu padre, que no es tan sencillo, y que los hijos tengan el mismo nivel; tambi¨¦n porque ha sido en el mismo club y luego porque hay que ganarla. A mi padre y a m¨ª fue una de las cosas que m¨¢s nos llen¨® de orgullo familiar. Nos hac¨ªa muy felices. En nuestro caso disfrut¨¢bamos de las dos. Y eso solo hay tres familias que lo pueden decir¡±.

Los Busquets, cuatro de cinco.

El Barcelona tiene cinco Champions. En cuatro de ellas el apellido Busquets est¨¢ presente. Lucen m¨¢s las tres del hijo, de Sergio, 2009, 2011 y 2015, y sus 113 partidos en sus 12 participaciones, pero la del padre, Carles, tiene el sabor y el valor de ser la primera. No disput¨® ning¨²n partido aquel curso del 92 y siempre estuvo a la sombra de un indiscutible Zubizarreta, pero formaba parte de la plantilla y en casi todos los partidos de la Copa de Europa estuvo en el banquillo.

Carles Busquets (Barcelona, 1967) s¨ª jug¨® el a?o antes la final de la Recopa del 91 por estar sancionado Zubi. El Manchester United gan¨® con dos goles de Hughes. Su debut en la Champions no llega hasta dos a?os despu¨¦s de ganarla en Wembley ante la Sampdoria (1-0). Fue el 14 de septiembre de 1994 contra el Galatasaray. En total, en su carrera, disput¨® nueve partidos en esta competici¨®n.

Julio Salinas, compa?ero, en aquel Bar?a del 92, guarda un grato recuerdo de Carles. ¡°Lo llevaba bien para no jugar nunca. Asumi¨® su rol. Asimil¨® que Zubi era el titular¨ªsimo. ?l a s¨ª mismo se consideraba un afortunado. Su carrera no tiene nada que ver con la del hijo, que es uno de los mejores futbolistas del mundo en su puesto. Carles era un portero normal. Sab¨ªa lo que hab¨ªa. Incluso que le pod¨ªan fichar a alguien y dejar de ser suplente. Era un tipo tranquilo, campechano. No se met¨ªa en nada. Un t¨ªo de equipo. De no abrir nunca la boca. No era inquieto como pod¨ªa ser yo. Si ves a su hijo ahora, as¨ª era ¨¦l entonces. Le lleg¨® la oportunidad cuando se fue Zubi. Jugaba bien el bal¨®n. Dominaba el juego de posici¨®n. Llam¨® la atenci¨®n por el pantal¨®n largo, marc¨® una tendencia¡±.

Maldini, saga de capitanes.

El apellido Maldini manda en seis de las siete Copas de Europa del Milan. Cesare, con 31 a?os, era el capit¨¢n de la primera del Milan en Wembley, en 1963, tras derrotar al Benfica (2-1). Era el primer t¨ªtulo para un club de su pa¨ªs y por tanto ¨¦l fue el primer italiano en levantar el trofeo. Lo hizo con una sola mano. Antes hab¨ªa perdido otra final contra el Real Madrid en 1958 en Bruselas.

Paolo vino al mundo cinco a?os despu¨¦s del gran ¨¦xito paterno y con 21 a?os, en 1989, en el Camp Nou contra el Steaua (4-0) consigui¨® su primera Orejona. Despu¨¦s llegar¨ªan otras cuatro: 1990, 94, 2003 y 2007. En la cuarta, en M¨¢nchester contra la Juventus 40 a?os despu¨¦s, tambi¨¦n llev¨® el brazalete, como su padre. ¡°Ya no es el hijo de Cesare, ahora yo me he convertido en el padre de Paolo¡±, coment¨® el progenitor al ver a su hijo levantar el trofeo.

A pesar de sus cinco entorchados, a uno del m¨ªtico Paco Gento, el ahora ejecutivo del Milan considera que en su carrera ha tenido mala suerte. ¡°Soy el jugador m¨¢s perdedor de la historia. Gan¨¦ cinco Copas de Europa, pero perd¨ª tres finales, una Supercopa europea, tres finales de la Intercontinental, una final del Mundial, una del Europeo¡­¡±. Olvida que adem¨¢s de las cinco Champions gan¨® otros 20 t¨ªtulos.